caminata. - Enzo Fernández y Julián Álvarez

I

⚠️AVISO⚠️
Lo que están a punto de leer es todo ficción, no estoy buscando arruinar el nombre de la mujer de Enzo Fernández, todos estamos seguros de que ella lo ama con todo su corazón y que lo apoyaría en todo.
Muchas gracias por su atención.<3

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19;45 p.m

- Me dí cuenta de que también me gustan los hombres y que tal vez las mujeres ya no. - comentó mirando hacia una dirección en aquella habitación para evitar la mirada de la chica que lo miraba atenta, estaba avergonzado por sus propias palabras y temía de la reacción de ella, aunque le llenaba de confianza saber que Valu era una persona comprensible ante cada situación.

- ¿Es una broma? porque si es una broma, déjame decirte Enzo que no me causa la mínima gracia.- wow... eso fué nuevo, pensó el pelinegro ante las palabras de su novia.

- ¿Por qué sería una broma? -preguntó.

Dejando el mate en la pequeña mesita de madera frente a ellos, la chica se levantó de su lugar en la cama y comenzó a colocarse su calzado. Enzo la miró sin entender lo que le pasaba, se notaba molesta y sus movimientos eran errantes ante su enojo.

- Tendría que haber escuchado a mis amigas...- Soltó de la nada en tono bajo pero audible para el pelinegro que sentía un nudo en su garganta.

- ¿Por qué dices eso?- Preguntó.

- Mira, Enzo, no sabes lo difícil que es para mí que me cuentes lo que te pasa. Ésto de jugar a ser el chico tímido que se dió cuenta de que es homosexual a mí no me va.- Respondió mirándolo a los ojos, esos ojos oscuros que siempre veía en las mañanas.

Hubo un silencio incómodo que Valu nuevamente rompió.

- Los chicos como tú me generan algo en el estómago... asco, ganas de vomitar todo. Lo lamento, Enzo, pero yo no puedo seguir con ésto.- Soltó sin más, sin importarle lo que sentiría el menor ante sus palabras o como chocarían en su corazón. Valu tomó sus cosas y se marchó de la casa del pelinegro dando un portazo, dejándolo al chico hundirse en sus pensamientos y dejarse hacer por el llanto que lo atacó ante sus duras palabras y la situación que lo comía vivo. Se tiró en la cama y abrazó la almohada en busca de calmarse o dejar de sentirse un bicho raro pero era imposible.

02:18 a.m

Se había quedado dormido, su cabeza dolía como si alguien la estuviera martillado y su cuerpo estaba todo húmedo debido a la transpiración al olvidarse de encender el ventilador. En un suspiro se levantó de su cama para dirigirse al baño donde solo hizo sus necesidades y se miró en el espejo, mojando su rostro con agua fría para retirar todo rastro de lágrimas y mucosidad.
No había nada que hacer, no podía dormir y eso lo estaba matando, así que sin algún tipo de remedio tomó su celular y buscó en internet "que hacer si no puedo dormir porque me siento muy triste"

Salir a caminar unas dos horas atrae el sueño y el cansancio.

Eso llamó su atención por lo que terminando de leer algunas reseñas buenas ante ello se tomó el tiempo de vestirse o mejor dicho colocarse un calzado, ya que ocupaba una remera negra y unos shorts de fútbol con el escudo de river en su pierna, y así poder retirarse de su casa sin ningún inconveniente.

02:40 a.m

Caminó y caminó hasta llegar a una plaza que gracias a dios y el universo estaba iluminada y con cámaras, caminó hasta ella y se sentó en una banca para así dirigir su mirada a los juegos para niños que decoraban la zona.
En su visión pasó una persona, no pudo ver su rostro ya que no le prestó atención pero la piel se le puso de gallina al darse cuenta de que al estar solo todo podría pasar y no, no es que no creyera en los fantasmas y cosas así, solo que él nunca hizo nada malo como para que eso le pasara.
Nuevamente pudo ver una figura por detrás de los juegos para niños, estaba nervioso así que se pasó la mano por su rostro y recién ahí pudo ver mejor, era un muchacho que había tomado asiento en una banca frente a él y frente a los juegos para niños. El chico no lo miraba, creía que tal vez no se percató de su presencia, así que él desvió la vista y suspiró, estaba cansado de todo, buscando distraerse.

Pasados unos minutos mirando a la nada porque sus pensamientos lo estaban consumiendo, una voz lo sacó de esa nube en la que flotaba mientras comía una hamburguesa, seee medio falopeado nuestro Enzo.

-Perdón por molestar pero.. ¿ésto es tuyo?- Dijo mostrándole unas llaves con un pequeño llavero de gatito, esas eran sus llaves.

-Oh sí, son mías..muchas gracias.- Respondió viéndolo, era el muchacho que antes había visto. Tomó en su mano las llaves y las mantuvo en su mano, sonrió levemente en forma de agradecimiento.

-Ten cuidado la próxima vez, estaban tiradas al lado del tacho de la basura al entrar en la plaza.- Comentó el castaño, sonriendo también al ver la sonrisa del pelinegro.- Estabas llorando... perdón, no quise interrumpirte y tampoco quiero ser chusma pero.. ¿está todo bien?-

¿Le preguntó si se encontraba bien? ¿Estaba preocupado por el?

...

¡Hola! aquí Sam, pasaba a dejarles el primer capítulo de mi primer historia, espero que le haya gustado y que si tienen alguna incomodidad o algo eviten dejar comentarios al respecto.
Tranquis, no es una historia triste, ya pronto vendrá el amor, el humor y tal vez lo que todos buscan en un EnzoxJulian aksjsjsj.

Bye.<3