𝙎𝙩𝙞𝙡𝙡 𝙖 𝙗𝙖𝙗𝙮 hyunin

𝟶𝟹 - ɴᴇᴡ ᴄᴀʀ

Jeongin se encontraba fuera de la escuela con sus amigos charlando animadamente de cosas triviales. Las clases finalmente habían terminado y podrían volver a sus casas, aunque eso significara hacer un montón de tarea porque parecía que sus maestros no tenían piedad sobre ellos.

— ¿Ya vieron ése auto? — preguntó Felix, señalando y provocando que Seungmin y él se giraran a ver el coche.

Era un Kia Optima color negro, se encontraba parqueado frente a la escuela, aún no había salido nadie de él por lo que todos los jóvenes se encontraban curiosos hablando de este.

— ¿De quién será? — inquirió esta vez Seungmin, sin dejar de observarlo, a lo que los dos chicos se encogieron de hombros.

— ¿Será de algún maestro? — se preguntó Jeongin, frunciendo levemente el ceño extrañado.

— ¡Qué va! — Felix movió su mano, dando a entender que era una tontería siquiera pensarlo — Me parece difícil que algún maestro tenga un auto que habrá costado tanto.

— Es verdad, seguro vienen a recoger a alguien — concordó Seungmin, asintiendo.

— ¿Y a quién? — preguntó Jeongin.

En seguida supo a quién. Pues vió a su novio salir de aquel auto tan costoso, sus ojos se abrieron notablemente ante tal sorpresa.

Nuevamente escuchó los halagos que no tardaron en llegar ante el apuesto hombre que había salido del coche y que ahora se encontraba apoyado sobre este con los brazos cruzados.

— ¿Que no ése es tu novio, Innie? — inquirió Seungmin con el ceño fruncido.

— Jeongin, ¿ese es tu novio? — Felix habló, asombrado de lo que se había enterado. Realmente jamás lo había visto debido a que no vivía cerca del aludido y mucho menos asistían a la misma escuela, sólo había escuchado de él.

Jeongin se limitó a asentir anonadado — Ahora vuelvo — dijo y comenzó a caminar hacia su pareja, quien se encontraba rodeado de mucha gente, mayormente chicas, halagando lo guapo que se veía y entre otros comentarios — ¿Qué haces aquí? — inquirió cuando llegó frente a su novio después de haber empujado a algunas personas.

— También me alegra verte, Innie — se burló Hyunjin, con una gran sonrisa.

El aludido rodeó los ojos provocando una carcajada en el mayor — Hablo en serio, Hwang. Además ¿de dónde mierda has sacado ese auto?

— Mi padre me envió dinero porque aprobé mis exámenes en la Universidad, me dijo que lo usara para comprar un coche y éso hice — se encogió de hombros, con indiferencia, como si no fuera la gran cosa.

— Y bien, ¿viniste a presumir tu auto nuevo entonces? — se burló el menor.

— Algo así, pero ya que tengo auto nuevo puedo venir a recogerte de ahora en adelante — dijo y le guiñó un ojo, sonriendo burlón.

Jeongin suspiró pesado — Eso lo hablaremos después, ahora súbete y deja que me despida de mis amigos.

— ¿Porqué no los traes? Puedo llevarlos también. No es ningún problema, bebé.

El menor se limitó a asentir rendido y se dirigió hacia sus amigos. Cuando llegó con ellos les preguntó si querían un aventón, por lo que no tardaron en aceptar. Seungmin y Jeongin se burlaron entre risas de la emoción que tenía Felix pues debido a que no había conocido a Hyunjin quería hacerle preguntas.

— Amor, ellos son Seungmin, a quien ya conoces y Felix, mi amigo australiano del que te hablé — los presentó señalándolos a ambos una vez que se habían subido al coche.

— Hola, Seungmin. Y Felix, qué gusto conocerte. Jeongin me habla mucho de ti — admitió el mayor, con una pequeña sonrisa.

—  También me da gusto conocerte, Hyunjin. — concordó antes de proceder — Jeongin igual me ha contado bastante de ti.

El aludido soltó una pequeña risa nerviosa, pues si se ponía pensar hablaba mucho de su novio en la escuela. Era imposible no hacerlo cuando su pareja era tan lindo con él y además, sabiendo que su amigo y Hyunjin eran bailarines le gustaba compartirlo a ambos ya que sabía que podía unirlos bastante debido a esto.

