capitulo 57

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Primera línea....

—¿Tienen que irse? ¿Es necesario?—Muerde su blanda mejilla.

Sus padres lo ven con tristeza, la mirada de, Mateo. Esta un poco aturdida, su expresión no se parecía en nada a la de hace unos años.

—Lo siento, cariño—Toma la mano de Alan—No quiero irme, quiero llevarte conmigo—Sus labios tiemblan por la importancia—Solo que.... Mamá no se están sintiendo bien, el necesita descansar.

No podemos decirte que, perdió a tu hermano o hermana, que si sigue así, puede intentar quitarse la vida. Su depresión está aumentando.

—¡Primero fueron los abuelos, ahora ustedes!

Su bello rostro se frunció, cada día sus rasgos fáciles iban madurando. Se volvía cada vez más finos, más elegante e atractivo.

—Pero está bien—Abraza a Mateo—Espero te mejores—Muy en el fondo tenía sus sospechas—Que ese viaje te ayude a olvidar lo malo y que tú color, alegría vuelvan a ti—Ese color amarillo se tornó lloroso—Cuidarte mucho, yo....yo estaré bien—Eso creo.

—Gracias—Solloza—Muchas gracias por entender, amor—Abraza con fuerza a, Alan—Come bien, no te esfuerces mucho en el trabajo, por el momento el viejo Ian, se hará cargo de la empresa. Tú solo concéntrarte en ti y en los estudios. ¿Si?

—Si, lo haré. Tú, también come bien. No te preocupes por mí, yo estaré bien—Vuelve asegurar al mismo tiempo que, besa la frente de, Mateo.

Alejandro se une al abrazo, besa la coronilla de su precioso hijo. En verdad no querían alejarse de el. Alan a penas está por cumplir 16 años.

—Me llaman cuando lleguen a su destino—Limpia sus lágrimas—No creo poder ir con usted al aeropuerto, si voy. Suplicare para que se queden.

—Entedemos—Acarician las mejillas de Alan—Solo será unos dos meses, volvemos para en enero, antes de que cumplas los 16 años. ¿Si?

—Si—Sonrie más emocionado, están en principios de septiembre, así que. No será mucho tiempo.—Cuidarse mucho. Dilan, llevarlos al aeropuerto.

—Asi será, joven maestro—Jala las maletas.

—Hasta pronto—Subio las escaleras.

En ese momento no sabía que no sería un hasta pronto, si no qué un profundo y destructivo adiós para Siempre. En un abrir y cerrar de ojos lo perdí todo sin yo, poder hacer nada.

Cuando regresaban a casa, perdí a mis seres queridos padres y mis amados abuelos su accidente fue la habladuría de la prensa por muchos días. No podían creer que, el avión donde venían tuviera fallas.

Demande las compañías de aviación, creí que fue provocado pero no fue así, todo fue un terrible accidente. En ese momento de desesperación, confusión, dolor, impotencia, solo podía llamar a la persona que era mi otra mitad. Pero no respondió, mis llamadas no eran respondidas, nadie respondía.

No podía preguntarle a Oliver, porque en ese tiempo el, había venido a la ciudad al entierro de mis padres y nuestros abuelos. Solo se estuvo un mes luego se fueron, de nuevo me quedé solo, querían llevarme pero no podía irme, tenía que encargarme del patrimonio familiar.

Solo le pedí que averiguar algo de Nick, solo para enterarme que, se habían mudado y no había dirección de dónde fueron. No quería rendirme, busque y busqué pero como si algo se empeñara a qué no lo encontrará, no supe más de el. Todo lo que amaba me había abandonado, estaba solo.

Me tocó sobrevivir en esa profunda y dolorida soledad sin poder gritar, maldecir. Me he vuelto un muñeco sin vida.

—Presidente, ¿Irá a dejar flores a la tumba de sus padres e abuelos?—Pregunta su asistente, maya.

Mi hijo es un omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora