olvidemonos de lo correcto

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inspo: el efecto,
rauw alejandro.

Realmente debería hacer caso a los mensajes que enviaban desde el grupo dónde se encontraba tanto el plantel como la dirección técnica del equipo, pero hace tiempo que no venía a Argentina luego de estar haciendo una fantástica carrera en Italia, principalmente en el Sportiva Roma, se convirtió lentamente en ídolo para muchos, destacando en sus jugadas como goles al equipo italiano.

Pero nuevamente era seleccionado por su país para disputar la Copa América de ese año, lo emocionaba demasiado estar con sus compañeros y poder llegar a ganar.

Aunque podía ser un poco rebelde en aspectos como hacer caso y cuidar su físico, su salud incluso su estómago, agregando lo último porque saldría a bailar un poco por algún lugar de Buenos Aires, tomar algunas cervezas y luego volver en auto sin intentar llamar la atención pero eso es imposible pero ya buscaría la solución.

Y mirando algunos mensajes ignorando la mayoría se miro en el espejo del baño con una sonrisa guiñando por última vez y salir de allí, agarrando las cosas necesarias como sus llaves y billetera, siendo que se alejo de los apartamentos mientras cantaba en voz baja canciones a la vez que tomaba la autopista para empezar la noche en esa mágica ciudad.

Era genial llegar a un lugar poco conocido y nuevo en la ciudad, ubicado en Puerto Madero, aunque había tanta gente afuera, él junto con algunos amigos pudieron ingresar sin problemas luego de reconocerlo, siendo que sonrió a algunas personas que pidieron fotos aunque fue imposible con todas, pero se sintió agradecido de que respeten su espació. Aunque era consciente de que no tardaría mucho que salgan algunas fotos de su estadía.

Volviendo al espectáculo su pequeño grupo fueron llevados a una pequeña sección para estar más tranquilos, disfrutar así de la música y las bebidas, era totalmente una locura mientras se apoyaba en el sofá junto con De Paul que cantaba algunas canciones de su novia en voz alta, ya con un trago a mano, al otro lado Paredes se reía en voz alta al ver a su amigo así.

Dybala sonreía relajado mientras tomaba un poco de cerveza, miraba al público cantar las canciones como gritarles comentarios de todo tipo y de cierta manera no era molesto podría decir que hasta sonaba hagalador, sabía que era atractivo y eso no era nada narcisista, aunque específicamente prefería halagos de ciertas personas, claramente hombres.

Vamos realmente no era un problema conseguir uno fuera del país, de la mirada pública, era aún un tema difícil en el mundo futbolístico estos temas de la homosexualidad, pero no le afectaba en nada, era un buen jugador lo que haga de forma privada a nadie le incumbia, por lo que hacía lo que quiera con su propio trasero. Aunque no era un chico de muchas aventuras a su veintinueve disfrutaba lo necesario sobre tener a alguien.

Y hace meses no pudo tener a ese alguien que lo haga disfrutar una noche, porque los únicos con que tuvo contacto fue algo rápido y nada disfrutable, pero servía.

Hizo una mueca mientras veía que no había más botellas y que sus amigos estaban en otra por lo qué cantaban en gritos la canción de Bad Bunny, miro al bar y se levantó dejando sus pertenencias menos el celular para ir a por más y sentirse normal por un segundo, así salió de la zona vip para tomar un trago. Hizo un camino rápido para estar un poco alejado de la multitud que sintió alivio al llegar a la barra por lo que saludo al tipo y le pidió un bebida bien cargada.

Estuvo sentando un buen rato ignorando a las chicas que querían invitarlo a algo que no quería con ellas así que les agradecía negando con la cabeza aunque algunas no parecían entender el mensaje.

— No es no, ¿no escuchaste? — Una voz sonó siendo que ambos cuerpos apuntaron al desconocido, Paulo apretó los labios mirando a la fémina que frunció los labios ante el regaño que se alejo sin decir nada entre medios de ambos, cuando se largo visibilizo mejor al tipo.

Automáticamente su boca se seco y se sentó mejor, miro un par de veces a otros lados para ver de nuevo al sujeto, que se veía condenadamente bien, luciendo una camisa que se apretaba a su cuerpo en tono blanco y unos simples pantalones de vestir, y era alto, demasiado.

—¿Debería decir que son molestas?—El hombre hablo sentado a su lado mientras bebía y le sonrió al sujeto de casi dos metros. Sus hombros a penas se tocaban y podía sentir su delicioso perfume. — Oh, cierto que tarado, soy Damián.

—Paulo. —Sonrió de lado tomando la mano ajena viendo la sonrisa del hombre. — Supongo que sabes...

— No importa igual tenés que presentarte nene.

— ¿Venís sólo? —Hablo acercándose con cierto interés en los ojos ajenos mientras la música resonaba, pudo sentir su olor a cerveza mezclado con el perfume que lo hacía ver caliente al semejante tipo.

Al conectar sus ojos sintió una descarga fuerte en su abdomen dirigida al sur, relamio sus labios con aquella sensación de calor de repente en todos lados por ello se reincorporo tomando el trago.

— Con amigos pero se perdieron por ahí y ni se dónde se fueron. ¿Y que haces acá Paulito? — Le sonrió.

— Jodiendo un rato. Mis amigos están boludeando por ahí y yo aguanto un poco el alcohol ellos ya están en un viaje.

¿No podes joder conmigo?

— Sos lindo. — Dybala alzó sus cejas por ese comentario tan directo que le encantó por lo que sonrió en grande mirándolo.

Vamos, está bueno, es imposible que me haga el difícil cuando hombres así no se ven siempre.

—¿Sos así con todos?, rescatando como esos personajes-

— No, solo con los lindos y de igual forma iba a venir.

— Qué suerte porque no quería irme solo.

La sonrisa de aquel hombre lo torturó un poco mientras le susurraba cerca que se larguen de ahí, agradeció profundamente a Dios mientras lo seguía, posiblemente sea un asesino en serie pero que más daba si moría esa noche pero que sea con una buena cogida.

Se sujeto de su brazo mientras se escapan del lugar por otra zona que no era la entrada, sus amigos después se enterarían.

Y jadeo con sorpresa cuando lo atrajo por la cintura para apoyarlo sobre la pared más cercana del callejón, se sintió desfallecer porqué esa boca lo besaba demandante.

Gloria a Dios.

n.a: dibu rubio mi religión, no puedo dejar de escribir y ellos dos son 🧎🏻‍♀️, en fin disfruten.

a: dibu rubio mi religión, no puedo dejar de escribir y ellos dos son 🧎🏻‍♀️, en fin disfruten

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causa y efecto | dibu ✧ dybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora