Diana ❤

3.Desde lejos

Escucho una voz a lo lejos, por mas que quiera no distingo lo que dice. Continuo escuchando la voz hasta que por fin entiendo lo que dice

-Despierta, hemos llegado.

Abro lo ojos un poco y veo a mi hermano mirar asombrado por la ventanilla del avión. Vuelvo a cerrar los ojos y cuando los abro nuevamente el avión ya ha aterrizado y todos se encuentran de pie para bajar. Me pongo de pie y aliso un poco mi cabello, comienzo a tomar mis cosas y espero a que nos llamen.

Después de caminar por largos pasillos al fin llegamos al área para recoger las valijas, mi padre habla por teléfono con los gerentes del hotel donde nos hospedaremos y después de unos minutos nos indica a que le sigamos a la parte exterior del aeropuerto. En cuanto cruzamos las puertas siento el calor abrazador y siento como una gota de sudor escurre por mi espalda. Hay un coche esperando a llevarnos al hotel. Durante todo el camino el chófer del auto nos cuenta acerca de todos los paisajes y casas de personas famosas por los que hemos pasado. Al llegar al hotel nos detenemos y mi padre le da un billete. Mi padre camina hacia la recepción y unos minutos después nos llaman y nos colocan un brazalete a cada uno, mi hermano y yo nos quedaremos por separado de mi padre y su familia. Tan pronto llevamos las maletas a la habitación, mi hermano y yo nos decidimos por ir a dar un paseo por la playa. Me coloco el bikini por debajo de la ropa y me pongo una gruesa capa de bloqueador, mi tono de piel es no es completamente claro o muy oscuro, pero si el sol la toca produce gran daño.

En cuanto llegamos a la playa mi hermano recorre todo el paisaje en busca de presas a las cuales atacar, una risa sale de mi al pensar esto.

-¿Que sucede?- me pregunta el.

-Nada- contesto sonriendo y mirando hacia el mar. El me mira y rueda los ojos-Creo que me meteré ahora, hace demasiado calor.

Me saco la remera, los lentes y los shorts. A lo lejos veo a un chico algo atractivo mirándome, de verdad espero que todo el ejercicio de los últimos dos meses haya servido de algo. Camino lentamente y entro en el agua fría, cuando salgo del agua aquel chico sigue mirándome. Mi hermano corre hacia mi y me ofrece una toalla, lo cual me hace reír.

Unas horas después nos reunimos con mi padre en la piscina, esta vez decido no entrar en el agua y me recuesto junto a la piscina, me coloco los auriculares y cierro los ojos. Muevo los pies al ritmo de la música hasta que de pronto me sobresalto al sentir como mi cuerpo es mojado con agua helada. Abro los ojos dispuesta a encontrarme con mi hermano, pero en lugar de eso me encuentro con unos lindos ojos castaños,noto el nerviosismo en su mirada y le sonrió. Esta completamente mojado, recorro todo su cuerpo con mi mirada. No es el típico muchacho que tiene grandes músculos, solo tiene los suficientes para impresionar. Me doy cuenta que me ha descubierto mirándolo y me sonrojo inmediatamente.

-Soy Mauricio

-Diana- digo entrecortadamente.

-¿De donde eres?- dice con voz coqueta.

-España- digo siguiendo a su juego.

-Perdona haberte mojado

-No hay problema- digo embobada con sus ojos.-¿De donde vienes tu?

-De la capital de México

Un mexicano muy sexy pienso.

-Nos vemos luego Diana- dice al mismo tiempo que me manda un beso.

Cuando me doy cuenta veo al mismo chico que me observaba a la distancia en la playa. Decido entrar a la piscina y cuando lo hago la esposa de mi padre comienza a interrogarme. Aun no lo admito pero ella me parece una buena persona, no pienso admitirlo y menos aun a mi padre. Pero ella me ha apoyado mas de lo que mi madre lo hace.

En fin, le cuento todo a Karla (esposa de mi padre),cuando termino ella solo da un chillido de alegría y mi padre pega una carcajada desde lo lejos. Mis mejillas arden al notar que Mauricio se encuentra a lo lejos mirándome.

Unas horas mas tarde me encuentro decidiendo entre un vestido casual o unos shorts, mi padre quiere una cena familiar. Lo cual me sorprendió ya que en las vacaciones o viajes que hemos hecho nunca es tan afectivo como lo ha sido en este día. Al final termino llevando una falda con estampado y una blusa de mezclilla. Mi hermano siempre me mira como si estuviera loca al utilizar mangas largas en la playa, pero el calor nunca ha sido un problema para mi, como acabo de tomar una ducha, mi cabello cae en rizos así que solo lo cepillo un poco para que no se alborote con el cambio de clima y me aplico una suave base de maquillaje y labial rosa.

Cuando bajamos por el ascensor me topo con Mauricio, lleva una camisa junto con unos pantalones claros, luce muy guapo.

-Hola bella.

-Hola- contesto entre risas, mi hermano se remueve incomodo. -Este es mi hermano, Louis.

- Hola- dice Mauricio.

Mi hermano solo asiente con la cabeza y se que odia esta situación por la mirada que me lanza después.

Finalmente llegamos al primer piso y mi hermano sale huyendo dejándonos solos.

-¿Cuanto tiempo estarás aquí?

-Dos semanas me parece.- Digo sonriente

-Debe haber sido un largo viaje desde España.

-En realidad si, mas de 16 horas de vuelo- digo suspirando y acomodando mi cabello.

-Valla, yo hice solo un par de horas ¿Y a donde vas?

-Oh a la playa

-¿Te acompaño?

-Vale- digo sonriente y comienzo a caminar.

Durante los pocos minutos en los que tardamos en llegar a la playa hablamos acerca de como es México y como es España. Lo único que yo conocía de Medico era la inseguridad, pero una vez que hablas con una persona que pertenece aquí, todo cambia de parecer. México es un país muy bello. Cuando llegamos al restaurante que se encuentra junto al mar ubico a mi familia. Noto como mi padre frunce el ceño al ver que mi hermano no se encuentra conmigo y su esposa solo tiene una gran sonrisa en el rostro. Finalmente nos despedimos y el sigue si camino.

-¿Y quien era ese?- pregunta mi padre.

-Su nombre es Mauricio, lo he conocido al llegar aquí.

-Vamos Fer es inofensivo- dice su esposa.

El solo la fulmina con la mirada y le hace una seña al mesero.

Mi hermano llega hasta que hemos terminado de cenar, así que le pido la llave de la habitación y me voy.

En el transcurso a la habitación, noto al mismo chico que me miraba a lo lejos. No lo he mirado detenidamente pero creo reconocer su figura. Solo espero no tener algún acosador aquí en México.