Capítulo 11

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La mañana de lunes fue como todas, YoonGi había sido bastante cariñoso, había preparado el desayuno y había alistado a SungHoon dejando dormir a TaeHyung un poco más, lo había despertado con besos en los labios y el cuello.

Amaba esta nueva etapa de YoonGi, le encantaba ese lado de su personalidad, porque ese era el verdadero YoonGi, con el que se había casado, del que se había enamorado, pero aun así no podía quitar aquella sensación de su pecho, aquella que le decía que algo se aproximaba, algo muy malo.

Estaba comiendo un poco de fruta picada mientras descansaba un poco mi cuerpo en el sofá de la sala de estar, en eso el timbre sonó, sorprendido y extrañado fue a abrir la puerta, encontrándose con su nuevo vecino del otro lado, con una sonrisa tímida y sus ojos alegres.

—Hola —sonrió tímido.

—Hola SeoJoon — Sonrió ampliamente —¿En qué puedo ayudarte?

—He visto tu esposo salir esta mañana su auto, es un deportivo negro ¿Verdad? —Si, ese mismo.

—¿Tu esposo es Min YoonGi? ¿El dueño de la empresa Min's SA? 

—Exacto, ese es mi esposo.

—Bueno creo que iré al grano — Suspiró —El día que nos conocimos te dijo que era dueño de 2 grandes empresas, estaba pensado en abrir otra más, pero me gustaría que la empresa de tu esposo y mi empresa se unan.

—¿En serio? SeoJoon, esa es una gran idea —dijo sonriente

YoonGi había llegado más temprano que de costumbre, quería compartir con TaeHyung e ir juntos a recoger a SungHoon, aún agradecía el hecho de que su esposo le hubiese perdonado, después de lo que le había hecho y más el hecho que lo perdonara era casi un milagro, era simplemente suerte que él lo amara tanto, esa fue y seria su única salvación.

Al aparcar en la entrada divisó directamente a alguien, un completo extraño y luego visualizó a TaeHyung, quien sonrió ampliamente, una inexplicable rabia entro en su interior, no sabía por qué o simplemente no quería aceptarlo.

Bajo de su auto con paso firme, entró a su casa y caminó hacía TaeHyung quien lo miraba con un brillo en los ojos, ese único y especifico de él, pero no duró por mucho ya que su mirada estaba posada en otra persona, si, el castaño que estaba junto a su esposo.

—¡Amor! —sonrió TaeHyung al estar lo suficientemente cerca —Has llegado temprano. 

—Hola —saludó con leve tono de frialdad.

—Amor, él es Park SeoJoon, nuestro nuevo vecino —le dijo al castaño mirándolo —Él es Min YoonGi, mi esposo —lo miro esta vez.

—Mucho gusto —estrechó su mano con la mano de SeoJoon en un apretón firme. —Sé quién es, uno de los mejores empresarios de todo Seúl.

—Obviamente, no hay nadie mejor que yo.

Un pequeño silencio incómodo se formó en aquel momento, ninguno decía nada así que TaeHyung decidió romper aquel incómodo momento.

—Amor, SeoJoon viene con una propuesta increíble —explicó él llamando la atención de su esposo.

—Si, así es señor Min —afirmó SeoJoon —Yo soy dueño de 2 grandes empresas, me gustaría formar una tercera, pero sería un honor si nuestras empresas se unieran.

—No — anunció con rapidez e inconsciente de lo que decía, SeoJoon y TaeHyung lo miraron sorprendidos por la rapidez de su respuesta.

—¿Por qué no, amor?

YoonGi se reparó instantáneamente en lo que había hecho y se puso muy nervioso, muy en su interior sabía que lo hacía porque no le había caído bien SeoJoon, él solo hecho de encontrarlo a solas con su esposo no le había agradado para nada, pero por obvias razones no era una excusa muy válida y mucho menos madura.

— Lo siento, pero hoy en la mañana ya nos hemos asociado a una empresa extranjera —explicó con astucia

—Entiendo, no hay ningún problema señor Min — SeoJoon sonrió —Tendré que buscar otro empresario —levantó los hombros con despreocupación.

—Lo lamento, SeoJoon — Habló TaeHyung con un tono dulce y comprensivo hacia SeoJoon lo que notó YoonGi y no le agrado para nada, inconscientemente cerro los puños levemente, intentando impedir que la rabia se apoderaba de su débil mente.

—Dando fin a nuestra charla, fue un placer conocerte SeoJoon — se puso de pie al lado de TaeHyung, colocando la mano en la puerta, preparado para cerrarla

—Un placer conocerte, YoonGi — dijo SeoJoon — Hasta luego Hyungie — le sonrió y salió de ahí.

Cerró la puerta mientras intentaba controlar aquella sensación en su interior, se mantuvo frente a la puerta cerrada pensativo mientras controlaba a su respiración y leve enojo, un enojo bastante estúpido.

—¿Por qué fuiste tan grosero con SeoJoon? ¿Por qué lo echaste de esa manera? —le dijo TaeHyung de una manera seria, algo que no le agrado para nada.

—¿Y qué querías que hiciera? ¿Que lo invitara a comer? Si quieres voy, lo llamo y los dejo solos a ambos para que conversen con tranquilidad.

—¿Estas celoso? — pregunto con una risita, pero eso a YoonGi no le daba nada de gracia como a su esposo.

—No seas estúpido, jamás estaría celoso de alguien como él.

—¿Por qué me tratas así?

—No seas delicado, no te trate mal, cada ver te pones más insoportable TaeHyung.

TaeHyung lo miró triste y salió por la puerta de la cocina, justo cuando lo vio salir por la puerta, volvió a sus cabales, entendiendo por completo lo idiota que era, rápidamente corrió hacia su Hyungie para disculparse, no podía enojarme con él, no otra vez.

Nevertheless ✧ YoonTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora