Bondad | King×Coronel

Bondad

El Coronel Mogekov Hashasky, líder del "Mogeko Klemlin" y un gran ejemplo de guiador. Fue capturado por Moge-Ko, una jovencita... "Especial".. Si así se le llaman a los que te secuestran para torturar te, solo por diversión. Si, está loca...
El Coronel es alguien bastante frágil, cualquier insultó o hasta golpe mínimamente violento lo hace llorar, debido a eso suelen joderle con que es un "bebé llorón" cosa que le molesta, ya que no tolera que lo consideren un "bebé"... Pero el hecho de que se comporte como un niño inocente, aún siendo un buen líder, no ayudaba tanto... Es demasiado puro para este mundo..
¿En qué estaba? Ah sí. Ahora mismo se encuentra siendo perseguido por aquella loca, cual iba en compañía con algunos Mogekos en manada, no tantos obviamente, pero le superaban el número al de blanco. Hashasky no sabe cómo es que todavía sigue con vida en aquel castillo, con todos los peligros que está expuesto y no saber nada de este sitio, era un milagro que siguiera vivo... Pero obviamente necesitaría una guía para volver a casa, o una pista de algún atajó, ya que solo no podría...
Actualmente se encontraba corriendo por los pasillos del Piso 6, totalmente aterrado por su vida «Este lugar da miedo» Pensaría, a la vez que seguía corriendo, con aquellas ganas de llorar características en el. Era razonable, estaba en peligro, y no era el único que lloró cuando fue capturado, ya que antes de el, hubo un montón de Mogekos torturados hasta la muerte por ella...
Seguía corriendo, sin ver por dónde miraba ocasionando que se chocase (o casi) con algún que otro Mogeko, hasta que se tropezó con uno en particular...; El Rey Mogeko
—¡Oye! ¿¡Que no ves por dónde caminas?! Dios..— Exclamaria notoriamente enojado, asegurándose de que su capa no se haya ensuciado, ya que juntó al de blanco cayó al piso.. La verdad ni siquiera se tomó el tiempo de ver quién era, hasta que este sollozó —... ¿¡Coronel?! P-pero, ¿¡Que mierda hace usted..—
—¡¡WaaaAAaa!! ¡¡EllA quiere hacerme dañO!!— Gritaría en llantos el de blanco, para posteriormente aferrarse a su de amarillo. Este intentaría sacarlo de encima suyo, pero con solo escuchar la voz de Moge-Ko dejó de hacer cualquier movimiento

—¡Hey tu! ¿¡Que haces con el juguete nuevo de Moge-Ko?! ¡Devuelve Lo ahora mismo!— Exigiría la rubia, con notoria furia de que aquel Mogekov se le este escapando a cada rato. El rey siguió sin hacer nada —N-no m-me entregues a ella, p-por favor...— Murmullo el de blanco, llorando en silencio aún aferrado a su contrarió... Siendo sinceros y realistas, lo normal sería que el rey deje a aquel indefenso Mogekov a su suerte, obviamente corriendo el peligro de ser matado por la rubia... Pero, cuando se levantó y estuvo apuntó de voltearse he irse, el coronel se aferró más a él, además de mirarlo a los ojos, rogándole con aquella mirada llorosa que no lo dejase solo con aquella loca...
El de amarillo pudo solamente ignorarlo he seguir en sus propios asuntos, como el de buscar a Yonaka–Tan y ese Mogeko defectuoso, cuáles se le escaparon... Pero, al ver cómo el de blanco lloraba he aferraba a el, buscando protección de algún modo, no pudo hacerlo... Al parecer, algo dentro de el quería protegerlo, aunque hasta para el fuera extrañó aquel sentimiento. ¿Que le pasaba? Bueno, eso no era lo importante, tenía que ponerle un alto a esta situación. Después de todo Moge-Ko es la creación y Mogeko el creador, ella tenía que hacerle caso sin excepción —Moge-Ko, deja al Coronel Hashasky quieto. El no es un juguete, ¿Entendido?— Exclamaria, poniendo a su menor de altura detrás de el, cual se escondería detrás de su capa rojiza aún aterrado por la presencia de su secuestradora. A Moge-Ko no le gusto aquello —¿¡eEeeH?! ¿¡Y TU quien te crees para decirle a Moge-Ko que hacer y QUe NO?!—
—Bueno, el Rey y TU creador, "señorita". ¿Acaso lo olvidaste?— Diría, señalando su corona. Aquello había Sido una falta de respeto para el rey, el no era un simple Mogeko y eso Moge-Ko lo tendría que entender —¿Y me importa?—
—Deberias... Con un solo chasquido puedo mandarte a la hoguera para que te quemen, soy capaz de ello y MUCHO más si sigues desobedeciendo. ¿Oh tengo que recordarte lo de Nega Mogeko?— Decía, cada vez más serio. Hay que admitirlo, la chica por dentro si estaba algo "intimidada" por aquello, pero no quería demostrarlo —M-moge-ko se llevará al Coronel y punto..— Diría, el Rey soltó una ligera risa, para después verla a los ojos, con aquel grande ojo cual pareciera que te viera el alma —¿Ah sí? ¿Con la ayuda de quienes?— Moge-Ko volteó a ver atrás suyo, para darse cuenta que su manada de Mogekos la habían dejado sola. Ellos ya sabían de lo que el rey es capaz de hacer con aquellos que se oponen a el... No querían ser ejecutados
Moge-Ko se fue corriendo, dejando en claro que dejaría al Coronel en paz