Capítulo 2: Los 3 molestos

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"Esto no es tan malo." Pensó Tanya mientras bebía de la leche.

Había pasado aproximadamente cerca de 1 mes desde que...

¿Nació? ¿Reencarnó? La verdad todavía estaba algo confundida.

Cuando el asalariado reencarnó en Tanya se lo había, de alguna manera esperado por lo que le dijo Ser X.

Pero está vez todo se había sentido muy... brusco.

Tan diferente a la última vez.

Empezando por qué no estaba sola.

Cuando el asalariado reencarnó era el solo.

Un humano que había hecho enojar a alguien que decía ser Dios y por ende termino reencarnando en un mundo distinto.

Pero está vez no era así.

Había alguien más.

El alma original de este cuerpo.

Si Tanya tuviera que describir su situación sería como la de un parásito.

Su alma se había introducido a la fuerza en un cuerpo que ya tenía un alma propia pero era tanta la diferencia entre estás 2 almas que Tanya había terminado alimentando al alma original.

Tal parece que el alma original no estaba preparada para el impacto de tener que compartir cuerpo.

Y el alma de Tanya era fuerte.

Tan fuerte que en un situación normal su alma habría expulsado al alma original.

Pero el alma original para sobrevivir se había... conectado a Tanya.

Cómo resultado el alma de Tanya podía quedarse dentro del cuerpo compartido pero alimentando al alma original.

La verdad es que no era tan malo.

Al fin Tanya obtuvo lo que quería.

Vivir en paz y sin preocupaciones.

No era que extrañará a alguien.

Al parecer cuando se conectaron por primera vez mucho de sus recuerdos terminaron en el alma original así que no había problema.

La niña termino su leche y después de atenderla la dejaron en la cuna.

Generalmente era Tanya quien controlaba el cuerpo pero en situaciones más infantiles como el cambio de pañales, el baño y otras similares dejaba que el alma original tomara el control.

Noelle era como la llamaban.

Noelle Silva.

Así era como se llamaba el alma original.

Noelle Silva y Tanya Degurechaff.

Tanya soltó un suspiro.

Había pasado 1 mes desde su tercer nacimiento y hasta ahora solo sabía 5 cosas de manera segura.

Lo primero era que su madre, o más bien la madre de Noelle, había muerto cuando ella nació.

Lo sabía por qué las sirvientas solían decir eso.

Lo segundo era que al parecer en este mundo también había magia... pero parecía ser diferente a la que conocía.

La tercera era que Noelle no era amada.

Tenía 1 mes pero nadie excepto las sirvientas habían venido a verla y ellas solo la atendían.

Y la cuarta es que la familia de Noelle era importante y poderosa.

Tanya no sé quejaba.

Estaba en un lugar cálido, le daban comida y la atendían cuando lo necesitaba.

No era una mala vida.

Cerró sus ojos y volvió con Noelle.

La quinta cosa que Tanya sabía era que el cuarto oscuro en dónde había conocido a Noelle era algo así como su mente compartida.

Un lugar en el que Noelle y ella podían interactuar como si fueran 2 personas separadas.

El cuarto era un lugar de su mente y la de Noelle así que si una de las 2 pensaba en algo aparecía inmediatamente.

Cómo con la cuna.

Tanya se acercó al lugar en dónde estaba le bebé.

Noelle se encontraba durmiendo, cerca de ella había algunos juguetes que Tanya había pensado para ella.

Tanya se sentó en una silla que había a lado de la cuna y empezó a leer un libro.

Al parecer los recuerdos de su segunda vida se habían quedado como si fueran fotografías así que podía recordar todo lo vivido.

Siempre y cuando pudiera recordarlo, la verdad es que no sabía que recuerdos suyos podía poseer Noelle.

Tanya recordaba muchos entrenamientos y deberes militares así que la mayoría de las cosas que imaginaba eran relacionado a eso.

Leyó el libro por algunos minutos hasta que sintió que alguien la miraba.

Ya que Noelle era quien controlaba el cuerpo tuvo que verlo todo desde afuera.

Tal vez eran 6 cosas de las que estaba segura.

Tanya empujó a Noelle con un poco de cuidado y termino controlando el cuerpo.

Ya que la niña había estado durmiendo al abrir los ojos la luz le molestó.

Pero le molestó más lo que vio.

Eran 2 niños y un chico ya mayor.

Tanya supo de inmediato quienes eran.

Las sirvientas hablaban de ellos, de los 3 hermanos mayores de Noelle.

Nozel, Nebra y Solid.

Tanya quiso soltar un suspiro.

¿Por qué habían venido a verla?

Había pasado casi 1 mes, pensaba que ya no vendrían a verla y estaba bien con eso.

—Mamá murió para tenerla.—dijo el menor de los 3, aunque sonaba entre triste y extrañado.

La única niña del trío la miro en silencio para después irse.

Aunque no sabía si aún estaba en la habitación o si había salido de esta.

—¿Cómo se llama?—le pregunto la chica.

Ah, entonces aún estaba en la habitación solo se había ido para que no pudiera verla.

—Noelle.—dijo el mayor de los 3.

"A lo mejor debería dejar que Noelle se encargue de ellos." Pensó Tanya mientras se preparaba para dejarle el cuerpo.

Hasta que la puerta se abrió.

¿Quién venía a molestarla ahora?

Escucho la voz de una sirvienta así que cerró los ojos.

Pero alguien enterró algo en una de sus mejillas.

Abrió sus ojos y se encontró con que el menor de los niños estaba enterrando su dedo en sus mejillas.

Realmente debería ser Noelle quien pase por eso ¡Ella no lo iba a recordar de grande, Tanya sí!

La sirvienta la cargo y empezó a decir algo sobre una preparación para una fiesta.

¿Preparación para que? Era una bebé no una especie de animal en peligro de extinción para que todos la vieran.

Los 3 molestos salieron del cuarto y Tanya cerró los ojos.

Que Noelle se encargue de todo, ella iba a descansar por el resto del día y a terminar su libro.

Sobrevivir (Black Clover-Youjo Senki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora