𝕭𝖊𝖑𝖑𝖊𝖟𝖆 𝕴𝖓𝖙𝖊𝖗𝖓𝖆.

Rosas ¿Rojas o Negras?

Era de noche, Uzui llegaba de terminar una misión.

La noche se escuchaba solitaria con el viento que rozaba sus cabellos y la luna que contemplaba el sendero, silencio.

El peli-blanco escuchaba las pisadas de esa persona que tanto quería, decidió parar su caminar y dar cara a ese demonio.

- Hasta cuando me seguirás? - levantó la mirada porque esté no se encontraba en el camino si no en los árboles.

- Hasta que te des cuenta - se pudo escuchar la risa del peli-blanco.

- Está bien, ahora baja.

- No.

- Yo te bajo si quieres - no le quedó otra que bajar.

Empezaron a caminar por un buen tiempo hasta que llegaron a un campo lleno de rosas blancas.
A lo lejos hacía la derecha se podía ver una rosa negra en medio de las blancas, Uzui fué corriendo hacía ella.
Gyutaro quedó con la mirada a la deriva,la giró un poco y vió una rosa roja, llamativa ardiente...es él..- pensó.
De un salto en alto llegó a ella, la cortó y volvió con Uzui. Esté último le extendió la flor que traía en manos;

- Una flor....¿Negra? - pregunto el más bajo.

- El negro es igual a ti, maldad, fuerza, miedo, poder; pero también tiene su lado positivo, es cauteloso, hermoso.

- Hermoso..?

- Porque no me mataste cuando tenías la oportunidad? - Uzui le colocó la flor detrás de la oreja haciendo que Gyutaro se sonrojara a lo máximo.

- .... - no quiso contestar - Eso piensas?

- Y mucho más - Gyutaro estuvo guardando la rosa roja, pero en vez de dársela prefirió hacer la misma acción del peli-blanco.

- El rojo es tu color, es llamativo, atractivo, extravagante, ardiente... - dijo tocando desde la parte pectoral hasta llegar a la parte baja de Uzui después de 5 seg mirando cierto lugar tomó conciencia de lo que estaba haciendo e inmediatamente quitó la mano.

- Ehh!!...Va-vamonos.

El silencio rondaba entre los dos desde que salieron de aquel campo, pero no era incómodo pero tampoco agradable más bien era Tranquilo.

- Porque no me mataste cuando tenías la oportunidad? O cuando me quedé dormido.

- Mmm..nose, cualquiera lo hubiese hecho.

- Las otras lunas lo harían?

- ..Douma se sentiría amenazado con tu belleza y Akaza te criticaría mi hermana también,..no no lo harían.

- Y tu porque lo hiciste?

- No se, no quise dejarte ahí solo.

- Que amable de tu parte, gracias por cierto.

- Naa, está bien.

Llegaron a un río, decidieron sentarse bajo un árbol, la luna se contempla en el alto del cielo, Hace cuánto no hacía algo así..? - pensó Gyutaro, disfrutar de un momento con alguien que no sea su hermana o las otras lunas? Hace décadas, nunca le cayeron bien
los humanos pero Uzui era diferente bueno lo de egoísta, egocéntrico, orgulloso todo lo tienen, había algo en él que le encantaba pero no sabe que es o como describirlo.

A Gyutaro le dió curiosidad saber sobre cómo era Uzui.

- Uzui.., tienes hermanos? - se quitó la flor de la oreja para admirarla un poco.

- Parece que alguien está interesado en conocerme eh? - suspiró - Tuve.., pero murieron hace mucho, fuimos nueve hermanos, pero siete murieron cuando tenía 15 años..- le dió un poco de melancolía contar sobre su pasado -

- Oh... perdón por preguntar...yo solo...

- Tranquilo, paso hace años.

- Mmm...

- Pregunta lo que quieras, con confianza.

- Porque te hiciste cazador de demonios?

- No lo sé, tú porque te convertiste en demonio?

- Nosotros estuvimos en situación de calle.

- Situación de calle?

- Cuando éramos pequeños, mis padres nunca nos quisieron, éramos demasiado pobres que no teníamos para comer ni nada, la gente nos despreciaba, un día me descuide de mi hermana, y la quemaron viva - se volvió a colocar la flor, suspiró y continúo - de milagro sobrevivió, un día Douma nos encontró y nos acogió, vivimos con él un tiempo hasta que nos llevó con el señor Muzan, quien nos convirtió en demonios, Daki trató de seducir al Señor Muzan pero no le salió el juego - rió a lo último recordando los intentos fallidos de enamorar de Daki -

- Dios, pasaste por mucho.

- Si pero con los años se olvida.

Gyutaro apoyó la cabeza en el hombro de Uzui, claramente a éste no le importó solo hizo la misma acción del otro, pareciendo una pareja de enamorados melosa.

El sueño se apoderó de ambos, poco a poco fueron cerrando los ojos cayendo en los brazos de Morfeo, inconscientemente se acomodaron el uno con el otro.

Pasaron las horas y el sol empezaba a salir..
Gyutaro sintió un dolor horrible en el tobillo,
- AH! - gritó haciendo despertar a Uzui,
- Mierda, el sol.. - rápidamente corrió el pie acercándolo a la sombra.
Uzui inmediato se dió cuenta, por suerte estaban bajo de un árbol pero pronto el sol llegará a tapar toda la sombra, lo más recomendable era que lo llevará a su casa en el distrito.

- Te llevaré a casa.

- Que? Cómo creés que esquivaremos el sol?

- Prefieres quedarte aquí y morir?

A duras Gyutaro aceptó, Uzui alegre de que aceptará lo levantó en sus brazos y lo cargó estilo princesa, Gyutaro algo tímido se agarró del cuello y pecho del peli-blanco, emprendieron caminó devuelta al distrito.

Fueron por las ramas de los árboles para así poder esquivar mejor el sol, salto en salto llegaron a la entrada del distrito, decidieron ir por los techos de las casas para ser más rápido, no había tanta gente como comúnmente suele haber aunque era de día, está gente duerme de día y sale de noche como los vampiros, claro quitándole la parte de la prostitución.

Llegaron a la residencia de la Oiran conocida como Warabihime (Daki), antes de continuar Gyutaro paró a Uzui.

- Por atrás, no quiero que me vea mi hermana.

Uzui obedeció a su petición, le dió la vuelta a la casa y de un salto terminó justo en la ventana de la habitación de Gyutaro se posicionó dándole la espalda al sol, con cuidado bajó a Gyutaro haciendo que entrará.

- Gracias.. - duda y duda, decidió darle una despedida comprometedora, se acercó a esté hasta sentir sus respiraciones chocar y unió sus labios en un dulce beso, claramente no duró tanto porque tenía miedo de que su hermana aparezca - Ya vete! Fuera!..