𝑆𝑖𝑝𝑛𝑜𝑠𝑖𝑠 :
༺ Como en la novela original de Shang QingHua, Shen Qingqiu el Peak Lord de Qing Jing, fue un esclavo vendido a la casa de los Qiu.
Con algunos cambios y además de sus beneficios por ser el autor, Shang Fei logro ayudar a quién s...
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SHEN JIU —
Reencontrarse con Yue Qi no fue tan malo, ciertamente lo hizo sentir mejor, habían pasado varios años desde que había tenido contacto con el.
Al menos se vía bien, conociéndolo, esperaba que se sobre esforzara, Yue Si era ese tipo de personas que no se cuidaba lo suficiente.
Y dejando eso de lado, no debía preocuparse mucho por su Maestro ahora, al parecer su amante era el mismo Líder de Secta, no otro cualquier cultivador.
Y no es por ofender, pero el Líder se veía como un tonto enamorado viendo a su shizun, demasiado empalagoso para el. Si es así como el amor se ve, no piensa enamorarse nunca.
Prefería no pensar en eso, muy abrumador para el. La sala de música era realmente muy encantadora, todo estaba totalmente ordenado luego de que se encargará el mismo.
Su Maestro se veía pacifico, observando a través de la ventana la silueta del Líder que se marchaba a su propia Pico, shizun parecer corresponderle.
Se acercó en cuanto su Maestro lo llamo, sintiendo como le daba algunas palmadas en la cabeza, eso era demasiado vergonzoso.
—Desconocía tu cercanía con un discípulo de Qiong Ding, debería invitarte a que me acompañes para que lo saludes?
Hablaba de Yue Qi entonces, no estaría más acompañar a su Maestro, sería bueno salir un poco de Qing Jing.
Levantó la mirada un momento, buscando al rastro de mentira en las palabras de su shizun, pero no encontró nada.
—Shizun es muy amable, este discípulo le agradece
—No es necesario, eres un buen joven Shen Jiu
Estuvieron algunos momentos en silencio, simplemente cómodos con ma presencia del otro, shizun desprendía un aura calida y acogedora.
Aun los discípulos no se levantaban al parecer, esto era muy impuntual.
Shizun no parecía molesto con eso, tal vez era más liberal con los discípulos, simplemente se quedó ahí, esperando tranquilamente sin una pizca de enojo por su tardía llegada.
La voz de shizun le llamo la atención, tenía una sonrisa en sus labios mientras lo veía.
El bonito abanico que cargaba en sus manos cubría parte de su rostro.
—Dime, hasta ahora no has salido de Qing Jing, cierto?
—No eh tenido la oportunidad shizun
A lo lejos, escuchaba algunos pasos apresurados, probablemente de los discípulos que saben llegan tarde a la clase.
—Te molestaría acompañar a este Maestro? En el pueblo, escuché que recientemente empezó un festival
