Bestia

Prologo

Para el gran cazador de la tierra, los mares y los cielos, no existía reto alguno. Siendo hijo de dioses, alabado por algunos por ser un gran y temerario cazador.

No existía ser en la tierra que no lo conociera, mucho menos que no le temiera.

La sensación de ser aterrador, le fascinaban, adoraba que lo idolatraran tanto.
Y su obsesión por las criaturas místicas, era tan aterradora.
Incluso, las mismas bestias con las que el se topaba, le temían.
El gran cazador, era una bestia, en cuanto se trataba de cazar. El mejor de todos en esos tiempos. Pues no por nada, era fiel caballero sirviente al ejército de su tia Athena, sirviendo también a su padre Marte, el dios de la guerra, y cazando con su tia Artemisia; quien le enseño todo sobre la caza. ¿Cómo no ser el mejor de todos cuando vivía con los dioses?

Al gran cazador, le encantan las criaturas místicas, de la era mitológica. Sobre todo su gran fascinación eran los pegasos.
El había logrado cazar algunos, pero había una especie en particular que le fascinaban.

Los pegasos híbridos

Son los únicos pegasos, capaces de transformarse en humanos, y tener las mismas cualidades de uno. Creados por el mismo Zeus para su hija. Valientes guerreros de los dioses, que solamente Athena poseía a dos; ambos también caballeros fieles a su diosa. Los más preciados en el ejército de su tía.
Pues al ser humanos, no eran simples humanos, si no, también tenían el poder de concebir.

De esos dos híbridos, era solo uno el que le interesaba a el gran cazador. El menor era el favorito tanto de su tía, como el de él.

Joven pegaso de nombre Koga, uno de los guerreros más nobles que ha conocido en su vida.

Le fascina todo de koga, tan es así que hará todo lo posible por tener al pequeño Koga en sus garras.
Porque el gran cazador es una bestia al cazar, volviéndolo el mejor de todos. Nada ni nadie lo detendrá.
Si su abuelo abuelo zeus, y sus tíos abuelos; los dioses, se metieron entre hermanos y utilizaron artimañas para poder cazar a sus presas. ¿Por que el no? Al final, era un Dios, y conseguiría a su pequeño pegado a cualquier precio.