Blood & Crown [Vkookv] TS

BLOOD.

Es "frágil" y enfermizo todo el tiempo hablan de cuando podría morir, se ha esforzado en aprender todo lo necesario para gobernar su país. Algunos rumoran que solo durará dos días en el poder y su enfermedad la vida le va a extinguir, la huesuda lo persigue por pasillos y rincones y eso a Taehyung le sabe mal.

Es el príncipe de un país pequeño pero prospero, el primero en la línea de sucesión por eso grandes sacos de presión le caen cada día sobre los hombros pero no se rinde, va a todas sus clases de esgrima, equitación, economía, estrategia y un sin fin de información para cuando su padre le ceda el trono.

A Taehyung le gusta su papel de príncipe, aunque ha pasado algunos periodos en cama debido a su "extraña" enfermedad para él vale la pena si le preguntan porque sueña que algún día va a reinar. Sin embargo, lo que algunas veces le pesa más que el metal precioso de la corona que en ocasiones usa en la cabeza es que pese a todos los privilegios de los que goza no puede elegir a quien amar.

Y no es una circunstancia pequeña como que no hayan innumerables doncellas de caderas anchas y pechos suaves que complazcan además de los placeres de la carne las exigencias incuestionables de alianzas estratégicas para el país que algún día va a gobernar, no, ojalá fuera eso, el verdadero problema es que a Taehyung no le gustan las mujeres y sabe que no le van a gustar.

Fue muy pequeño cuando lo descubrió con el chico que cuidaba los caballos que tanto le gustan, un ingenuo beso que le hizo sentir como si un animal se le revolcara en la panza, ¿Qué como se terminaron dando un beso?, ni ellos mismos lo saben. Se vieron a los ojos, sucedió y le gustó a ambos, pero a otras personas no... cuando alguien los observó en medio del quinto de sus dulces besos su madre se enteró y Taehyung jamás volvió a saber del chico, tampoco le preguntó a su madre debido a su desmedida reacción, recuerda su cara roja y todas las malas palabras que usó ignorando su estatus de soberana y las personas que se enteraron explicaron que ese comportamiento desviado del príncipe podía ser parte de su enfermedad incurable. Lo que podría ser cierto, los hombres le seguían atrayendo. Pero un hombre no le daba descendencia, eso si lo aceptaran como soberano, por lo que estaba haciendo el esfuerzo por "cambiar".

Y bueno, es que de verdad debería estar uno enfermo para no disfrutar del fastuoso baile de navidad que se ofrecía en palacio, la excusa perfecta para delimitar con chismorreos las sumas y alianzas que habían de las que podrían ser las futuras parejas de Taehyung si habían estado envueltas en romances o amoríos. A Taehyung ya le dolían los pies de bailar con doncellas y hablar con condes por lo que decidió salir muy a pesar del frío que hacia afuera.

La nieve blanca combina con su traje en tonos de blanco y azul haciéndolo parecer irreal a propósito y no solo por su vestuario, si había algo de lo que se hablaba de Taehyung además de su enfermedad y diligencia, su empeño por no morir, era de su exquisita apariencia. Era hermoso como una escultura tallada por un experto artesano, rasgos finos y lunares emulando constelaciones le daban un aire bastante celestial.

El príncipe llegó al límite del balcón custodiado por dos escaleras que daban con el jardín trasero y antes de terminar su suspiro Taehyung se percató de que había un hombre completamente vestido de negro en medio de la nieve blanca, justo en el camino que en primavera se llenaba de hermosas rosas que le gustaban a él y a su madre. ¿Había llegado tarde a la celebración? y de ser así ¿Por qué permanecía afuera con el frío tan espeluznante que hacía?

-Identifíquese-pide en voz alta el próximo soberano formando algo de vaho al hablar debido al frío que hace a esas horas.

El hombre se acerca al parecer para no forzar su garganta-Su alteza, Jeon Jungkook a su servicio.

-¿Sólo Jeon Jungkook?-era extraño que no se presentara por sus títulos, quizá era un campesino o un siervo que se quiso colar en el palacio.

-Solo Jeon Jungkook-afirma el hombre sosteniéndole la mirada y ahí Taehyung confirma lo vulgar de su educación.