𝐅𝐄𝐄𝐋 𝐌𝐄; Julián Álvarez

004: Promise.

27 de Septiembre: 2015

Gianna pov's:

Podía ver el entrenamiento desde el banco de suplentes, cada uno tenía formas distintas de capacitarse según su posición en el campo, mientras pasaban los minutos más complicados se hacían los circuitos o eso veía desde mi perspectiva.

Pronto comenzaron a practicar los disparos al arco, algunos simplemente anotaban el punto con facilidad, en cambio otros mandaban la pelota hacia cualquier lado menos al arco.

El turno de Julián había llegado, posicióno la pelota en el punto blanco que estaba en el área del arco, ni siquiera titubeó para poder anotar aquel gol, ni siquiera festejo cómo el resto de sus compañeros por aquello, simplemente giro hacia mi y formó un corazón con sus dedos y en sus labios divisé su característica sonrisa.

Sos un tonto Julián, un lindo tonto.

El tiempo siguió su flujo normal, había perdido la noción del tiempo en aquella escuela, simplemente me la pasaba bien mirando al equipo de Julián entrenar y divertirse.

Casi una hora desde los tiros que había visto, ahora todos estaban en el vestuario preparando sus cosas para devolverse a su casa, mientras que las personas que vinieron a acompañar a sus amigos, familiares o parejas tendríamos que esperar afuera, triste el hecho de que en esta ocasión solo este yo misma esperando a un chico amante del fútbol.

Sentí como alguien me tomaba por detrás y cuando gire pude ver a Julián con una sonrisa de oreja a oreja, la curiosidad por saber que fue lo que provocó aquella reacción en él era más grande que cualquier cosa en ese momento.

— ¡Gi! — Su tono de voz era eufórico, algo emocionante había pasado en aquel vestuario. — ¡Me van a fichar para el club para el club atlético Atalaya de Córdoba! — Rodeo mis hombros y me junto con él en un abrazo, no pude corresponder durante unos segundos.

Él al notar aquello deshizo el abrazo y busco mis ojos para poder cruzar nuestras miradas, pero se la evitaba a toda costa.

— Realmente... Realmente estoy orgullosa de vos, Julián. — Gire hacia él con los ojos al borde del llanto. Sus brazos volvieron a rodearme y me aferré tanto a podía oír su respiración tratando de volver a la normalidad.

Poco a poco nos retiramos de aquel espacio para poder compartir este momento de emoción un poco más, era vergonzoso llorar en público, más si hay gente con la ni siquiera has cruzado algún tipo de palabra.

Una vez afuera del entrenamiento estaba parada justo al lado de Julián, ambos sosteníamos nuestras manos y hablamos de las cosas que pasarían cuando él vaya a cumplir su meta.

— Honestamente me hará falta mi mejor amigo por estos lugares, pero suena mejor tener un amigo que me pueda sacar a pasear por la capital del país a uno que me lleve a robar frutas de las chacras. — Él soltó una risa ante aquella declaración, su sonrisa brillaba con más intensidad que otros días.

— Te prometo que cuando termines el secundario voy a venir por vos. Si fuera por mi, me los llevaría a todos conmigo. — Compartimos una sonrisa, sabíamos que aún faltaban algunos meses para la trágica despedida, pero no era inevitable hacernos la cabeza.

— Es la única promesa que espero que me cumplan, las otras son solo palabras al aire para mí. — Le dí un apretón a su mano y continuamos con nuestro caminos hacia la casa de los papás de Julián para contarles la agradable noticia.

“From the beginning I have loved you”

03 de Octubre: 2015