Capítulo 3: Acechados

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Un nuevo día se cernió sobre el campamento de héroes

Ese día, todos los alumnos de segundo año decidieron tomárselo de descanso, ya que las monitoras tenían pensado hacer un juego nocturno

Aunque la presencia de un depredador rondando por el campamento seguía manteniendo a los monitores y a los profesores en alerta, no pensaban que un oso podría ser un problema para la mayoría de los alumnos

Tora junto a Vlad King fueron a la zona donde fueron avistadas las aves carroñeras concentrándose, solo para ver los restos de un animal bastante grande

Tora: Un alce adulto- dijo viendo al animal muerto, mientras su compañero se tapaba la nariz por la peste a bicho muerto- un oso no habría podido contra uno de estos, no estando en perfectas condiciones- dijo viendo el cadáver

Vlad: Quizás estaba enfermo- dijo alejándose del cadáver

Tora: No lo parece, no veo signos de enfermedad en los huesos, o en lo que queda de carne y piel- dijo alejándose del animal

Entonces el héroe con traje gatuno vio algo que llamo su atención

Tora: Mira esto Vlad- dijo incitando al héroe que se acercara

Vlad: Huellas- dijo mirando las pisadas en el suelo

Tora: Y no son de un oso- dijo viendo la huella

Vlad: ¿Entonces qué es?- dijo mirando al héroe con traje gatuno

Tora: Eso es lo que hay que averiguar. Por el momento volvamos a reportar lo que hemos visto- dijo mientras el héroe asentía

En el campamento, más precisamente en la zona secreta de Kota, el nombrado se encontraba haciendo unos ejercicios físicos

Eso hasta que el menor se tuvo que parar a descansar y tomar un trago de agua

Kota: Uff, que cansancio- dijo mirando sus pesas, que eran casi de su tamaño pero cada una tenía un peso que superaba el suyo, y eso que el joven medía casi el metro cincuenta de altura- por el momento lo dejaré por aquí- dijo viendo el cielo que empezaba a atardecer- será mejor volver al campamento- dijo para empezar a guardar las cosas en una pequeña cueva, sabedor de que no hay osos en la zona u otros depredadores que se puedan instalar en ella

O eso pensaba él, ya que estaba sintiendo que algo lo observaba desde el interior del bosque

El joven se puso alerta, preparado para atacar mientras se acercaba poco a poco al bosque

Pero al entrar a la orilla de la zona forestal, no vio nada en el lugar, ni tampoco lo escuchaba

Eso hizo que se tranquilizara un poco. Hasta que piso algo... algo líquido por el sonido que hacía

Y lo que piso era sangre... algo cuajada, pero no era de hace mucho

El instinto del menor le decía que huyera, pero también sentía curiosidad, por lo que con miedo siguió el rastro

El rastro lo condujo hasta el cuerpo.... El cuerpo de un jabalí gigante. El animal podría superar sin problema alguno los 500 kilos de peso, con unos colmillos capaces de cortar los arboles de medio grosor. Fácilmente esa cosa podría cortar en dos a una persona

Y ahí estaba, muerto en el suelo, y totalmente destripado, abierto en canal y con gran parte de su cuerpo devorada, y no por aves carroñeras, ya que el cadáver estaba en la sombra escondido

Algo lo había matado, y ese algo estaba cerca

Kota no lo pensó mucho, y asustado fue corriendo hacia el refugio

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