•One•

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A Lee Minho siempre le gustó experimentar en varios aspectos de su vida. Probar nuevas comidas, salir a nuevos lugares, y sobretodo probar cosas nuevas con su pareja. Sobre todo si hablamos del sexo.

Habían probado muchas prácticas sexuales diferentes. Desde sexo con comida hasta sadomasoquismo. Claro, estas cosas eran siempre consensuadas por ambos.

Pero los últimos días el pelimorado había estado pensando en algo que no había intentado: Cambiar los roles, o mejor dicho ser el pasivo, puesto que siempre era él quien dominaba la situación. No es como que no le gustara, porque le encantaba demasiado hacer a su pequeño deshacerse en gemidos debajo de él, o arriba, dependiendo la posición.

Pero simplemente le dió curiosidad, a demás de que sabía el hecho de que el pelinegro era versátil en ese aspecto, un todo en uno por así decirlo, a pesar de que con él fuera el que se dejara dominar.

Volviendo al caso. Él tenía curiosidad, y por eso mismo mientras estaban ambos acostados en la habitación que compartían de su departamento, viendo una película a la cual no le estaba prestando mucha atención, pensó que sería buena idea preguntar.

- Sungie... —Llamó suavemente al menor que yacía acurrucado en su pecho, abrazándolo mientras veía la película—

- ¿Hm?

- ¿Puedo preguntarte algo... Ya sabes, por curiosidad?  —Preguntó un poco tímido. Claro, no preguntaba eso todos los días—

El menor se giró un momento para verlo mejor, notando las mejillas de su novio de un leve tono rosa. Le causó ternura sumando esa mirada un tanto insegura que tenía.

- ¿Qué quieres preguntar? Dime  —Jisung le sonreía tiernamente, dándole un poco más de tranquilidad cuando tomó su rostro con ambas manos—

- Solo por curiosidad... ¿Qué se siente que te la metan?

- ¡¿Qué?! —Eso fué suficiente para que sus mejillas se tornaran rojas y sus ojos se abrieran como platos—  ¿A-a qué viene eso?  —Preguntó riendo con notable nerviosismo, mientras el pelimorado miraba a algún otro lado de la habitación—

- N-nada, solo curiosidad.

- No es solo curiosidad. ¿Qué estas pensando? —Lo conocía muy bien, sabía que su mente pensaba muchas cosas... Cosas raras—

- Pues... Solo pensaba... No sé... ¿Y si cambiamos? Ya sabes, solo una vez.... ¡Solo me dió curiosidad! ¡¿Okay?! —Se alteró un poco, sentía sus mejillas arder por la vergüenza, más porque Jisung estaba tratando de no reír—

- Minho... A veces eres raro ¿Lo sabes? —Le decía riendo levemente—

- Gracias Sung, yo también te amo —Le dijo sarcástico cruzándose de brazos. El menor rió para descruzarle estos y meterse entre ellos para después dejar un pico en sus labios—

- Es que lo dices así de repente. —Se reía de nuevo— Pero... Bien, si eso quieres no veo por qué no.

Se levantó y acomodó mejor en el regazo del mayor mientras este también se acomodaba mejor para tomarlo de la cintura antes de mirarlo.

- Nunca he hecho eso ¿Sabes?

- Sí, lo sé —Le dejó un suave beso en sus labios, el cual fue correspondido por el pelimorado— Seré cuidadoso.

- Ya me estás poniendo nervioso.

El pelinegro rió antes de volver a besarlo mientras quitaba el sweater del contrario sin mucha prisa. Decidieron cambiar de posición más temprano que tarde y ahora Minho se encontraba en el regazo de Jisung mientras este repartía besos por todo su cuello, sacándole leves suspiros satisfactorios.

¿Cambiamos? | MinSung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora