🍧Único🍧

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POV Jungkook:

¡Hola! Mi nombre es Jeon Jungkook y tengo 20 años, vivo o bueno, vivía en Busan  pero por una extraña enfermedad me tuve que trasladar a un lugar con aire y medio ambiente más limpios.

Por suerte mis padres tienen una situación económica muy buena y tienen varias propiedades y casas en distintos lugares y países. Así que decidí irme al centro de Italia, a una pequeña granja comprada por papá hace unos tres años cerca de Roccavivi, en el Parque Nacional del Abruzzo.

Normalmente los fines de semanas cuendo había buen clima, daba largos paseos por los faldeos de los cerros.

Este sábado amaneció con un sol radiante, me vestí con mi vestuario térmico, ya que aunque haga sol este lugar es bastante frío, preparé un par de sándwiches de jamón cerrano y mozzarella junto a una botella de agua y termo de café y salí rumbo al bosque.

Los senderos que usualmente utilizaba estaban bastante nevados, así que procedía con cautela. En mi caminar me sentí observada, esto era algo extraño,  ya que por lo general no hay animal alguno en este bosque.

Me gire a observar y no logré distinguir nada raro así que decidí seguir mi camino, de repente escuché una rama siendo quebrada y gire y lo logré verlo.

Era un lobo grande y gris, que se mimetizaba muy bien con la nieve y el tronco de los árboles.

Sé que los lobos se escabullen de los humanos y no te atacan si no se sienten amenazados, así que me di la vuelta despacio y seguí mi caminata.

El lobo me siguió por un largo trecho, a momentos se detenía y olfateaba el aire, de a poco me fue cerrando el camino. Llegamos a una arboleda y después había un barranco de una decena de metros, me detuve porque El lobo estaba en mi camino.

Estaba a unos diez metros de mí y olfateaba el aire, pensé que percibía la colación que llevaba en mi mochila así que saqué un sándwich y con cautela se lo acerque al hocico.

Se me heló la sangre cuando me gruñó mostrándome sus dientes, trate de mantener mi calma y comencé a hablarle.

-¿Qué quieres? ¿No quieres dejarme pasar?- Le dije y me di una bofetada mentalmente.

¿Cómo se supone que un animal me va a entender y por supuesto, a responder? Que idiota soy.

El lobo se acercó a mi y con cuidado comenzó a tirar de mi guante de cuero.

-¿Quieres que te acompañe?- El lobo se dio la vuelta y camino hacia el centro del bosque. Luego giro la cabeza y me miró. -¿Quieres que vaya contigo? - El simplemente siguió su camino y entonces lo seguí.

Caminamos cerca de una hora hasta que salimos del bosque y llegamos a la falda de una montaña, había una cueva. Cuando llegamos salieron de ella otros seis lobos a nuestro encuentro, inmediatamente uno se vino gruñendo hacia mí, no alcance a gritar.

El lobo gris lo interceptó en el aire y cayó sobre él mordiéndole el hocico y agarrandole cerca del cuello.
El lobo atacante se quedó quieto y el gris lo dejó ir, los otros lobos retrocedieron y nos dejaron el camino libre hacia la cueva.
¡Vaya! Creo que es indiscutible quien es el Lobo Alfa aquí  ¿no?

Entramos a la cueva. Había un olor animal  característico, no puedo decir que era hediondo, había un montón de pieles probablemente de las presas de los lobos, como estaban secas, hice con ellas una especie de lecho y me senté en ellas.

Alfa vino y empezó a tironear el guante nuevamente, así que me saque ambos guantes, luego me tironeo la chaqueta.

-¿Quieres que me quite mi chamarra?- Pregunte confundido. Alfa me olfateo por todos lados y luego metió su hocico en la banda y mordió los tirantes de mi pantalón térmico. -¿Quieres que también se saque los pantalones?- El lobo simplemente se sentó y entonces me pare y me quite las botas y los pantalones, también me quite la chaqueta y la camiseta, quedando así solamente con mis bragas de encaje negro.

 𝐿𝑜𝑏𝑜 𝐴𝑙𝑓𝑎  『𝙹𝚒𝙺𝚘𝚘𝚔』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora