One love

16 2 2
                                    

Porque a él lo tenía, pero era a ti a quien quería.

.

.

.

Aunque no sepa lo que hago, solo sé que tu presencia me ayuda a escapar de lo que pueda ocurrir en mi mente, tomarlo con calma suena tan difícil, al verte reír con alguien que no soy yo, porque tal vez no sea un destino para mí. Toma mi mano, y podremos escapar, si tan solo fluyeras conmigo, empezar una nueva aventura, pero entonces caigo en la verdadera realidad, que aunque quisiera, jamás estarías para mí, y así mi mente me juegue en contra, creando recuerdos que no serán posibles, solo me queda verte ir y entre más pronto pueda hacerlo, solo ahí dejara de doler. No quiero forzarlo, pero me entristece tanto, ver como lo admiras y eres devoto de él... pero no eres capaz de mirar a los lados o lo que te rodea, los pequeños esfuerzos que hago por ti, resultan ser nada a comparación de lo que hace él, que se reduce a nada. Si tan solo me dieras una oportunidad, podrías darte cuenta de que tengo un lugar guardado para ti en mi corazón y mente, pero tu solo silencio me mata, cuando estamos cara a cara, pero siempre es él. Pero no importa, no importa cuantas lágrimas tenga que derramar, solo quiero verte feliz, aun si es sin mí, eso no importa. Odio a Carlos, pero puedo fingir que lo amo, mientras eso me mantenga cerca a ti, no es oportuno pensar en un mañana cuando ni siquiera tengo un hoy, pero por más que quiera, temo que jamás me veas como él.

Quiero un mundo donde solo podamos estar los dos, pero te ves tan imposible de alcanzar y aunque no fuera mucho, sentí hermoso cuando mencionaste que mi nombre era lindo, pero aquella ilusión se terminó cuando vi que le decías lo mismo a Sofía, cuando veía como a mí parecías hacerme de lado, excusándote con que era tu "soulmate" y por eso lo tratabas bien, pero que eran esos momentos donde podíamos hablar, hasta que aparecía él, y te atrapaba en una burbuja, él no te amaba, no lo hacía, pero creías en él, era un ejemplo para ti, un sol que irradiaba luz, pero ¿Quién era yo? ¿Quién era yo cuando por momentos me tomabas la mano, y me decías que era lindo, o bueno, como debería tomar un "Carlos y tú, son los más hermosos"? No lo entendí jamás, te gustaba él, solías decir, pero te sentías libre conmigo, jamás entendí, tu forma tan extraña de ver las cosas, Carlos decía que le gustabas, pero no parecía hacer nada, solo reírse de como te intentabas allegar más a él, y yo solo moria de envidia, cuando él me decía que se conocían desde hace mucho, cuando lo ayudabas a comprender sus tareas, siempre me he caracterizado, por ser una persona autónoma y aprender a mi forma, pero en esos momentos no quería ser nada, más que una persona estúpida a la que puedas enseñar, tal vez así podría mantener tu atención por unos minutos.

El poliamor, lo vi como una excusa perfecta para poder acercarme a ti, sé que no fue la forma más apropiada, pero vamos, solo así tal vez me considerarías un poco, y funciono, porque dejaste de mandarme a la mierda y yo creí que me correspondías en cierta parte, cuando te escuche decir "me gusta un soft", yo era soft, en ese entonces. Caí en ingenuidad, pensando que podría ser yo, pero aquel sentimiento desapareció cuando lo nombraste a él, a Carlos. Por eso decidí, que era mejor dejar de lastimarme de esa forma, Dikon y yo cada vez éramos más cercanos y las pláticas se hacían más amenas, él me hacía olvidar el llanto que nacía en mí, me hizo sentir medianamente bien, trate de olvidarte con él, pensé que sería fácil, inicie un "romance" con él, pero no era igual, él me trataba bien, pero no eras tú, no eran tus manos las que me tomaban la mejilla, no eran tus labios los que se acercaban a mi rostro, no eran tus toques, simplemente no eras tú, porque jamás logre sacarte de mi mente. Lo podía tener a él, pero no lo quería, te necesitaba a ti, Daniel.

Mírame, despertando con el móvil, esperando una respuesta en un largo tiempo, para solo conseguir las más frías y tajantes palabras de tu parte, ¿Qué no me ves? Me estoy destrozando, te amo y no puedo evitarlo, pero a veces creo que debería salir a vivir mi vida en vez de esperar una respuesta, poco a poco me sentía más confundido por ti, no lo entendía, no entendía que querías, pero sé que me necesitas, porque al ver aquellos ojos oscuros como el mismo chocolate, podía percibir confusión y lo confirme cuando un día pasamos de insultos a una gran tensión, tensión que no quería admitir, porque según yo, te había olvidado, ¿No es así? Descubrí que no, cuando tus labios atraparon los míos, en un beso que trataba de decir más que solo palabras, aquel donde tomaste mis caderas y no me soltaste hasta que se nos fue el aire, no sabíamos que era lo que había pasado, pero lo dejamos pasar, tal vez con la idea de que solo era tensión, sin imaginar que aquello nos estaría encadenando de por vida, ahí es donde nos destinamos a enamorarnos.



Bound to fall in love | for him.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora