Loyal «Regulus Black»

16

—¿Te interrumpo?

Despegué la mirada del libro que Slughorn me había recomendado, la voz era de Adam Bletchley.

—Para nada, ¿Estudias para tus T.I.M.O.S?

—Sí, de hecho, sí —Se rascó la nuca y tomó asiento a un lado de mí— Pero no puedo concentrarme porque el partido contra Ravenclaw es mañana

—Lo harás bien —Intenté animarlo con una sonrisa— Estuviste increíble en las selecciones

—Gracias —Murmuró— Tu también eres increíble, o sea... cuando juegas quidditch.

—¿Sólo cuando juego quidditch? —Alcé una ceja, el chico tragó saliva

—No, no quise decir eso —Se disculpó— Eres increíble todo el tiempo, no es como que hablemos pero te he visto un par de veces y...

Me reí por lo nervioso que parecía, él también soltó una pequeña risa.

—¿Quieres que te ayude a estudiar para tus exámenes? —Ofrecí como excusa, pues quería pasar más tiempo con el chico.

—¿De verdad? —Se sorprendió— ¿No estás ocupada?

Al parecer me había ganado la fama de siempre estar haciendo algo

—No, nada importante —Alcé los hombros— ¿Qué estás estudiando?

—Defensa Contra Las Artes Oscuras —Respondió— La profesora es tan estricta como McGonagall y ni siquiera explica bien

—Bueno, el próximo año no estará más aquí —Dije en un tono sarcástico

—¿Tú crees que ese puesto de verdad está embrujado? Siempre he pensado que son chismes e inventos como casi todo lo que dicen en Hogwarts.

—Dumbledore también cree que Quién-Tú-Sabes lo embrujó, supongo que podría ser verdad.

Ayudé a Adam a estudiar hasta la hora de la comida, no tenía problemas para lo práctico pero sí para la teoría, aunque en general era listo. Hablar con él me hizo sentir mejor de lo que había estado los últimos días.

—Vas a aprobar, no tienes de qué preocuparte, aunque puedes estudiar más si quieres un Extraordinario —Le dije a Adam cuando íbamos de camino al Gran Comedor.

—Eso espero —Suspiró— ¿Estás lista para mañana?

—Por supuesto, si yo fuera tú, solo me preocuparía por jugar contra Gryffindor.

—Tienes razón, no sé en qué estoy pensando...

—Oye, es normal estar nervioso en tu primer partido —Le di unas palmaditas en el hombro.

—Gracias, Cypress —Mi contrario me dió una dulce sonrisa.

—¿Por qué?

—Has sido muy amable conmigo, en las pruebas, ahora y me ayudaste a estudiar, así que, gracias.

—No es nada, estoy segura de que harías lo mismo por mí.

Ambos tomamos asiento en la mesa designada a Slytherin y como siempre, nos esperaba un manjar para comer.

—¿Nunca te has preguntado quién cocina en Hogwarts? —Adam me cuestionó luego de un bocado de comida

—Elfos domésticos, son los mismos que limpian las Salas Comunes y los dormitorios —Respondió Regulus quien apenas llegaba y tomó asiento junto a mí— Buenas tardes, Cypress.

—Buenas tardes, Regulus. —Contesté antes de seguir comiendo

—¿Cómo lo sabes? —Le preguntó Bletchley