—Dame otro beso—el menor hizo un tierno puchero que el más alto no pudo ignorar fácilmente, acercándose para darle lo que pedía muy gustosamente—Quiero otro—repitió al separarse, mirándolo con ojos brillantes y mejillas sonrojadas
—Ya te di muchos—le sonrió dulcemente, dejando un pequeño beso en su nariz.
—Lo siento—se disculpó, sintiéndose avergonzado ante su insistencia, pero no podía evitarlo, le gustaba mucho la sensación de ser besado de esa manera, causaba que su estómago se revolviera con emoción.
—Todoroki, no, está bien—lo volvió a besar con suavidad por unos segundos, saboreando sus labios en el proceso.
Sero lo miró por última vez, sintiéndose extrañamente atraído hacia el pequeño e inocente Todoroki. Nunca se había sentido de esa manera, y se estaba empezando a asustar, porque él no era de tener cosas serias, solo quería divertirse como cualquier chico de su edad, no quería terminar enamorándose de alguien tan rápido, lo que estaba sintiendo por él no era como lo que sentía cuando estaba con Kaminari, era algo completamente diferente, nuevo, había algo en Todoroki Shoto que causaba que se sintiera tan nervioso y al mismo tiempo muy emocionado, deseoso siempre de más, algo más allá que solo tocarlo o besarlo. A lo mejor se estaba confundiendo y no era nada importante, de todas formas, Todoroki estaba haciendo lo mismo, ¿cierto? simplemente disfrutando y descubriendo nuevas cosas, y Sero estaba encantado con ayudarle en lo que quisiera.
Besó por última vez al menor y salieron del auto que esa noche los padres de Sero le prestaron. Tomó la mano de Todoroki, sorprendiéndolo rápidamente ante el repentino gesto, y caminaron hacia la enorme, ruidos e iluminada casa, encontrándose con muchas personas en la entrada, en su mayoría conocidos, sin embargo, había mucha gente que jamás había visto en su vida.
Lo normal.
—No vayas a separarte de mí—puso sus manos en cada hombro, mirándolo fijamente—Y en caso de que pase, no aceptes bebidas de nadie y te diriges a la entrada de la casa, te buscaré ahí, ¿entendido?—le explicó lentamente, sonriendo ante el asentimiento del menor—Bien, entremos entonces.
Todoroki nunca creyó que un día estaría en un lugar tan lleno de pecado—como diría su madre—, habían personas ebrias, fumando por todos lados, otros bailaban de una extraña manera, riendo escandalosamente, parecía que hacían de todo menos bailar y se encontraba con gente besándose en cada parte en la que miraba, incluso Bakugo estaba ahí, comiéndole la boca a Kirishima en el sofá, demasiado-
Alto, ¿Bakugo besando a Kirishima? ¿Bakugo está justo en esta fiesta? ¿Por qué lo está tocando tanto y lo besa de esa manera frente a todos?
—Sero—llamó al más alto, deteniéndolo de golpe ante el miedo de ser descubierto por Bakugo en ese lugar—Dijiste que nadie iba a conocerme aquí—se escondió tras él, pegándose a su espalda—Ahí está Bakugo, no debe saber que estoy aquí contigo.
Temía ser descubierto en esa fiesta, se suponía que nadie le diría nada por estar ahí donde no debía estar, porque era un chico de bien, un chico que no iba a fiestas y no desobedecía a sus padres, mucho menos un chico que disfrutaba de los besos de otra persona de su mismo sexo. Se había sentido especialmente ansioso por esa noche, pasar con Sero era algo que estuvo ansiando desde que lo invitó hace unos días, y con Bakugo ahí, todos sus planes de divertirse se vieron frustrados.
Sero jaló al bicolor hasta el hueco que había bajo las escaleras, comprendiendo su aparente miedo tan pronto se encontró con su mirada afligida.
—Todoroki, ¿quieres irte?
El mencionado negó dudoso, no era justo para Sero si solo le decía que se fueran, él estaba emocionado por pasar juntos esa noche, e irse significaba perder esa gran oportunidad.
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Forbidden | Kiribaku - Bakushima
FanfictionA veces las sensaciones prohibidas, son las mejores. Adaptación ¡! Historia de @minsungxhyunjin • Mención a otros shipps. • Contenido +18