Creyente
Era un 10 de Febrero cuando lo comprendió,
no quería morir, pero tampoco quería seguir con vida...
24 de marzo cuando se rompía sacándose el aire buscando la manera en que le escuchasen.
Las sustancias que le dejaban en caída,
Le hacían temer de el final del abismo,
Olvidando que el fondo era inexistente.
Y ahí recordó, la única manera de llegar al final de la infinidad y caer por completo: morir.
Sintiéndose en indecisión, se dejó a la caída,
Y terminó escogiendo el camino de no quererse,
Aún sí nunca se quizo.
Dirigiendose a la cocina buscó en el cajón cuando los recuerdos llegaron, era el mismo cajón donde recordaba esconder de su Madre la mesada que su abuela le daba.
¿enserio terminaba asi?
Su poca conciencia le cuestionó sí lo deseaba,
Y se respondío a sí mismo que lo necesitaba.
Encontró lo que buscaba, al fondo del cajón, un cuchillo, al fondo del cajón la única decisión de su vida que haría algo significativo.
Y lo primero que pensó fue en apuñalarse.
Se sentía feliz en sus tonos blancos,
Pero odiaba que su blanco fuese tan fácil de manchar,
Un blanco tan fácil de marcar era el que le volvía débil a su convicción.
Asi que lo mejor que pensó fue bañar su blanco en un color fijo, rojo, quizá negro.
Se apuñaló.
Bañó su blanco de rojo.
Su blanco muerto de rojo amor.
Un rojo que la mató.
