"Casualidad"

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Algunos meses habían pasado, los dos omegas embarazados se les comenzaba a notar su pancita, Y el que mas había sufrido era Marco, Muchos cambios hormonales por parte de su pareja, incluso una vez por celos lo saco fuera de la habitación. El caso era que se puso celoso de Una enfermera, su nombre era Amanda, Ya que le estaba dando los medicamentos para Ace y este lo tomo de otra manera. Pero se lograron arreglar. Marco iba directo a la cocina por una taza de café.

-por Dios marco te ves terrible- dijo su hermano llamado Josu.

-Ace comúnmente tiene más problemas hormonales que de costumbre- suspiró.

-Comandante Marco es normal, el comandante de la segunda división casi da a luz, es decir que sus hormonas se alborotan más- dijo Dulce.

-aún así No puedo creer que no me deje dormir incluso algunas veces en nuestra habitación- dijo tomando su café sin azúcar.

-Ya verás cuando tengas a tu cachorro en tus brazos todo no habrá sido en balde- dijo su hermano vista.

Y no tardo en hacer acto de presencia El alfa de cabello peli café.

-buenos días a todos- dijo con una cara de pocos amigos ya que esas ojeras se le nota bastante.

-al parecer no eres el único que tiene complicaciones con su pareja marco- Dijo Haruta.

-izo está cada vez más molesta conmigo y no entiendo el porqué- suspiro- juro que esta vez no hice nada-

-te diré lo mismo que al Comandante Marco es normal casi da luz sus hormonas están más alborotadas- dijo Dulce.

-hoy no hice el desayuno, Y al parecer por eso se molestó- suspiró yendo a la cocina.

-hablando de desayuno tengo que llevarle el suyo a Ace- dijo Marco levantándose.

Y así pasaron la mayoría de los meses hasta el día del parto, dulce y ayumi estaban ayudando al Omega pecoso con el parto, mientras que al Omega de cabellos negros estaba ayudando a Zayra y Amanda.
Y los dos alfas estaban muy alterados por el dolor que sentía su Omega.

Después de varias horas de sufrimiento y gritos por fin ambos dieron a luz, el pecoso dio un pequeño niño de cabellos rubios, ojos azules y sus pecas.
Mientras que la otra pareja dio a una chica de cabellos cafés ojos negros y los ojos de su padre.

Todo el barco estaba emocionado por la llegada de los recientes cachorros al barco, pero el que más feliz estaba era su abuelo. En cuanto supo que sus hijos dieron a luz fue con ellos a ver, y miro a sus dos nietos sonrío y como regalo le dio una cadenita de oro.

Los padres estaban muy felices mientras que los omegas estaban exhaustos, aunque después de varias horas los pequeños comenzaron a llorar buscando alimento.

-Ace, El pequeño quiere comer- dijo Marco.

El pecoso con algo de esfuerzo abrazo a su hijo y lo pegó a su pecho para que esté comiera. Mientras con el de cabellos el Omega seguía dormido y el alfa peli café no sabía qué hacer.

-dios, Izo despierta.- dijo un poco nervioso.

Ambos niños al estar calmados los llevaron a la habitación, los alphas ayudaron a los omegas a regresar a su cuarto, y si los alphas pensaron que había terminado...estaban muy equivocados.