Marriage

732 51 44
                                    

No recordaba la última vez que estuvo tan nervioso como ahora. Excepto esa vez donde por accidente le dijo algo hiriente a Rimbaud y las cosas dieron giros drásticos entre ellos, ¡Pero en su defensa!... era un estúpido adolescente enamorado que siguió los consejos aún más estúpidos de simples niños que apenas tenían once años.

- Quiero que estemos más juntos, me gustaría que podamos conocernos más como pareja, quiero dar otro paso en nuestra relación, si es que sabes a lo que me refiero.- se sincero el rubio.-

- ¿Más juntos?.... ¿acaso tú?...- El azabache quedó en silencio mientras le miraba sorprendido.-

¿Qué se supone que seguía? Es decir, sabía lo que seguía, pero por alguna u otra razón las palabras no le salían, solo acabo por quedarse callado. Pero por alguna razón, la creciente sonrisa de Arthur le hizo sentirse más seguro de lo que diría.

-¡Por supuesto que quiero!.- enredo sus delgados brazos al rededor del cuello del rubio.- no sabes cuanto tiempo espere por esto.-

Los ojos del rubio se abrieron de sorpresa ante las palabras de su pareja.

- ¿Entonces tú... estuviste esperando mucho tiempo por esto?.- era deprimente saber que su pareja espero tanto por esto.-

- ¡Por supuesto! Ya hemos dado demasiados pasos, primero comenzamos lento y de la nada ya vivíamos juntos, pero supongo que nos saltamos algunas cosas... es por eso que estoy emocionado de poder ir y cenar con tu familia, lo veo importante ya que es un paso que nos saltamos pero que por fin podremos hacer para conocernos más como pareja.-

La expresión de Verlaine no tenía ningún nombre existente para describir cómo era. Ciertamente a veces se preguntaba quién en la relación era más torpe; él o Arthur.

『. . . 』

- Déjame ver si entendí, ¿tenemos que organizar una cena con Arthur solo por qué pensó que a eso se refería cuando dijiste que debían dar otro paso en la relación?.- el rubio asintió.-

No paso mucho tiempo antes de que la habitación fuera invadida por sonoras carcajadas tanto de Chuuya como de Osamu. Carcajadas que solo lo hacían sentir de mal humor.

- ¡Oh dios! ¡Tú pareja sí que es un idiota!.- exclamó con una cantarina y molesta voz (según las propias palabras de Verlaine).-

- Sabes lo mucho que me agrada Arthur, pero, ¿en serio pensó que un paso grande era venir a cenar con nosotros?.- preguntó mientras levantaba una de sus cejas.-

- Para él cosas tan sencillas como lo pueden ser cenar son cosas bastante agigantadas a su paso.- ahí una razón del porque le gustaba, y es que él valoraba así sean los momentos más mínimos entre ambos.-

- ¿Y si te ayudamos? Porque también me parece estúpido de tu parte no haberle propuesto matrimonio justo en ese momento.-

- Se veía muy alegre pensando que me refería a una cena familiar.-

- Él es tan tierno... Bien, esta decidido, Dazai y yo te ayudaremos a que le propongas matrimonio.- no era una sugerencia por parte del pelirrojo, era una orden.-

- No creo que sea prudente, la última vez que me ayudaron salio muy mal.- viró los ojos mientras se cruzaba de brazos.-

- ¡Teníamos once años! Por supuesto que no iba a salir bien que confiaras en los estúpidos consejos de niños de once años que ni siquiera saben del amor.- se defendió el castaño.-

Two Birds with One Stone | Rimlaine Donde viven las historias. Descúbrelo ahora