el esceptico que encuentra la fe

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Shank era un hombre de poca fe, de hecho borra eso, el no creia en nada mas que el mar mismo y en su tripulacion.

Era algo que el mismo mundo le enseño cuando el hombre que mas admiraba murio frente a sus ojos y muchos incredulos e ignorantes celebraron, ellos no pensaron que el mundo de muchos se volvio frio, una tripulacion perdio a su capitan, amigos predieron a su hermano, una mujer perdio al amor de su vida e hijos perdieron a su padre.

Mucho tiempo estuvo amargado, a pesar de que sonreia porque eso le enseño su capita (su padre) ante toda advercidad, aun estaba amargado.

Sabe que su hermano buggi tambien se amargo feo y se fue.

El prometio que encontraria el one piece con su propio barco y tripulacion, pero por mucho tiempo no lo hizo, su motivacion se fue y vagaba en los mares buscando un proposito que lo llenara, un mensaje de que estuviera bien seguir.

Miraba el cielo estrellado y suspira con pesar.

Cierto día recivieron un mensaje de rayleight, era una nota con la letra del antiguo capitan, diciendole que buscara una fruta en especifico y la entregara, que sabria cuando eso pasara.

No sabia a que se referia pero cumplio, aun siendo un adulto y un capitan por derecho propio, no puede negar una orden de su capitan.

Fue asi como se lanzaron a la aventura en buscar una fruta del diablo, la gomu gomu, extraña la verdad.

No lo consiguieron, por lo que decidieron tomarce unas pequeñas vacaciones por los blue, empesando por el este, el mas debil de todos.

Ese mar traia amargos recuerdo porque era el origen de su capitan y muchos de sus tripulantes, navegaron pero el mar extrañamente los guio, el viento movio las velas, su segundo al mando le pregunto, pero el solo respondio que el mar les daria las respuestas, porque asi como era caprichosa, tambien era sabia.
Asi es como llegaron a una pequeña isla y pararon en un pueblito costero.

Bajo para precentarce pero cuando toco la tierra, una risa contagiosa paso por sus oidos y su cuerpo se lleno de calides, como si un abrazo recorfontante lo llenara, se mareo ligeramente.

Miro a todos lados desorientado, pero se recompuso para hablar con el alcalde del lugar, despues de una sutil amenaza caminaron buscando un bar, shank y su tripulacion sintieron una pequeña precencia que los seguia, miro pero no se veia nada.

-¿ustedes son piratas?-

Giro la cabeza hacia delante donde estaba la voz, bajo la mirada y un golpe al estomago metaforico recibio, vio a un niño sonreir como el sol mismo, pero con el aire de una libertad tan grande y sus ojos tan profundos como el mar que le recordo a su capitan, pero era mucho mas pesado.

-¿son o no lo son?-

Shank se trato de recuperar, para contestar al niño que le recordaba a su capitan pero que era mas grande que no podia precisar porque.

-claro mocoso y unos muy malos- sonrio de forma aterradora para asustarlo y dejar de sentirce mareado, el niño solo sonrio mas grande.

-entonces tienes muchas historias divertidas-
Ese fue el inicio del año mas divertido y amado de la tripulacion.

El tiempo paso rapido, shank adoraba al mocoso, le contaba historias, le enseñaba y en algun momento empezo a creer.

El niño le conto su sueño, sueño que tambien fue el de su capitan, pero a diferencia de el, shank sabia que este niño lo lograria, no lo sabe porque pero lo sabe, le dio tanto miedo que se rio del menos.

Unos días estando en alta mar, shank necesita separarse del menor por unos pocos días, muchos recuerdos pero lo ama tanto que no puede irse por mucho, ven un buque de la marina, lo asaltan por capricho, en el futuro dira que todo fue planeado, pero grande es su sorpresa que encuentran la fruta que estaban buscando, la toman y escapan a la pequeña isla ya conocida.

Estando en la taberna son molestados por bandidos y defendidos por luffy, a shank le duele el corazon de tanto cariño y a pesar de que el menor se enojo con el no puede evitar pensar que el niño sera alguien grande y el quiere estar ahí para verlo.

Pero su estomago se revuleve de forma fea cuando vio al niño comer la fruta del diablo, toma al niño con panico, con el deseo que la escupa, pero cuando toca al pequeño un relampago lo golpeo por todo el cuerpo.

-buen trabajo mi mocoso-

Se dio la vuelta, esa voz la conocia muy bien.

-shank, me lastimas-

El pelirrojo volvio a ver al niño y sus ojos se llenaron de lagrimas, habia completado la mision, este niño era el tan esperado por su capitan, este niño era el que lo estaba anclando al mundo otra vez, el niño lo miro preocupado y toco su cara.

-¿shank?-

-ahora jamas podras nadar, eres un ancla en el mar, un ancla- se rio ante la indignacion del niño, su tripulacion lo miro con preocupacion, pero el solo les sonrio.

Salieron a prepararse por ultima vez, su corazon dolia, pero ya no tenia nada que hacer en ese mar, ese niño lo volvera a ver.

Se queria ir sin problemas, pero los bandidos de la montaña decidieron que era buena idea molestar a su pequeño, a su ancla que lo mantenia en tierra.

Sacrificar su brazo no fue nada.

Nada en comparacion a la vida que tenia en su mano, ese niño que lloraba como si el mundo se le derrumbara, curioso que esta destinado a tenerlo en los hombros.

Cuando se estaban despidiendo el niño proclamo al mundo que seria el hombre mas libre de todos y se haria con el titulo de rey.

Rey de los piratas.

El mundo estaba de acuerdo con el, el mar de mecio con fuerza, el viento rugio y el sol brillo mas.

El pelirrojo supo que este ser llevara el mundo a la verdadera libertad, ahora entiende porque su capitan murio con una sonrisa, ahora el puede ver ese futuro brillante que siempre le dijeron.

Este niño le devolvio la fe.

Shank sonrio, su mano se movio con inercia, un rey no era nada sin una corona.

Gracias madre mar

-espero que cumplas tu promesa, ven al mar y entregamelo cuando seas fuerte-
Le puso su amado sombrero de paja  aquel que le dio su padre, su capitan y ahora lo entrega a este niño que ama con el corazon.

Por guiarme al gran sol

-espera y veras- el niño miro con fuego en su mirada, con la muda promesa de cumplir.
Shakn se rio ligeramente, no tenia la intencion de recibirlo, no puede tomar la corona del rey.

Que me dara la libertad

Subieron al barco y se marcharon con una sonrisa.

Muchos años despues, shank vio la recompensa del dios nika.

-es hora de partir a buscar el one piece- le dijo a su segundo al mando.

-hora de verlo por fin, junto a ti, mi ancla, mi luffy-

Me haces un creyente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora