Looking For The Girl

Prólogo

Me encontraba en la barra, para ser específicos encima de ella bailando. Alrededor de la mesa se encontraba una gran muchedumbre que me animaba a quitarme la ropa, mayormente mujeres.

Tenía una buena vista de sus escotes, pero ninguno para emocionarse, si saben a lo que me refiero. Estaba desabotonando la camisa al ritmo de la canción, una vez fuera de mi cuerpo le empece a dar vueltas preguntando quien la quería. Sus gritos casi me dejan sordos, son como gatas en celo. Nunca vi la mano jalar, perdí el equilibrio y caí encima de una pelirroja.

La chica no perdía tiempo, me estaba besando y sus piernas estaban alrededor de mi cadera. Le seguí el juego hasta que alguien me separo de ella y recibí unos golpecitos en la espalda.

-Consigue una habitación, bro- me arrojo mi camisa.

-Gracias- le susurre- la verdad es que estaban demasiados babosos.

-Por eso casi tienen sexo en el piso- dijo sarcástico.

-Lo que te pasa Jon es que no has tenido una buena noche desde que te dejo Amanda- me fulmino con la mirada.

-No todos tenemos la suerte de que las chicas se nos tiren- Jon se burlo- y aparte, no me dejo, fue un acuerdo.

-Como digas- dije mientras me terminaba de abotonar la camisa.

Nos dirigimos a la pista de baile, una bolita se formó a nuestro alrededor. Cerré los ojos, me movía siguiendo la música, poco a poco los cuerpos rozaban entre todos. Cuando los abrí vi que separados del grupo se encontraba tres chicas guapas viviendo su momento. La que más resaltaba era una castaña, que ni siquiera se si se podría decir que estaba bailando porque se movía de una manera tan peculiar muy pocas veces vista.

Empece a buscar a Jon con la mirada, hasta que lo encontré bailando con una oxigenada con los cuerpos muy juntos. Y después se quejaba que no encontraba chica, ajá. Despegue de mi pecho las manos de una muchacha y poco a poco fui haciendo camino hasta llegar con la castaña y bailé como si nada, tratando de seguir su ritmo. Quedamos de frente y al mirarme a los ojos su ceño se frunció.

-Largó de aquí striper- dijo para luego darme la espalda.

La abrace por la cintura y la pegue a mi cuerpo.

-Bonita vista- le susurré en su oído. Se retorció un poco y me di cuenta que quería cambiar de posición, afloje un poco el agarre e inmediatamente su cara quedo a milímetros de la mía.

-Que lastima que la mía se haya arruinado con un imbécil- se alejo un poco, y me miró de pies a cabeza- sip, un striper imbécil.

-¿Eres lesbiana?- salió de mi boca como si nada. Y la mano vino disparada, no me quite, solo cerré los ojos pero me sorprendió cuando en mi pómulo recibí un golpe.

Nota mental: no preguntar la preferencia sexual a las castañas.

-¿Y qué si así fuera?- sus amigas se estaban riendo- Por supuesto que no, solamente no me atrae egocéntricos desnudistas.

-Ya entendí- le mire fijamente- estas molesta porque no terminé de quitarme la ropa o porque la rubia me estaba comiendo.

-Eres una mula en tu interior- negó con la cabeza- aparte era una pelirroja.

-Y tu estabas atenta de mí- alce la ceja, me acerque un paso a ella- no seas celosa cariño.

No me di cuenta cuando Jon se encontraba a mi lado, tenía una mirada seria.

-Bro, basta- me puso su mano en mi hombro jalando un poco.

-Pero si ella se muere por mí, solo esta celosa.

-Celosa tus putas- dijo la castañas rodando los ojos. Algunas chicas de la bolita se quejaron, pero era cierto.

-Vamos cariño, sabes que nunca más se te va acercar un chico como yo a pedirte pasar un rato de diversión.

Y di en el clavo, acorto nuestra distancia, puso sus manos alrededor de mi cuello y empezó a jugar con mi cabello. Nuestras narices estaban jugando y los labios casi rozando.

-Pendejo- me dijo antes de subir su rodilla con fuerza hacia mi entrepierna- Cuando una chica dice no, es un no.

Me doblegue, el dolor era insoportable.

-Te lo dije bro- me dijo Jon mientras se iba hacia la barra. Regreso con un vaso de hielos.

-Se va arrepentir- acomode el vaso entre los pantalones- No se le niega algo a un Brooks.