⁸ɪɴᴛᴇʀɴᴀʟ

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Harry styles a sus dieciséis años comenzó a comportarse de manera violenta después de una pijamada con sus amigos donde jugaron a la ouija, sin saber que traería consecuencias, tiempo después.

Louis Tomlinson a estado internado en el hospital psiquiatratrico desde hace ya cuatro años por ser responsable de las muertes a varias personas, su pasatiempo favorito era buscar a cualquier hombre o mujer, lo conquistaba con esa mirada encantadora para después llevarlo a su apartamento, les arrancaba la piel pedazo a pedazo, le encantaba escucharlos gritar hasta la muerte.

Dos personas en un lugar completamente siniestro, están a punto de conocerse.

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Su respiración esta agitada y sus manos se mueven violentamente intentando zafarse de los grandes hombres que lo sostienen. Esta gritando que lo dejen en paz que no lo volverá hacer, su madre llora desconsoladamente en los brazos de su padre, cuando siente un escalofrío recorrer su cuerpo, se queda quieto un instante levanta la mirada a sus padres y su voz sale más ronca de lo normal.

- Esto no se quedará así, van a pagar todo lo que han hecho, soy libre ahora- una sonrisa risa siniestra aparece n su rostro.

-Harry, no digas eso mi amor estarás bien ellos te ayudarán- dice su madre intentando no romper en llanto.

-Yo...Soy el diablo y voy acabar con todos ustedes- comienza a reírse de una manera siniestra, los hombres que lo sostienen intentan meterlo al coche, en un movimiento Harry acerca su boca a la mejilla de uno de los hombres y le arranca un pedazo de carne, la sangre brinca por todos lados, mientras él se ríe y los demás gritan asustados.

La habitación es demasiado pequeña todo es gris y hace demasiado frío, la pequeña bata blanca que lleva no es suficiente para taparlo, desde hace años que tiene esos ataques, él sabe que lo provocó.
Cuando tenia dieciséis años junto a sus amigos juzgaron a la ouija sin saber que invocarian a algo más grande, la pureza que él poseía cautivó al demonio que ahora lo posee, y no lo deja vivir en paz, a hecho cosas horribles con el paso del tiempo, y él sólo puede sentarse a llorar. Como ahora ahí encogido de piernas mientras se abraza a él mismo, tiene miedo y no sabe cómo enfrentar a lo que está dentro de él.

La puerta es abierta abruptamente dejando entrar a una madre, ella lo mira y se acerca.

-Tranquilo niño, te ayudaremos.- le tiende la mano para que se levante.

Harry la toma temeroso y lo ayuda a salir del cuarto. Caminan lentamente por el pasillo las puertas tiene una pequeña ventana dejando ver a muchas personas. Uno está pegándose en la pared fuertemente dejando un rastro de sangre, otro esta masturbandose y cuando pasa el le enseña todo su cuerpo, con rapidez Harry voltea el rostro, pero hay uno que le da miedo tiene una máscara de puerco, y lo mira fijamente sus ojos demuestran odio y siente su cuerpo erizarse. Un empujón de la madre lo hace volver a la realidad y sigue caminando, hay muchas personas unas dan más miedo que otras y el solo quiere salir de ahí. Llegan a una habitación donde hay muchos claves conectados a computadoras, lo recuestan en la camilla, le ponen unas esposas en las manos y una mordaza en la boca.

- Madre marie, esto se debe deber a un ataque del mal. - dice otra monja más joven.

-Se le llama esquizofrenia niña, y esto es trabajo de especialistas, debería de haber más doctores como yo- entra a la habitación un hombre trajeado.

-Doctor Marcus, si no va ayudar puede retirarse, esto es algo que llevamos haciendo desde la década de los 50'.

-Exacto los 50' estamos en los 80' sabemos más sobre esto, y esto no se trabaja con golpes, ni un exorcismo.

𝑂𝑛𝑒 𝑠ℎ𝑜𝑡s - 𝐿𝑆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora