El estridente sonido del golpe contra una mesa lo hizo saltar, tenia la cabeza pegada contra la mesa y su mejilla con rastros de baba, cuando alzó la cabeza su mirada se encontró con un rostro enojado.
Se había quedado dormido en clase.
"No son horas de dormir, joven Soarinng", reprocho el profesor, no dijo más y regresó a la clase no sin antes lanzarle una mirada para asegurarse de que estuviera despierto, podía escuchar las leves risas de unos pocos compañeros.
Un quejido salio de sus labios, estaba cansado y la clase no hacia nada más que aburrirle, descanso su barbilla en la palma de su mano mirando a sus compañeros de clase, se pregunto, ¿Cómo podían estar tan concentrados?, ellos si se esforzaban, en cambió él, no podía estar un día sin dormirse en medio de la clase.
Aun se preguntaba, ¿Cómo llego a la universidad?, siendo tan perezoso para hacer tareas, bueno, puede admitir que un poco de esfuerzo si hacia.
Soltó un largo suspiro cuando la campana sonó, era la ultima clase y ya podía irse a su casa. Se levantó de su asiento colocándose la mochila y salió del lugar, no quería estar más tiempo ahí, solo quería llegar a casa y dormir, lo de siempre, levantarse, prepararse para la universidad, estudiar, hacer las tareas que pueda y dormir.
¡Su vida era aburrida!, ¡Necesitaba aventuras!, y no tenia amigos con los que pasar el rato y sus padres estaban fuera de la ciudad trabajando, ellos le mandaban dinero para vivir y pagar la universidad.
Cuando abrió la puerta de su casa no se encontró con nada más que oscuridad y el silenció como bienvenida, podía escuchar tan claramente el suave golpeteo de sus pasos contra el liso piso de mármol.
Caminó a su habitación, entrando tiro su mochila entre libros sin leer que eran aburridos al parecer, tomó un peluche entre sus manos, un Pikachu, su madre se lo regalo como despedida al irse lejos, con una sonrisa se acostó en la cama quedando rápidamente dormido.
...
Despertó tan solo dos horas después de dormir pero no se sentía cansado en absoluto.
No sabia que lo había atraído a la cocina, ¿Era el suave llamar que escuchaba en el rincón mas profundo de su mente?, o era el suave tintineo lleno de brillo que parecían rayos que no hacían más que dejarlo cautivado.
'¿Qué importa?'
Pensó, tomando entre sus manos una esfera tan pequeña como una canica, era de un blanco brillante con chispas eléctricas brotando.
Sus ojos entrecerrados estaban mirando fijamente a la esfera, un pensamiento llego a su mente y tomando el impulso la llevo a su boca, su textura era como un chicle.
Aquello lo había hecho inconscientemente, como si alguien lo hubiera obligado a hacerlo.
'¡¿Por que hice eso?!'
Abrió los ojos conmocionado y una mueca apareció en su rostro, el sabor era asqueroso, se acerco rápido al basurero tratando de escupir aquella esfera, encontrándose con que había desaparecido, como si se hubiera desecho en su boca.
"¡Soy estúpido...!, no debí comer eso, seguro era veneno", reprocho Soarinng tirando constantemente de sus mechones de pelo, "¡No importa!, puedo aceptarlo, ¡Llevame diosito!", grito alzando sus brazos y llevando su mirada al techo, un poco, demasiado, dramático. Después de esto ahora Soarinng podía entender por que le decían que era raro y por que nadie se acercaba a él.
Bajo los brazos y relajo su postura, miro alrededor, no estaban las luces encendidas pero creyo poder ver una figura casi como un perro en la entrada, y de un momento a otro sintió que las paredes de la cocina parecían acercarse cada vez más hacia él.
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Solo es Soarinng
PovídkySoarinng con poderes eléctricos. Un joven castaño con sudadera de Pikachu, un joven con una vida prácticamente aburrida y sin sentido pero la emoción llegara cuando obtenga de una manera extraña poderes mágicos. ¿¡Y un Pikachu!? ...