(Prólogo)

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Elizabeth es una niña normal como todas las demás, pero ella se sentía inferior a todos, solamente que ocultaba eso para no ser consolada, ya que ella no le gusta eso, Elizabeth es una chica rubia, con ojos color miel, es una chica "Linda" O eso es lo que todos le dicen, ella No se cree así, ella siempre quería tener muchos amigos desde pequeña, pero a ella nadie la quería, pero ella no entendía porque? Porque le hacían eso? Porque siempre la trataban como si fuera una chica extraña? Su mamá la consolaba las noches mientras que peinaba su cabello laaaaacio.. Le decía, que esta bien ser extraño, y eso te hace destacar, pero ella se sentía mal. Al ser extraña, no tenía nada extraño en su rostro, ni mucho menos en su cabello, tampoco en su cuerpo, era normal, era linda, todo lo que necesitaba una niña de 9 años, pero a ella le costaba entender en su pequeña cabeza porque todos eran así con ella, no entendía porque todos le daban el mismo trato, Miller, su profesora de cuarto grado, siempre notaba que sus demás alumnos eran malos con la chica, pero ella no decía nada, solo que la consentía más que a cualquier otro alumno, era comprensiva, era buena con ella, pero era otro motivo de burlas para la chica, luego de cada LARGO, día de Escuela sus rutinas se repetían, despertarse (opcional) irse a la escuela, observar todo, anotar, decirle las malas acciones y palabras que hacían tus compañeros a la Directora, y luego el recreo, lo que más era triste, nadie te hacía caso, si no eran burlas, eran golpizas, o emvistez. Una rutina fácil, pero cansadora, y que eso se repita todos los días era prácticamente cansador, pero esa rutina por fin se iba a acabar, los padres de Elizabeth se tenían que mudar de ciudad, debido a su trabajo, y eso implicaba mudarse de casa, por lo tanto de colegio.

Todos los dias de vacaciones se iba al columpio debajo que estaba debajo de un árbol en frente de su casa nueva, era algo aburrido pero tomaba ese tiempo para imaginar, como se comportaría en su nuevo colegio, empezar desde cero, era maravilloso, tener amigos! Tener profesores nuevos, lo que más ansiedad le daba, era que si la iban a querer por como era, su personalidad solía ser un tanto pesada cuando se trataba de conocer nuevas personas, tenía miedo a ser odiada por sus nuevos compañeros, o ser criticada por sus peinados, o simplemente por su forma de ser. Cuando comenzaron las clases, Elizabeth tenía bastante ansiedad al como verse, así que solo llevo bastantes cosas para entretenerse si es que nadie le hacía cosa, era lo que hacía en su otro colegio cuando nadie la molestaba, llevaba un pequeño libro para leer, y su porta cassete para escuchar un poco de música. Pero no fue así, ya que había una niña, que se llamaba Isabella, chica de cabello enrulado, blanca como la nieve, pestañas largas y labios pequeños y bonitos. Tenia una campera de color verde conjunto a la del colegio, ella fue la primera en notar su presencia y hablarle; ella estaba muy emocionada al ver que le había hablado aunque sea un poco! ¡estaba tan emocionada de ser amigas!

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