La Verdad de la Realidad

Beso?

Jessica Robinson.

Cuando vi a mi hija que se iba dar su primer beso, no lo pude evitar, fue tanto el impulso protector que lo único que pude hacer fue correr a donde estaban y preguntar.

Jessica: -¿Quiéren bocadillos?-

Vi como Ema sacudió levemente la cabeza y preguntó.

Ema: -¿Cómo, no te escuché?-

Jessica: -¿Qué si no quieren bocadillos?

Esta vez respondió el que le quería robar el primer beso a mi hija.

Gabriel: -Si, muchas gracias.

Sentí mucho alivio porque sabía que el resto de la noche no se iba a acercar más a Ema.

Me fui directo a la cocina a hacer un platillo rápido y fácil. Me decidí por un dip de hongos (Fue lo más rápido de hacer)

Ema Scott

Espero que el bocadillo que hizo mamá, me quite lo enojada que estoy con ella.

Deslizo las puertas de vidrio y entro directamente a la cocina y me encuentro con un olor a dip de hongos delicioso, definitivamente ya no estaré enojada con mamá se que lo único que quería era protegerme de que me rompan el corazón. Tiene toda la razón tal vez es por que es el primer chico que me gusta.

Gabriel: -Que rico huele señora Robinson-

Jessica: -¿De verdad?-

Gabriel: -Encerio señora huele riquísimo-

Ema: -Mamá no nos ¿Quieres dejarnos solos?- Le hice cara de perrito para que se fuera. Así lo hizo y me arregle un poco el pelo y lo vi por el rabo del ojo que me estaba viendo fijamente y al momento me sonrojé, escuché como rió levemente.

Le pregunté

Ema: -¿De qué te ríes?-

Gabriel: -Me encanta cuando te sonrojas y en especial por mí-

Ohhh no, se está poniendo muy romántico con migo (Eso no es bueno)

Ema: -Pues entonces te encantará mucho más que haga esto- Se lo dije en un susurro en el oído

Y empecé a acercarme (Para darle un beso). Me alejé de inmediato y dije

Ema: -Disculpa, se me olvido-

Gabriel: -Tranquila, eso me gustó mucho- Empezó a acercarse más y más y de pronto sentí como paró a unos cuantos centímetros de mis labios y me dijo

Gabriel: -Ven aquí nena- Y corte distancia y lo besé. Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo.

Mis labios calzaban perfectamente con los suyos, se movían al compás con los suyos. Sabían como una mezcla de menta con dulce. Simplemente fue EL DÍA PERFECTO.

Después del beso quede anonadada. Y se acercó a mi oído y me dijo suavemente

Gabriel: -Esperé este momento cada día de mi vida- Me surgió otro de los múltiples escalofríos cuando estoy con él.

Gabriel: -¿A donde quisieras ir en tu cita?-

Ema: -Quiero que me sorprendas-

Gabriel: -Siempre lo hago-

Ema: -Ya veremos- le guiñe un ojo coqueta

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