Capítulo I

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- ¿Destino o casualidad? ❜

Dolor. Con una mano en su abdomen se dirigía a aquel instituto caro, sus labios se encontraban fruncidos, al igual que su ceño, odiaba su vida, lo único que le parecía bueno era entrar a aquel instituto, teniendo un buen estatus, muchos amigos y una vida envidiable, un incontable número de trofeos en diferentes deportes, una estatura de al rededor uno ochenta, y un rostro angelical digno de un mestizo entre una taiwanesa y un alemán.

¿Pero por qué detrás del telón su vida se volvía tan miserable? Lo tenía todo, dinero, reputación, trofeos.

Todo menos amor.

Un chico alto, delgado pero en forma, intimidante, se encontraba con los ojos hechos cristales, los labios apretados, un nudo se formaba en su garganta  impidiéndole soltar todo lo que quería decir, sus manos hechas puños hacían que parte de la misma se marcara blanca. En el momento en que ese auto negro se detuvo, se limpio las lágrimas de los ojos, tomando un respiro contuvo el aire que desde hace semanas sentía perder, para luego abrir la puerta y cerrarla de un tirón. Una hermosa sonrisa se dibujo en su rostro, está es la vida real.

Probablemente era tacañería suya, pero una de las razones por las que logro hacer tantos amigos era su curiosidad por las personas, así de sencillo, si alguien le parecía resaltante no dudaría en acercarse a hablar

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Probablemente era tacañería suya, pero una de las razones por las que logro hacer tantos amigos era su curiosidad por las personas, así de sencillo, si alguien le parecía resaltante no dudaría en acercarse a hablar.

En ese preciso momento se encontraba devorando su desayuno, hace semanas no le permitían comer así, incluyendo tantas comidas, y es que su entrenador es fan de las pastillas. Además de que sus padres preferían no perder el tiempo enseñándole acerca de la nutrición.

— ¡Kai! —

Inmediatamente reconoció esa voz.

— ¿Saldremos a la fiesta de Moon? —
El azabache se sentó a su lado, posando uno de sus brazos en los hombros ajenos.

— Matt... ¿No ves que estoy disfrutando mientras puedo de esta deliciosa comida? —

— Solo es carne. — Contesto con simpleza.

— Yo no pienso como tu ex. —

Un golpe bajo aterrizó en Matthew, quien solo se limito a maldecir al chico de cabellos ondulados.

Como de costumbre, luego de llenar el pasillo de risas y llevarse el centro de atención se dirigía a tomar su clase de matemáticas, la cual detestaba; sus notas eran horribles en absolutamente todas las materias. En medio de sus bromas, un golpe de realidad le atrapó, de casualidad volteo la mirada hacia el destino,  por un par de segundos el tiempo corrió lento, o al menos así en su memoria, sus ojos se fijaron en un chico que se encontraba sentado, de forma tranquila, debajo de un árbol, con el sol perfectamente reflejado en su rostro, haciéndole mucho más simpático de lo que ya se le hacía, con unos lentes algo pasado de moda pero aún así le lucía bien el plateado. Nunca antes lo había observado, pero su amigo lo noto.

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⏰ Última actualización: Jan 30, 2023 ⏰

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