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Chiara se encontraba durmiendo en la oscura habitación de una pensión económica en una calle escondida de la ciudad de Buenos Aires, estaba soñando que estaba sobre un escenario y los aplausos la envolvían, hasta que un fuerte ruido la despertó de golpe.

La puerta.

–Chiquita abrime la puerta -esa voz que arruinaba los días de Chiara, esa irritable, horrible y detestable voz- ¡no te hagas la tonta, hoy es día de pago! -el día empezaba genial

Chiara elige no empezar el día con el pie izquierdo y se digna a levantarse con la mejor de las ondas.

–Buenos días, Raúl -empieza diciendo con mucha paciencia, el la mira de arriba abajo como siempre, y ella evita su incomodidad para no quedarse sin lugar donde vivir- hoy me tienen que pagar en el bar, si estás despierto cuando vuelvo te la doy -el la mira rebajandola, como acostumbra a hacer, toca su bigote pensativo y provoca nervios en Chiara-

–No te preocupes chiquita, con vos puedo hacer excepciones y esperarte hasta mañana -le guiña el ojo, incomodandola nuevamente, pero ella se abstiene de hacer comentarios-

Chiara por el rabillo del ojo ve como la esposa de Raúl lo espera impaciente desde la puerta de su habitación, la mata con la mirada como si ella fuese la culpable de que su marido sea un sinvergüenza.

Su día recién empieza y ya es una desgracia.

💌

Julián miraba concentrado a su amigo, que le rogaba que lo acompañe a una cita a ciegas porque su amigo le había cancelado a último momento

–No cachete, ya te dije que ni en pedo voy a una cita a ciegas -dijo Julián, cansado de la insistencia de su amigo Gonzalo- y menos con una amiga de tu nueva novia

–Dale juli, no seas corta mambo -respondió con frustración-

–No soy corta mambo amigo, pero la última vez que me llevaste a una se notaba que la mina estaba interesada en la plata -gonzalo quiso responder, pero se quedó callado porque sabía que tenía razón-

–Porfa, y te juro que no te molesto más -Julián lo miró cansado-

–¿Qué me das a cambio? -preguntó con interés-

–Lo que quieras

–Está bien, me voy a cambiar -gonzalo sonrió victorioso- pero que sea la última vez eh

–¡SI, TE LO JURO! gracias, gracias, gracias -le besó la cara repetidas veces y julián lo sacó-

–mucho cariño ya -dijo riéndose- espero no pasarla mal de nuevo -suspiró-

💌

–contame julián -la rubia que estaba a su lado lo miraba expectante- ¿Qué se siente ser un jugador de river tan reconocido? -comenzó a acariciarle el brazo con descaro, como si el no se diera cuenta de sus intenciones, el solamente la miró-

–divertido, más cuando se me acercan por interés ‐le sonrió con sarcasmo, gonzalo y ella lo miraron mal-

-Buenas -saluda con amabilidad una camarera, cortando la tensión que se sentía en el aire- ¿les puedo ofrecer la carta? -gonzalo la miró embobado y julián reía internamente por las caras de las dos chicas presentes-

💌

–Hermana, te juro que los conozco de algún lado y no sé de dónde -Roma, la mejor amiga de Chiara, había visto a los dos jugadores entrando y no recordaba de dónde los conocía-

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⏰ Última actualización: Dec 30, 2022 ⏰

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hasta el último baile | julián alvarezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora