Una Vida a tu Lado [TERMINADA]

"59"

Narra Fabián Hoffman

Íbamos todos a Rusia, en realidad nunca me hubiera imaginado que ella estuviera ahí, en una zona tan remota y aislada de todo, porque ya habíamos tenido una ubicación antes y resultaba que era incorrecto.

Recordé que Albert ya violó una vez a Grecia, y uno de mayores temores era que lo volviera a hacer.

Vine junto con el equipo del FBI, además de Luca, quien se negó a esperar en casa como los demás. Y entendía, su hermana menor, la ha visto sufrir mucho, por eso no quería que se casará, y que se divorciara de mi.

—Fabián —lo mire junto a mi —Lo que no quiero es que perder a mi hermana así como perdí a mi madre

Ya estaba, ese era su miedo. A mí también me daba pánico pensar en cómo la señora Elena murió y que Grecia puede terminar igual. Pensar que estos meses fueron de angustia infinita y que Grecia pueda… no.

—Luca...

—Dejalo... —desvío la mirada —Yo, no te reprochó nada, solo se que mi hermana te ama —me miró —Y por eso... Si después de todo esto la encontramos y ella quiere seguir contigo, voy a respetar esa decisión.

Asentí

—Yo, no te veo como un hermano —dijo —Para mi siempre serás mi cuñado —palmeó mi espalda

—Nos estamos acercando —mire a un agente frente a nosotros

La camioneta se detuvo y a unos metros divisé la casa. Nosotros entraríamos después, ya que un grupo diferente la invade antes. La ansiedad apareció, estaba nervioso y solo quería entrar en esa casa de una vez por todas.

Teníamos chalecos antibalas y armas. Me sentía en una puta película, pero era real, de verdad iba a rescatarla.

—Está todo listo —dijo el agente —Hora de entrar

Y eso fue todo para que empezara a correr en dirección a esa casa como un loco. Al llegar a esta, noté que aún había hombres por ahí; Comencé a disparar hacía ellos mientras me adentraba más en la casa.

Me puse detrás de un muro y divisé a un tipo que me daba la espalda, jale el gatillo y la bala impactó su cabeza haciéndolo caer al suelo con rapidez. Corrí hasta ese sitio y apunté detrás de mí pero no era uno de los hombres de la casa.

—¿Dónde está mi esposa? —le pregunté a uno de los policías mientras seguía disparando

—La parte subterránea de la casa —dijo y se separó de mi

Iba para allá, esquivando balas y corriendo como nunca antes, reconocí las escaleras que llevaban a una parte oscura de la casa

—¡Tiene que ir con refuerzos! —dijo uno mientras disparaba

—¡No hay tiempo! —grité y baje las escaleras

Corrí por escaleras abajo, y me detuve en un gran pasillo, largo que daba vuelta a la izquierda, tenía luz y sus paredes eran blancas. Si Albert estuviera aquí el FBI se pondría muy feliz, ya que él es buscado por ellos desde hace muchos años. 

Tomé mi arma con mucha más firmeza y comencé a caminar por el pasillo, antes de girar a la izquierda había una puerta. La pateé sin control y la ví llena de sacos. Maldecí por lo bajó y continué mi camino.

Ella tenía que estar ahí...

Narra Grecia Evans

Intento abrir mis ojos pero una extraña sensación en mi abdomen y vientre me lo impide. Sentía frío, y un cierto vacío. Aún me sentía muy adormilada pero me senté, me sorprendió mucho ver qué aún estaba en la habitación.