EP.VII

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26 de noviembre, 2022

El partido México vs Argentina estaba a minutos de empezar, Ochoa estaba en los vestidores junto a su selección alistándose. Se sentía mal, sin importar el resultado el mal sentimiento no se haría.

Era un perder o perder, según el.

Obviamente sus compañeros notaban su preocupación, sobre todo Hirving, quien obligo a Memo q que le contara quien era el padre, hasta ahora era el único que se sabian el contexto entero.

— Ya wey, vas a empezar a apestar el lugar otra vez?— se acercó Andrés a su amigo — Ahora vas, cuéntame— se sentó al lado de el — Deja de chingar— respondió el de rizos — Oh que la verga, intento ayudar y te pones de mamón, no te vas a salvar, me lo contarás algún día en busca de mi consejo— y tenía razón, Guardado era alguien de confianza de Memo, siempre o casi siempre acudía a el.

— Bien te contaré, pero será después del partido que por cierto ya va a iniciar— habló una vez más el mexicano quien se levantó de dónde estaba para ir a la formación y empezar el juego.

Ambos equipos empezaron a salir acomodándose en la cancha, el argentino y el mexicano intercambiaron miradas por unos segundos, pero fueron más que suficientes para formar una sonrisa en los labios de ambos.

Volvieron a miras hacia enfrente, mirando la parte del estadio donde estaban los aficionados, y empezaron a sonar los himnos, la selección junto a los fanáticos comenzaron a cantar el himno mexicano. Memo miraba a todos lados, buscando exactamente nada; vaya sorpresa que se llevó al mirar una cabellera pelirroja familiar dejo de cantar con la misma euforia y comenzó a examinar de quien se trataba.

La chica a la que miraba se percató de esto y volteo a ver al guardameta, ganándose una mirada de asombro por parte de esté, realmente no esperaba verla en el estadio.

" Espera, si está ella aquí.. significa que también está.." miro nuevamente a dónde estaba la pelirroja, aunque intentara decir algo no escucharía, por el sonido y por la distancia pero de alguna forma Megan comprendió lo que quería saber Ochoa, se sentó en su respectivo asiento haciendo visible la presencia de una menor de larga cabellera rizada y de piel canela.

Su hija se había arriesgado solo para ir a verlo jugar, a el y al argentino, estuvo un momento mirándola hasta que el himno mexicano termino y ahora empezaba el de argentina, dónde cruzaron miradas finalmente, la menor bajo su cubrebocas para darle una sonrisa a su padre.

La menor vestía una camiseta de la selección mexicana con el 13 y el "Ochoa"  por atrás, pero llevaba una bandera de argentina con ella. Le importaba poco o directamente nada lo que dirían de ella los mexicanos, festejaría los goles de Argentina igual que los de México.

Ambos himnos terminaron, se saludaron y fueron a sus posiciones.

El silbataso dio inicio al partido, los nervios hicieron que Guillermo empezará a liberar su olor y no era el único, una banda de olores se empezaron a mezclar entre todos creando un olor bastante denso.

Afortunadamente, el único omega que ahora estaba jugando era Lionel quién al tener un lazo de unión tan largo con Ochoa no era afectado por los demás olores así que no afectaría su rendimiento en el partido.

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0-2

Argentina había salido victorioso, intentaba ocultarlo, pero Memo estaba más que feliz por eso; igual se sentía mal por su equipo, aunque aún jugarían con Arabia y sería su última oportunidad de avanzar a octavos.

Ustedes Primero || Messi x Ochoa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora