| Prólogo |

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Te he dado el mundo plasmado en letras.
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Y si hablamos de sentir...
lo que vez, lo que escuchas, lo que tocas...
¿Qué sentirías estando conmigo?

Porque todo me lleva a la ansiedad.
Me lleva a pensar e imaginar, me trae hasta aquí para textos crear.
Porque sin querer, sin pensar y sin dudar, me enamoré de ella, y no era sorprendente para nadie, porque era evidente, no lo oculté, mucho menos lo callé.

Las malas lenguas dicen que el amor es la enfermedad del ser humano, que la estupidez se desarrolla por la simple sensación de obtener una gota de eso, que día a día nos consume y no hay quien erradique esa maldición.

Pero quiero decirle que no me arrepiento.

Puede usarme, morderme, ahogarme, desecharme, hacerme trizas... Porque cada que cierro los ojos escucho su risa, siento su cuerpo pegado al mío, veo sus ojos y permanezco como estatua sólo para sentirla... Sólo para imaginar que llega corriendo, toma mis mejillas entre la palma de sus manos y me besa.
Porque cada que me dice algo lindo, me siento alguien.
Ahora me tiene cantándole a la luna,
a los astros,
a las plantas,
a los edificios,
a la ciudad entera de lo mucho que me gusta, y que con verla la serotonina se apodera de mi cuerpo y con sentir un abrazo suyo mi miocardio se acelera.
Y sé que soy muy joven para amarla, y también sé que en algún momento todo va a terminar, pero mi vida tomó sentido cuando me dijo un "te amo", porque para un poeta de cada emoción nace el arte... Y ella es mi musa.

Y sé que leerá esto... Sé que hay veces que duda, que duele, que quema... Pero amor, te amo con cada pieza de lo que soy. Y hoy eres lo que me hace escribir, lo que me hace crear, lo que me inspira a imaginar, hoy eres lo que amo, hoy eres mi poesía.

Con amor,
Leslie.

HISTORIA DE LESLIE CRIM.
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