Nuestra misión es protegerla

prólogo

En un castillo todos lo que lo habitan se encuentran en el mundo de los sueños sin saber que ocurriría una tragedia
Por los años de paz nadie a estado alerta porque pensaron que duraría para siempre esa paz

En los pasillos del castillo dos guardias pasaban como si nada frente a una habitación donde está una bebé dormida sin saber del peligro y la aventura que le espera

Pero dentro de esa habitación no estaba sola sino también una persona que al sentir su poder los pecados capitales fueron lo más rápido posible para enfrentar a la amenaza pero era tarde frente a ellos había un portal junto a una mujer muy conocida para ellos era Merlín el pecado del jabalí pero esta es otra se notaba y mucho pues la Merlín de su dimensión estaba en su pueblo reconstruyendo lo con algunos magos que sobrevivieron

Merlín: llegan tarde

Fue lo último que digo antes de desaparecer en el portal junto a la pequeña bebé

En otra dimensión
La hechicera llegó frente a una sala del trono donde está frente a ella su señor el señor del caos  Arthur pendragon

Arthur: lo isiste muy bien Merlín te felicito
Merlín: Arthur esto es un error
Arthur: de que hablas
Merlín: no puedes alejarla de su dimensión no sabes que consecuencias traería además tiene el mismo poder que tu pero más elevado además investigue y los pecados capitales en su dimensión le dieron la mitad de su poder cuando nació por que estaba débil
Arthur: no me contradigas ella es mi futura esposa debe estar con migo legos de todo el mal que existe además ella me ayudará con esos caballeros de la profecía y a  crear nuestro reino eterno
Merlín: pero
Arthur: sin peros entregamela

Sin decir nada más Merlín se la entregó además que podía hacer Arthur es mucho más poderoso que ella y si lo quisiera la eliminaría de la faz de la tierra

Mientras en los pasillos del castillo en el Reino eterno Arthur está de lo más feliz pues sus planes están llendo como lo planeó se detuvo frente a una puerta donde al abrir se vio una habitación para una bebé de la realeza

La habitación de Sakura

La puso en la cuna donde la observó con ternura y felicidad

Arthur: sin duda con tigo mi reino no nuestro reino eterno se ara realidad querida

Le dio un beso en la frente para salir de  la habitación y dirigirse a la suya

Mientras en liones
Un rubio de baja estatura veía las estrellas recordando a una mujer  especial en su vida como lo fue para los demás pecados y su hermano

Como deseaba verla y decirle  cuanto la ama que lo perdonará por lo que iso por abandonarla a ella y a  la persona que lo amo con toda su existencia no como una que sólo fingió amarlo y para  tener  un hijo que sería parte de una profecía donde ella tendría fama por engendrar a ese elegido

Meliodas: como quisiera verte sakura y pedir tu perdón y el de el

Dijo recordando a una pelirrosa de ojos jades y a su amado

Mientras en otra otra dimensión

Todos se encontraban alterados y como no si la portadora del caos se la habían llevado como si nada

En una sala se encontraban los pecados reunidos al igual que los diez mandamientos y los 4 arcángeles

Ludociel: esto es su culpa pecados
Meliodas: como que nuestra culpa
Ludociel: como escuchaste no supieron cuidarla y se la llevaron si la hubieran dejado en el Reino celestial esto no hubiera pasado
Meliodas: de igual forma se la hubieran llevado no importa cuanta seguridad le hubieran puesto enfrentarse a Merlín es peligroso además era de otra dimensión y seguro que Elizabeth la hubiera ayudado
Mael: ¡¡ basta no es momento de discutir ahí que traer de vuelta a su Majestad !!
Zeldris: el arcángel tiene razón no sabemos para que quieren a sakura o como supieron de su existencia allá pero no ahí que perder el tiempo en discusiones sin sentido
King: pues habrá que esperar que Merlín aparezca porque ir a su aldea es casi imposible si no eres un mago

Todos guardaron silencio pues lo que digo es cierto esa aldea aunque este destruida no podían pasar si no eran magos
Sólo esperaban que la pequeña pelirrosa estuviera bien

Mientras en la dimisión donde se encuentra la pequeña pelirrosa

En el cielo cinco  estrellas comenzaron a brillar intensamente cuatro de ellas rodeando a una como si la estuvieran protegiendo que comenzaron a girar para después dirigirse a sus elegidos  individuos dejando a la última sola pero aún brillante estrella
Las cuatro que se separaron se dirigían a distintos lugares
Una a liones otra a un bosque otro a unas montañas con barrancos  o algo así  y la última a el Reino eterno adentrándose a sus representantes en esta guerra que se avecinaba