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Capítulo uno - La nueva estudiante.
"Incluso ahora que ya hemos terminado, no puedo evitar buscarte."
(Pilot)
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Amelia siempre fue positiva cuando se trataba de la vida, siempre mirando el lado positivo y se aferró a la esperanza como si fuera un regalo querido. Esa fue probablemente la razón principal por la que se convirtió en un pilar de su familia, la protectora, la que mantenía todo unido.
Todo eso se volvió mucho más difícil el 23 de mayo de ese mismo año, 2009. El día que sus padres murieron, se ahogaron fue la explicación más clara. Su coche se salió del puente Wickery después de recogerla a ella y a su hermana gemela de una fiesta, las gemelas sobrevivieron, los padres no.
Amelia se paró frente a su espejo mirando las fotos que rodeaban dicho espejo, sus ojos permanecían más tiempo en el de sus padres. Su familia lo tuvo difícil después del funeral, pero ahora estaban bien, o al menos Amelia esperaba que lo estuvieran.
Después de la muerte de los padres Gilbert, Jenna quedó como la única tutora, lo que no fue una tarea fácil... cuidar de tres niños afligidos. Todos se atacaban de diferentes maneras.
Jeremy, el más joven, decidió dar un giro y meterse en las drogas.
Elena, la mayor, se cerró, prefirió estar sola y se mantuvo mucho más para sí misma.
Amelia, en el medio, se esforzó por hacer muchas cosas para olvidarse de todo, siempre estaba ocupada.
Pero ahora era un nuevo día. El primer día de vuelta a la escuela. Una pequeña sonrisa se formó en la cara de Amelia, no falsa, pero no era la sonrisa que todos siempre le habían dicho que amaban, la hermosa que podía hacer sonreír a todos junto con ella, y la mirada brillante en sus ojos que era única.
La mirada se había ido cuando ocurrió la tragedia.
Sin embargo, hoy estaría lleno de sonrisas falsas, que ella sabía. La gente también lo notaría. Fue difícil no hacerlo.
La apertura de la puerta hizo que la chica se volviera hacia su hermana gemela, no idéntica, que se paró en la puerta mirándola, parecía lista para irse, pero aún así los ojos de Elena se movieron hacia sus fotos antes de volver a Amelia, que mantuvo la pequeña sonrisa en su cara.
Ambas eran conscientes de que ninguna de ellas iba a ser la misma, pero también sabían que se tenían la una a la otra. Elena devolvió la sonrisa y abrió aún más la puerta.
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Cuando entraron en la cocina, las chicas se dieron cuenta de que Jenna estaba mirando a la nevera. Ella se volvió hacia ellas.- Tostadas, puedo hacer tostadas.- Jenna les dijo, todavía era nueva en todo el asunto de la crianza de los hijos, pero lo intentaba.
