ᏞᎪ ᎻᎬᎡᎬᎠᎬᎡᎪ

𝟏𝟐

¡Malfoy! Encerio qué curiosa forma de volver a verlo.

—Creeme que no es lo que parece—mencione—.Trate de explicar mi aparición en una tienda tan sombría mientras buscaba con la mirada a mí hermano más este ya no estaba ahí.

—No sé que haces en un lugar como este pero encontraré la manera de sacarte de aquí y llevarte con tu hermano— replicó Draco.

Me pidió que me quedara ahí escondida mientras él conversaba con su padre.Al cabo de unos minutos Lucius Malfoy abandono aquella tienda de mala imagen y Draco nuevamente se acercó a mí.

—Listo doncella ya no hay peligro alguno puede salir—me extendió su mano para evitar que al salir de mí escondite me lastimara. Aquellas manos que a lo lejos se podían percibir frías,eran al contrario sumamente calidas pero a su vez estás se encontraban lastimadas,era evidente que ser el heredero de los Malfoy no era una tarea sencilla.

— Y ahora¿Dónde piensas llevarme?— añadí mientras salíamos de la tienda.

—La verdad primero deseo sacarte de este callejón luego decidiremos que hacer—menciono mientras apuraba el paso.En el trayecto me contaba que ese callejón era un lugar para gente cutre y que si llegasen a reconocernos correríamos grave peligro,al cabo de un largo transcurso nos encontrábamos en nuestro destino.

—Y bien princesa¿Qué desea hacer antes de volver a la custodia de su hermano?—

Había tanto que quería hacer y lo disfrutaría más si el lo hiciera conmigo más el recordar los moretones en sus manos frenaron mis iluciones.

—Son varias cosas de hecho pero...¿No debes volver con tu padre?No deseo causarte problemas.

—Mi padre está ocupado, lo suficiente para darnos el tiempo de hacer varias cosas además acordamos encontrarnos en Flourish & Blotts.— respondió con total seguridad.

—Si ese es el caso deseo probar dulces mágicos— añadí alegre.

—Bien conozco el lugar perfecto—

Recorrimos tienda por tienda mientras dialogabamos sobre gustos en común o contrarios fuera de la etiqueta, el cómo las expectativas en ambos eran demasiadas para ese año sin mencionar que una que otra mirada se cruzaba,o que solía mencionar de imprevisto lo mucho que le gustaría que estuviera en su casa de Hogwarts.

Pasaron dos horas y ya era hora de que Draco se encontrará con su padre.Y por mi parte con mí hermano y los Weasley aunque mis emociones me hallan hecho olvidar que ellos podrían estar demaciado preocupados.

Al llegar a Flourish & Blotts casi nos separamos entre tanta multitud pero fue muy fácil reconocer las voces de los Weasley, mí hermano y la de Hermione.

—No la encontramos—

—Si mí madre no la ve aquí en este momento nos va a asesinar.—

—Si ustedes están preocupados imagínense yo que soy su gemelo—

—Si saben que por lógica no deberíamos reclamarnos entre nosotros, deberíamos pedir ayuda al profesor Snape...—

Con Draco observamos esa escena desde un rincón, más al ver los ojos de mí hermano que estaban a punto de humedecerse decidí acercarme pidiendo a Draco que aguarde ahí .

—¡Harry! ¡Chicos! ¡Aquí!

—¡Lilith— dijeron al unisono. ¿Dónde estabas ?

— Después de que me dejaras abandonada en esa tienda tan horrible un chico muy dulce me salvó y paso tiempo conmigo hasta que me trajo aquí.—mencione sin dejar de sonreír.— Y en ese transcurso pase por Gringotts y comprando unos pergaminos y plumas para este año.Pero dejando eso de lado estoy bien.Con su permiso me retiro.

No pude evitar volver cerca de Draco con una sonrisa en el rostro y con mis mejillas un tanto ruborizadas.

— Volví, sabes de casualidad ¿Por qué la librería está tan llena?—

—Me alegra mucho tenerte de nuevo conmigo,la verdad creo que es por...

