Little Fantasy || dekubowl

04: Acuérdate de cerrar la puerta

Shinsō llevo a Midoriya a la residencia de la clase 1-A. Se despidieron con un pequeño y tierno beso en los labios, pero no se dieron cuenta que eran observados por una persona.

—Adiós, Izu.

—¡Adiós, Shin!—Cerró la puerta y se dirigió a la cocina, hasta que sintió unos pasos y dio media vuelta para ver de quien era.

—Midoriya.—

—¡A..aizawa-sensei!—Se sorprendió al verlo allí, es cierto que no era tan tarde, pero tampoco tan temprano.—Yo l..lo siento por llegar a esta hora..—Se disculpó, sabía que el horario establecido es que después de las ocho no se puede salir, y ya eran las nueve. Sí, se quedó otra hora más con Shinsō y aprovecho a conocer a los amigos de este. Vió como Shōta se acercó a él y le acarició el cabello, este se sorprendió ante ese acto del mayor.

—Bueno, pero que no vuelva a ocurrir, ¿Bien?—Dio media vuelta y se marchó de la residencia, al parecer estaba esperando a que él llegue.

—¡S..sí!—Se despidió de Shōta con un gesto de mano y este lo correspondió.—Vaya, eso sí que fue extraño..—Murmuró, y luego siguió con su camino hacia la cocina. Agarró una botella de agua, unas galletas de chocolate y fue para su habitación. Aunque no se podía llenar, ya que a las diez era la hora de la cena, le sorprendía que no estaban sus compañeros cocinando.

Midoriya entro a su habitación, dejó la botella y las galletas en su escritorio. Se dirigió al armario, agarró una remera grande y unos pañales junto a un chupete. Prendió su laptop y colocó unos dibujitos animados, mientras pasaba el agua de la botella a un biberón y colocaba las galletitas en un plato de conejitos.

—Ah..~—Suspiro y se lanzó a la cama de forma dramática, para luego colocarse un pañal, claramente antes hizo todo el proceso; crema, etc, etc..—Bien, ¡Ahora a ver a la doctora juguetes!—Le gustaba muchísimo esa caricatura, recostó su cabeza entre sus manos y puso "play" al episodio.

Estaba todo bien, pero Midoriya se había olvidado de algo, cerrar la puerta con el seguro. Aunque no había de que preocuparse, nadie entraría a la habitación de este, ¿No?..

°°°

El peliverde ya había visto, aproximadamente, seis episodios de la caricatura y ya estaba agotado. Además, tenía que cambiarse.
Midoriya se levantó de su cama y fue a buscar a la cajonera lo que anteriormente había usado para colocarse el pañal, todo iba bien hasta que abren la puerta y ahí es donde esté se da cuenta que nunca le puso seguro.

—Midori..—Quedo asombrado por lo que veía. Aquel chico lindo que le encantaba, estaba con un pañal orinado, una remera extra ancha que le llegaba a la cadera y un chupete en su boca. Midoriya quedó perplejo, estaba aterrado, su compañero lo estaba viendo en su peor estado; con un pañal orinado y chupete. ¿Qué pensará de él? ¿Qué es un maldito asco, que está enfermo? Estaba estático, las palabras no salían de su boca.

—Y..yo, K..kirishima-kun..—Lagrimas empezaron a brotar de los ojos del menor, el contrario al ver esto entro a la habitación y cerró la puerta, está vez con seguro.

—Hey, tranquilo..—Se acercó a este y lo abrazó, no le gustaba ver a la gente llorar y mucho menos a aquel chico, el chico que amaba.—No llores, porfavor, Midoriya.—El menor dejo de llorar, pero pequeños hipidos salían de este.

—L..lo siento.—El pelirrojo estaba desconcertado, ¿Por qué lo sentía? ¿Por su aspecto?

—No pidas lo siento, no has hecho nada malo.—Acarició una de las mejillas de Midoriya, limpiando las lágrimas que habían caído anteriormente por los ojos de este. El peliverde ante ese acto se ruborizo levemente, le parecía tan bonito el acto del mayor, pero no se olvidó de su aspecto.

—Estoy con u..un—No podía decirlo, la palabra no salía de su boca.

—No te preocupes. Si te hace sentir bien, hare como que no he visto nada, ¿Quieres?—Midoriya dudó, pero asintió. Eijiro le dedicó una cálida sonrisa y pellizco levemente la mejilla ajena.—La cena ya esta lista, nos vemos abajo.—Se despidió del más bajo y salió de la habitación.

La cabeza de Midoriya era un lío, por un lado estaba agradecido de que Eijiro no lo haya mirado con desagrado o desprecio, en cambio lo miro con ¿Ternura y comprensión? —No, es imposible, pero quizás si..—Se dio cuenta de lo que estaba pensando y negó rápidamente con su cabeza, para sacar aquellos pensamientos absurdos de su mente.—Ah..~—Suspiró—Mejor me cambio y bajo a cenar..—

—¡POR FIN PUEDO SUBIR ESTE CAP!
Heyy.
¿Les gustó?
Izu la próxima vez cierra la puerta
con seguro, si no quieres que
más personas descubran tu,
ya no tan, secreto.
Mehehehe.
Kiri siendo respetuoso
ante el secreto de Izu,
me da mil años de vida.
Kirideku = amor pacífico.
Adiós.

att: Yoko.