strawberries [park seonghwa & tú]

🍓10🍓

— ¿Qué te parece?

— Es muy bonito.

Si lo era.

— Acompañame al lago.

La caminata hacia el lago fue en un total silencio, podía notar como SeongHwa parecía disfrutar del ambiente, era maravilloso escuchar el trinar de las aves mientras el viento no permite que el cabello permanezca en un lugar exacto, era gracioso ver como el cabello de SeongHwa era desorganizado por la brisa aunque seguro el mio también estaba así de desordenado.

Me acerqué un poco más al lago, junto a las enormes rocas que aún recordaba, subiendo en la más grande y adentrada a la cristalina agua como lo solía hacer junto a mis hermanos siendo aún unos niños. Podía ver los coloridos peces nadar tranquilamente.

— SeongHwa, acercate —quité mis tenis lanzándolos hacia el césped para así poder meter mis pies dentro del agua— esto es refrescante.

— Te gusta mucho estar aquí, o eso es lo que supongo.

— Pues supones bien, no recuerdo todos los detalles de la primera vez que vinimos aquí pero desde que tengo uso de razón y logro recordar al menos la minoría de las cosas que he hecho con mi familia, me encanta venir.

— Es maravilloso lo bien que complementan tú y tu familia.

— Ay vamos SeongHwa, tus padres son un amor y tu hermano ha dejado de beber.

El mantenía su vista aún sobre el agua del lago mientras movía su pie el cual estaba ligeramente tocando esta.

— Eso es todo gracias a ti, Young —lo miré, el seguía igual, sin mirarme— ¿no te has dado cuenta de que gracias a ti, yo cambié mi carácter?..  mi familia es un poco más feliz ahora, mi hermano a dejado de beber, soy feliz, Young.

— Pues.. Me alegra haberte alegrado la vida —dios, estoy muy nerviosa—

— Young yo.. —esta vez levantó su vista hasta conectar su mirada con la mía— yo.. soy feliz desde que te conocí, Young, me gusta estar contigo aunque sea dos minutos diarios.

Pude notar que sus ojos solo miraban mi rostro, moviendo estos de un lado a otro mirando cada longitud de mi rostro.

Estaba muy cerca de mi, a pocos centímetros a decir verdad.

— ¡Hwa Young, SeongHwa! —escuché la voz de mi hermano desde el pico de la colina—

Volteé y bajé rápidamente de encima de la roca para recoger mis zapatos y subir la colina luego de que SeongHwa hiciera lo mismo que anteriormente hice.

¿SeongHwa iba a besarme? estaba demasiado cerca.

No no, no puede ser, ¿por qué me besaría? no tiene sentido.

Cuando estuvimos junto a mis padres y hermano comenzamos a comer de los deliciosos bocadillos que mamá había preparado temprano en la mañana.

— ¿Te gusta este lugar, SeongHwa? —miré al nombrado—

Este asintió, yo me limité a sonreír levemente bajando la mirada.

— Es un lugar relajante, si estuviera más cerca de la ciudad vendría siempre que lo necesitara, para calmar mis pensamientos e ideas.

Estaba muy sonrojada ¿la razón? no tengo ni idea, solo sé que escuchar a SeongHwa hablar así sobre mi lugar favorito hasta ahora me emocionaba, tal vez esa era la razón.

Estuvimos un tiempo hablando de todo un poco hasta que propuse dar todos un paseo por donde quisiéramos y encontrarnos en un lugar en específico.

— ¿Y si hacemos un juego? —propuso Jeong Hwa— hagamos dos grupos y uno de nosotros se quedará a esperar ambos grupos.