Antes de que el pudiera acabar la oración escuché un chillido por parte de Hermione.

— Podremos conocerlo en persona—

—¿A quien se refiere? — pregunté

—Lee esa pancarta princesa— respondió con un tono dulce.

GILDEROY LOCKHART
firmará hoy ejemplares de su autobiografía
EL ENCANTADOR
de 12:30 a 16:30 horas.

—Oh, ¿No es el que ha escrito casi todos los libros de la lista?—al caer en cuenta la multitud estaba formada principalmente por brujas de la edad de la señora Weasley.Y en la puerta había un mago con aspecto abrumado,que decía:
—Por favor,señoras , tengan calma…no empujen…cuidado con los libros…

—Me compadezco de ese mago—replico el.

—La verdad es que si, no entiendo muy bien que tiene de sublime—dije, ambos nos comenzamos a reír.

Finalmente entramos pero por la multitud nos separamos y yo terminé a lado de mí hermano y los Weasley. Era obvio que Gilderoy Lockhart era lo opuesto a la sencillez.

Un hombre pequeño e irritable merodeaba por allí sacando fotos con una gran cámara negra que hecha a humaradas de color púrpura a cada destello del flash.

-Fuera de aquí -gruñó a Ron, retrocediendo para lograr una toma mejor-. Es para el diario El Profeta.

-¡Vaya cosa! -exclamó Ron, frotándose el pie en el sitio en que el fotógrafo lo había pisado.

Gilderoy Lockhart lo oyó y levantó la vista. Vio a Ron y luego a los Potter, y se fijó en ellos. Entonces se levantó de un
salto y gritó con rotundidad: -¿No serán ellos Harry y Lilith Potter?

La multitud se hizo a un lado, cuchicheando emocionada. Lockhart se dirigió hacia ellos y cogiéndolos del brazo lo llevó hacia delante. La multitud aplaudió. Ninguno sabía que hacer cuando Lockhart les estrechó la mano ante el fotógrafo.

Después de tantas fotos y apretones de manos los gemelos tenían las manos entumecidas,quisieron volver con los Weasley pero Lockhart los mantuvo a su lado.Una cosa llevó a la otra y ambos terminaron recibiendo las obras completas de Lockhart y añadiendo que aquel mago anuncio su cargo en Hogwarts públicamente.

Ambos pudieron llegar hasta los Weasley, Harry decidió obsequiar sus libros a Ginny y por su parte Lilith a Ron.
 
Alguien jalo del brazo a la protagonista pero cuando está pudo soltarse del agarre no pudo soportar el ardor que la marca producía así que fue lo más rápido posible donde su hermano y apenas llegó escucho una pelea de dos voces bastante familiares.

-¿Te gusta, eh, Potter? -dijo una voz que ambos no tuvieron ninguna dificultad en reconocer. Harry se puso derecho y se encontró cara a cara con Draco Malfoy, que está vez exhibía su "habitual" aire despectivo-.

El famoso Harry Potter. Ni siquiera en una librería puedes dejar de ser el protagonista.

-¡Déjalo en paz, él no lo ha buscado! -replicó Ginny.

Era la primera vez que hablaba delante de Harry. Estaba fulminando a Malfoy con la mirada.

-¡Vaya, Potter, tienes novia!-dijo Malfoy arrastrando las palabras. Ginny se puso roja.Ese no era el chico con el que Lilith había estado era diferente se escuchaba inseguro , manipulado.

En el momento en el que apareció Lucius Malfoy entendió todo,el solo era un niño pequeño influenciado por la maldad de su padre.

El conflicto empezó a agrandarse y de un momento a otro el señor Weasley estaba peleando con Lucius Malfoy. Nadie en ese lugar podía separarlos hasta que apareció Hagrid y al final pudo detener la pelea.

Lilith observó brevemente a Draco y pudo leer un — Perdón— en sus labios.

Molly por su parte estaba furiosa con el señor Weasley pero no deseaba armar otro escándalo por lo que decidió que era mejor hablar con el en la Madrigera.

Volvieron a usar los polvos flu pero por la cara de los gemelos era obvio que ese no era su medio favorito de transporte.