~capitulo 4~

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Narra Alicia

¡Con un demonio estaba desnuda!; No era la única... Alex estaba también desnudo... Y ¡por Dios! Su cuerpo realmente era mejor de que pensé... Su abdomen... Esos brazos e incluso tenía un tatuaje en uno de sus brazos en forma de dragón, casi grito pero me tape la boca rápidamente... ¡A VER ALICIA! te acaba de coger a tu sexy profesor que es el hermano de tu mejor amiga... Demonios... Debo dejar de tomar, no me preocupa mucho Eli... Con lo que es solo se reiría, pero ese no es el caso; me safe como pude de él para después irme directo a su baño.

Al verme en el espejo no me lo creí... Que demonios hice anoche... Tenía muchas marcas en el cuerpo, era muy sexy, mi sueño húmedo de la adolescencia pero ahora es otra cosa, estaba en pánico pero el entró en el baño algo adormilado haciendo me saltar del susto, con una voz muy ronca me saluda.

- buenos días linda Ali... Muy buena noche ¿No crees? - dijo en un tono burlón para después empezar a llenar la tina, estaba en medio del pánico y solo bromea con eso, lo quería matar pero también quisiera recordar que paso...

-que.. ¿Que hicimos anoche? - su mirada se posó en la mía, apostaría que estaba como un tomate y se empezó a reír - ¿De que te ríes idiota? - dije intentando sonar sería, haciendo que se Riera más.

-¿Que no es obvio? Jajajaja... Dios... Jajajajajaja ya te viste en el espejo - diría aguantando la risa, me acerqué molesta para golpearlo y este me tomo de las manos con algo de fuerza y me arrinconó en la pared, sentí como su respiración bajaba hasta mi cuello y lo lamía un poco - tranquila hermosa... No me gustan las mujeres agresivas... Bueno si, pero solo en la cama - ríe un poco - ayer con los tragos encima, jugamos mucho... Realmente fue buen sexo... Me volviste adicto con una noche ebria... No me imagino como será cuando estés sobria - bajaba a mis senos y mordía suavemente uno, solté un suave jadeo - en mi defensa también estaba ebrio antes que pienses mal-.

- y... Ahora ¿Cual es tu defensa? idiota - murmure un poco, quería que se quitará... Pero mi mente quería que siguiera, quería tener un recuerdo pues desde mi punto de vista se veía muy bien; igual ... Ya habíamos cogido, no hay vergüenza más allá - me vas a decir ¿qué sigues borracho? - bromee un poco.

- oh no no no... Esta vez solo quiero jugar contigo antes de irme a trabajar, quiero tener algo más allá de solo la Alicia ebria de anoche - lo supo al instante, como si leyera mi mente, sabía que quería seguir.

-pues bueno, ¿Que esperas? Alex - su nombre lo susurré con sensualidad viendo cómo se emocionó de varias formas.

Se rió un poco y cuando la tina se llenó se metió en ella llamándome para que yo tambien me metiera, así que fui con una sonrisa en mi rostro; sus grandes manos me tomaron por la cintura y me hundieron con él, empezó a llenarme de besos la nuca y después paso a los hombros, sus manos subieron hasta mis pechos empezando a apretar suavemente mis pezones y jugando con estos, no podía evitar soltar algunos suspiros; siguió así un tiempo corto pero que para mí eran ligeramente eternos por el placer; sin darme de cuenta con su mano derecha bajo a mi intimidad y empezó a meter los dedos algo rápido, para después sacarlos y jugar con mi clitoris con algo de velocidad... Sabía que quería algo rápido pero esto era algo rápido, sentía mucho placer, gemía cada vez más mientras no paraba de masturbarme; su mano izquierda no se había quedado quieta pues estaba jugando con mis pezones sin ninguna clemencia.

No podía soportarlo más, mi espalda se arqueaba un poco; sin más no pude evitar correrme ahí mismo con algunos gemidos de por medio.

- que buena chica - diría con su voz aún ronca para solo besarme la mejilla y empezando a bañarse tranquilo, era como si quisiera verme en una situación sumisa en sus manos, igual no iba a decir nada; mira respiración estaba entrecortada por eso.

Apenas nos bañamos juntos el fue a dejarme en mi casa y me espero a que me vistiera y le diera de comer a mi querido Wilson; luego fuimos directo a la universidad pues teníamos el tiempo justo; me dejó una cuadra antes y llegué a esta caminando; en mi rostro había una sonrisa, sin duda fue una buena mañana; Eli se acercó y me saludo; me pregunto dónde estaba, porque había pasado a mi casa para recoger un suéter que dejo la última vez; le dije que le contaría luego, a lo lejos pude notar a Tom, su mirada era de desprecio... Le devolví la mirada para disponerme a ir a clases.

¿¡la vida no es un cliché!? (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora