Quemadura ; Cuti - Son

Único

Cristian Romero había llegado hace apenas unos meses al Tottenham, el club inglés lo había obtenido por un préstamo y pensaban en comprarlo, no importaba el precio querían a ese defensor. Cuti se desenvolvía muy bien con el equipo, se llevaba muy bien con sus compañeros. Pero habia uno en particular que siempre captaba su atención, Son Heungmin, el coreano, a pesar de ser mayor que él por 6 años le parecía muy tierno, Sonny era una persona muy buena y dulce, algunas veces tenía acciones de niño que a Cristián le derretían el corazón, queria cuidarlo por siempre.

Corrían las 4 de la tarde cuando el entrenamiento terminó y gran parte del equipo decidió ir a merendar algo, Cristian iba con su termo bajo el brazo tomando algunos mates junto a Bentancur, se sentaron en una de las mesitas de allí a jugar un buen partido de truco, a veces extrañaba a sus compañeros de selección, pero tener otro sudamericano junto a él lo alegraba un poco.
De repente sintió un peso en su hombro y un dulce aroma llenar sus fosas nasales, de reojo pudo observar que se trataba de Heungmin y frunció su ceño.
-"Sonny, cambiaste tu shampoo?"- Preguntó en su roto inglés, provocando risas en Rodrigo.
-"Si... ¿no te gusta?"- Retrucó el coreano con un puchero. Provocando que al ver esta acción, Cristián se desesperara negando.
-"NO!... no, es que me acostumbré al otro pero también me gusta"-
La situación era algo rara para Rodrigo, no entendía como es que el defensor conocía que shampoo usaba el delantero, pero claro, no contaba con que Cristian amaba abrazar a Son, su sonny, y disfrutaba de llenar sus pulmones con el olor del mayor. Bentancur al ver que la partida terminaba allí decidió irse dejando a la "parejita", como le gustaba decirles, solos.

Cristián tardó en darse cuenta de la partida del uruguayo pero se encogió de hombros, nada mejor que la compañía de su tierno Sonny, que como cada vez que se aburría, le empezó a hacer preguntas raras. Primero que animal sería, luego que superpoder le gustaría tener, Cristian respondia cada una de las preguntas con seriedad, hasta que una lo sorprendió.
-"¿Te imaginas que te paguen por ser lindo?"-
Y sin poder contener su boca, el defensor soltó de manera inconsciente mirando al mayor al rostro.
-"Vos serías multimillonario"-
La respuesta provocó sonrojos en las mejillas del coreano y también del cordobés, que intentando cambiar de tema cebó un mate y se lo pasó al delantero.
-"Toma, proba, nunca probaste uno"-
Heungmin aceptó gustoso aún con sus mejillas rojas, y sorbió de la bombilla, sin saber que el mate se toma con agua caliente, por lo que rápidamente sintió un ardor en su boca y alejó la bombilla de sus labios soltando un quejido.
-"Boludo... con cuidado, está caliente"- Regañó Cristian con preocupación en su voz.
-"A ver, mirame"- Le ordenó y sin esperar reacción del coreano lo tomó de la barbilla, haciendo que girara su rostro y con cuidado observó los labios del mayor, acercándose cada vez más a estos.
Al ver que el coreano no se oponia, unió sus labios a los ajenos en un suave y cuidadoso beso, cargado de cariño y admiración. Pronto la falta de aire se hizo presente y Cristián se alejó sonriendo bobamente.
-"Cristian, dame otro mate, me quiero quemar otra vez"- Bromeó el coreano dejando un dulce piquito en los labios del menor.

El beso no habia pasado desapercibido por Rodrigo Bentancur, que los espiaba desde la puerta... luego se aseguraría que Cristián le contara todo.