— Bueno, abróchense el cinturón que ya nos vamos — mencionó el mayor a lo que todos se colocaron el cinturón y en seguida Hyunjin encendió el auto, escuchándolo rugir para que después partieran.

Seungmin le indicó a Hyunjin el camino que debía tomar hacia su casa, conduciendo hasta allá ya que era el primero que debía bajar. El camino a la casa del pelirrojo fue medianamente largo, mientras bromeaban durante el viaje, soltando una que otra risa.

— ¿Y cuánto tiempo llevan saliendo? — preguntó Felix, mirando a la pareja que se encontraba al frente.

— Cumplimos dos años hace unas semanas — respondió Hyunjin mirando a su novio, quien asintió de acuerdo.

— ¿Dos años? — Felix estaba realmente sorprendido debido a la reciente confesión que llevaban saliendo — Éso es bastante tiempo.

Ambos lo sabían, no era tan común que jóvenes de su edad salieran por tanto tiempo, lo máximo que salían era al menos un año, no más. Sin embargo, los dos se sentían cómodos con el otro por lo que no se veían a sí mismos terminando. Aunque, claro, habían discutido ya un par de veces que a ambos los hizo sentir como la mierda pero nada que no se pudiese arreglar hablándolo. De todas formas, no era nada raro que tuviesen diferencias que no le parecía al otro puesto que ninguna pareja era perfecta.

Al cabo de unos minutos, habían dejado a Felix en su casa, Jeongin se despidió de él con una gran sonrisa, prometiendo que se verían mañana en la escuela, Hyunjin lo imitó, esperando que se volvieran a ver otra vez y hablaran más. Y ahora se encontraban frente a la casa del menor, Jeongin no quería irse pero tenía qué, así que ahora compartían pequeños besos con ternura pero en seguida se volvieron más intensos. Hyunjin tenía una mano en el rostro de su novio, acunando este para no separarse, mientras que la de Jeongin se encontraba en sus cabellos, enredando sus dedos un poco en estos.

El menor no perdió su oportunidad debido a la cercanía y llevó su otra mano hacia la entrepierna del mayor, acariciando esta levemente. Hyunjin en seguida reaccionó y se separó bruscamente de su pareja con el ceño fruncido.

— ¿Es en serio, Jeongin? — dijo con la respiración un poco agitada debido al reciente beso que les había quitado el aire a ambos.

— Vamos, Hwang. Será algo rápido, déjame hacerlo, por favor. — Jeongin pensó que debía verse patético al suplicar pero realmente no pensó mucho en eso por lo que lo ignoró -— No habrá sexo ya que dices que no estoy listo, será una mamada rápida. Siéndote honesto me excita la idea de hacerlo en el auto y podemos estrenarlo ya que es nuevo — le guiñó el ojo, sonriendo travieso.

Hyunjin ni siquiera podía creer lo que acababa de escuchar de la boca de su novio, Jeongin ni siquiera supo cómo interpretar la expresión que tenía en su cara. No sabía si estaba enojado, sorprendido o todo al mismo tiempo.

Hubo un largo silencio después de aquella confesión, Jeongin pensó que Hyunjin realmente estaba considerando la idea de dejarse hacer una mamada y eso lo alegraba pues significaba que a él también le gustaba la idea de hacerlo en el auto aunque una parte le pedía que no lo hiciera. Parecía en verdad tentado.

Hyunjin suspiró pesado al cabo de unos minutos. Jeongin sabía que finalmente había llegado a una conclusión y el menor no pudo evitar sentirse nervioso y emocionado.

— Jeongin, ¿qué te dije sobre esto? — dijo Hyunjin, suspirando pesado y lo miró con una ceja alzada.

— ¿Es en serio, Hwang? — alzó los brazos, fastidiado por la actitud del aludido — Tengo 17, tengo edad suficiente para hacer éstas cosas y no creas que no ví lo indeciso que estabas. Llevamos dos años saliendo, te conozco demasiado bien.

— Tienes razón, dudé. — admitió — Pero no estás listo y porque no te veo de ésa forma, Jeongin.

Jeongin rodeó los ojos y desabrochó su cinturón, tomó sus cosas y antes de salir habló: — Ya no soy un niño, Hyunjin. — suspiró pesado — Te veo luego.