-"Miss Kagari, un placer."
- Dijo sonriente de una forma extraña mientras hacía una reverencia.
(Antes de continuar, solo avisaré que saque una nueva historia diakko para que vayan a leerla, y que retomaré nuevamente en esta que me quedé ni a medias de la historia, fue mucha inactividad, pero atentos que seguiré sacando historias, sin más que decir, sigan leyendo xD)
Si no recuerdas muy bien en que parte se quedaron de la historia, lean el capitulo anterior para que recuerden y entiendan mejor lo que va a pasar.
. . .
Akko tembló de miedo y arrugó más la manta que sostenía, abrió los ojos como platos y miró atentamente su reflejo se movía por sí sólo.
Antes de que dijera algo un golpe en la puerta la hizo voltear rápidamente.
-Señorita Kagari, me puede secir que hace a estas horas en el salón de espejos?!.--- Una voz similar hizo que Akko volteara nerviosa hacia su presente, la maestra Finneland tenía un gesto de enojo.
Akko volteo hacia el espejo de nuevo y se miró como si nada hubiera pasado, solo era ella y nadie más, suspiro para ella y la maestra la sacó a pasos rápidos.
-Lo siento maestra es que escuche un ruido y....
-Sus excusas guárdalas para más tarde señorita Kagari, por ahora vaya a su dormitorio y que no vuelva a ocurrir.--- Finneland no dejo que terminará y la llevo directo hacia su dormitorio recibiendola por sus compañeras de habitación.
Lotte agradeció nerviosa y cerró la puerta ya con la castaña adentro.
-Metiéndote en problemas de nuevo Akko?.---Dijo Sucy que al parecer hacia una poción en su escritorio sin mirar a la castaña a sus espaldas.
-¡No hice nada malo!.---Hizo un puchero y se sentó en la orilla de su cama con los brazos cruzados.
-¿Paso algo Akko?, veo que Diana te devolvió tu manta.---Lotte sonrio un poco nerviosa y miro a su amiga.
-Oh si Lotte, por alguna razón a Diana no le molesto y me la entrego.---Contesto con una sonrisa y de repente se borro al recordar lo que había pasado hace un rato.
-¿Todo bien?.--- Pregunto Lotte al ver a su amiga cambiaba su cara de felicidad a una de preocupación.
-Cuando me despedí de Diana caminaba por los pasillos hacia nuestra habitación....
-¿Aja?.--- Dijo Lotte poniendo toda su atención y sentándose alado de la castaña, la pelimorada tambien miraba de reojo de su escritorio hacia la castaña.
-Escuche un ruido en el salón de los espejos, entre y mire una luz al fondo. Un espejo en especial, me miré en mi reflejo y escuché susurros.--- Akko hizo una leve pausa y sus amigas miraban extrañamente a Akko sin entender aun.--- Mire como mi reflejo se movía aún que yo no lo hiciera.
-E-Eso si es espeluznante no lo c-cres Sucy?.--- Lotte rasco su brazo algo nerviosa y giraba la vista hacia su amiga amantes de los hongos.
-Meh, Akko solo esta loca y alucina todo.--- Contesto sin ninguna expresión en su rostro, pero aún sabía que ella decía la verdad, pues la poción que uso tenía algo que ver aún que no lo admitiera ella sabía que era cierto y encontraría una solución de ayudar a su amiga castaña.
-No miento Sucy!, lo digo de verdad no fue una mentira.--- Contesto con un puchero y suspiro al final.--- Olvidenlo, quizá y solo sea mi cansancio.
-Es verdad Akko, mejor hay que dormir.--- Lotte sonrió nerviosa, se acomodo entre sus sábanas y apago las luces.--- Buenas noches chicas, descansen.
-Descansa Lotte.--- Dijo Akko haciendo lo mismo que su amiga y así cerrando sus párpados un poco angustiada.
Fue una noche fría y el viento pegaba fuerte hacia los cristales de la ventana.
Era madrugada ningún ruido se hizo presente, todo estaba tranquilo y la habitación era cálida.
Atsuko se movía de un lado a otro al no poder conciliar el sueño.
¿Desde cuando Akko batalla para poder dormir?
Nunca le había pasado y ahora Akko con un poco de dolor en la cabeza se sento levemente sobre su cama sin quejarse para no despertar a sus amigas, miró la bola de cristal y eran las 4:25 a.m ella frunció el seño al saber que se levantó muy temprano.
Se recostó nuevamente y miró el techo de madera que tenía sobre su cama.
Miró y serro sus ojos con fuerza al tener esa punzada de nuevo.
Soltó una lágrima al no poder aguntar el dolor, se cubrió con su almohada la cara y pegar un grito en ella.
Se la quito ensima y sus amigas aun seguían dormidas.
Akko mordió su labio inferior y abrió los ojos, sus pupilas se tornaban un poco obscuras a su tono normal.
Akko empezo a respirar agitadamente y una gota de sudor bajo por su mejilla.
Akko cerro nuevamente sus ojos y su respiracion ya era un poco mas calamada.
Abrio los ojos con lentitud y una pequeña sonrisa salio de sus labios.
Sin tener canciencia de lo que hacia se levanto de su cama y se coloco sus zapatos, abrigo y salio de la habitacion sin hacer ningun ruido posible.
Akko caminaba bagamente sobre los pasillos con las manos en sus bolsillos, sin que ningun troll la viera por alli, se dirigio hacia la habitacion de la rubia.
¿Que pensaba ella? ¿Por que se dirijia hacia esa direccion?
Y sin mas, Akko caminaba lentamente al estar mas cerca, sonrio para si misma, no era una sonrisa malvada ni nada de eso.
Sus mejillas sonrojadas y ojos fosforecentes se notaban mas por la luz de la luna que entraba por los grandes cristales.
Akko tenia una mirada dominante, parecia que Akko no estaba muy conciente de lo que hacia.
Detuvo por fin su andar, estando a centimetros de la puerta de la Cavendish.
Su mano se movio por si sola, su sonrojo incremento casi al misml tono de sus ojos.
Toco la puerta y bajo su mano lentamente esperando a que abrieran.
Pasaron tres minutos y la puerta se abrio lentamente dejando ver una cabellera rubia y con sierta confuncion.
-¿A-Akko?.--- Pregunto confundida y abrio los ojos al verla alli parada, esa aparicion de la castaña a esas horas.
Aun mas preocupada pudo notar el brillar de sus ojos y sonrojo que tenia, Diana miro extrada a su amiga que estaba enfrente de ella.
La luz de la luna hacia notar cierta belleza sobre la chica, Atsuko solo sonrio y los ojos brillaron aun mas al poder precensiar la aparicion de la Cavendish.
Diana seguia sin entender nada, hasta que Akko por fin contesto.
-Mis disculpas por este atrevimiento a estas horas, queria verte Diana.--- Atsuko por fin hablo haciendo una reverencia hacia ella y una sonrisa ďe oreja a oreja, su sonrojo leve y ojos brillantes.---Necesito decirte algo.
Diana se sonrojo y miro con atencion a esa aquella chica, Atsuko Kagari.
ESTÁS LEYENDO
La voz de mi mente dise que te amo.[Diakko]
RomanceUna rara poción hizo que Akko abriera los ojos sacará a flote poco a poco sus sentimientos hacia Diana Cavendish. Historia Diakko [Portada editada por mi]