my little secret ...

Primer dia de clases con sabor amargo

Primer día de clases con sabor amargo

Solo era Max,  nadie importante o de quien preocuparme.

-Hey tenemos que hablar. - dijo serio.

- Amm esta bien - le digo algo confundida. Pues Max nunca habla en serio y eso significa que hay problemas.

- Vamos a un lugar mas privado.- me dijo mientras me agarraba del brazo y me llevaba a un salón vacío.

-Que pasa? Por que tanto misterio y brusquedad?. - le pregunte cansada.

- Como que que pasa? Sabes perfectamente lo que sucede!-

- Oh ya entiendo. Lía ya te lo dijo no?  - dije con la vos mas inocente que pude hacer.

- Pues claro que me lo dijo! Em debes entender que esto no es un juego. NO puedes hacer eso nunca mas me entendiste?- me reprendió como una niñita.

- SI. okey prometo no volver a hacerlo, es solo que no lo puedo controlar. Y sabes como es.- le dije molesta. -Eso era todo? Por que si me disculpas tengo un casillero y una clase que buscar. - le digo.

- No! También tenia que decirte que luego de que terminen las clases iremos a entrenar y volveremos justo para la cena.- me dijo. - Ahora si, es todo. Y por cierto suerte con tu búsqueda.- grito mientras se iba.

***

Al final había podido encontrar mi casillero al igual que mi clase.  Cuando llegue al salón me ubique en unos de los asientos del fondo y me puse mis auriculares, pues faltaba para que llegara el profesor ya que todavía era algo temprano, es mas no había nadie aparte de un chico que estaba dormido y yo.

Estaba escuchando tranquilamente sing de ed sheeran (si lo se,  podía haber vivido toda mi vida en un granero pero estaba al tanto de lo que pasaba en el mundo) cuando alguien tiro mis cosas al suelo.

-Ese es mi asiento estúpida.- dijo alguien adelante mio.

- Me dices a mi?- dije algo confundida.- Que yo sepa la silla no tiene nombre.- le respondí con una mirada desafiante.

-Disculpa? sabes quien soy.- dice la chica de la voz chillona.

-No, tu sabes quien soy yo?.- le respondo.

-no...- soltó perdida.- Debería?.- Esta chica si que no sabe defenderse, apuesto todo lo que quieran a que es puro bla bla bla.

-Mira.- le dije sin rodeos.- No estoy para jugueteos tontos con niñitas que lo único que tienen en la cabeza en ropa y maquillaje.- levante un poco la voz sin paciencia.

-Como te atreves a hablarme así, tu no eres nadie!- grita furiosa.

- No.- le espete.- en eso te equivocas.- me acerque a ella a tal punto de quedar frente a frente. Me incline hacia su oído.- Seré te peor pesadilla.- le susurre y me fui mientras todos miraban la escena atentamente.

Me sentía bien y mal al mismo tiempo, es decir, yo no era así pero era algo que no podía evitar, mi poder se apoderaba de mi y no había vuelta atrás, tenia vida propia. Ni siquiera me había dado cuenta de que salí de clase antes de que comenzara, genial mi primera clase y ya la salte.

Decidí no ir mas a clases, por el simple hecho de no tener ganas de cruzarme de nuevo con esa rubia oxigenada y que todos anden susurrando cosas sobre mi y mi familia. Hoy fue un dia con sabor amargo.

Me dirigí hacia el pequeño bosque que estaba dentro del área del instituto. Era bastante lindo, tenia una belleza rara y única por eso lo hacia especial pero no era para cualquiera, estoy mas que segura que cualquiera que lo viera diría que es espantoso pero para mi es hermoso. Sin duda este seria mi nuevo escondite.