Solo Tu... //Pokefilia

Capitulo 1

Hoy me desperté sin ganas de hacer nada, Bueno... siempre me despierto sin ganas de nada

Me levanté con toda la pereza del mundo y fui al baño para cepillarme los dientes, luego bajé las escaleras y fui a la cocina para desayunar lo primero que encuentre en el refri... Aunque la verdad ni hambre tengo. Nah, al carajo el desayuno, mejor me alisto para salir a tiempo hoy.

Subí al piso de arriba y miré en mi armario lo que me pondría. La verdad no tengo mucho para elegir, casi toda mi ropa está en el cesto de ropa sucia.

Improvise un poco, me vestí con un pantalón deportivo y una remera roja con rayas negras. Me mire en el espejo que tengo en el cuarto y la verdad... Me veo horrible, mi remera está llena de arrugas, mi cabello parece el de un drogadicto y tengo unas ojeras enormes. Pero me da lo mismo como me veo y además no quiero llegar tarde con el doctor.

Baje las escaleras y salí de casa para ir a la parada de bus. Cuando llegué tuve la suerte de que el bus acababa de llegar. Me subí y pagué mi boleto. No puedo ignorar el hecho de que todas las personas y pokemon que están aquí no paran de observarme de manera extraña, siento como si me criticaran con la mirada. Pero me da igual, yo me senté y los ignoré.

Luego de unas cuantas paradas por fin llegue a la mia, llego un punto en el que estaba por entrar en desesperación, la gente ni siquiera disimulaba la mirada, se me quedaban viendo fijo como si fuera un bicho raro. Pero bueno, luego me quejo, ahora me queda caminar unas cuadras hasta llegar al edificio.

Cuando camino me siento calmado, nada me detiene, nada me molesta, las aves volando, todo es tranquilo. Bueno... Aquí termino mi tranquilidad, ya veo el edificio a unas cuadras, con su gran cartel que dice "Hospital Psiquiátrico". Me parece algo tétrico ese cartel.

Cuando llegué al lugar, entre y la recepcionista me vio con una sonrisa - Hola Yona, como has estado? - Me dijo sin parar de sonreír.

- Bien, supongo - Le dije desinteresado mientras me iba directo al ascensor. No tengo ganas de hablar, así que no le seguiré la charla.

Ya en el ascensor subí hasta el tercer piso y fui a uno de los muchos consultorios que hay. Entre y ahí estaba el Dr. Ziro, la única persona con la que yo creo que vale la pena sentarse y charlar.

- Hola Yonatan, bienvenido... Toma asiento - A pesar de su alta edad él parece tener energía siempre.

- Buenos días Dr. Ziro - Le dije sonriendo con pereza.

- Yonatan. Ya te dije mil veces que solo me llames Ziro - Me regaño de una manera algo chistosa.

- Y yo le dije mil veces que solo me llame Yona - Le dije imitandoló

- Bien, te dejaré pasar esto solo por hoy. Ahora poniéndonos serios ¿cómo has estado Yonatan? -

- Como siempre, supongo... No eh cambiado nada en mi rutina y tampoco es que haya pasado algo interesante -

- Que aburrida vida - Dijo rodando los ojos - Yo siempre salgo los fines de semana con amigos a hacer lo que sea, que mi apariencia no te engañe, puedo estar viejo pero no significa que no pueda salir a festejar o a tomar un trago -

- Yo nunca haría eso. Razón 1: no me gusta estar entre mucha gente. Razón 2 y la principal: ¿con quién salgo a "festejar o a tomar un trago"? -

- Estaba esperando que me preguntaras algo como eso - Me dijo entrelazando los dedos de las manos - Verás, hace poco crearon un programa para gente aburrida y solitaria como tú - Me esta empezando a irritar que me diga aburrido y solitario todo el tiempo.

- ¿Y de que trata el programa? -

- Pokemon de compañía - Dijo con entusiasmo.

- no entiendo -

- Te daremos un pokemon para que te haga compañía. Si el pokemon no te agrada o no te sientes cómodo con él... Lo puedes devolver -

- No me interesa - Dije neutral.

- ¿Que? -

- Estoy bien solo y no creo que tener un pokemon haga una diferencia -

- ¿Estás seguro? ni siquiera vas a darle una oportunidad al programa -

- Sip, estoy cien porciento seguro -

- Bien... Nuestra sesión de hoy terminó. Ven mañana a la misma hora ¿ok? -

- ok, nos vemos Dr. Ziro -

- Nos vemos Yonatan -

Luego de despedirnos salí del edificio y planeaba ir caminando a casa pero a medio camino me encontré con el parque y cambie mi rumbo para ver que me podía encontrar ahí.

Cuando entre me senté en una de las bancas que hay y me puse a ver que había. Lo que más había eran familias. Los padres preparando un almuerzo para un picnic y los niños jugando con sus pokemons.

Ver todo eso me hizo recordar los buenos momentos que pase con mis padres, recuerdo como los fines de semana salíamos a pescar magikarps o también recuerdo que acompañaba a mi madre al mercado y ella siempre compraba algo para mí. Pensar en ellos me hizo recordar algo más... Recordar que ellos ya no están... Y que nunca volverán a estar.

Sin darme cuenta empeze a llorar en silencio, algunas personas y pokemons me vieron pero no hicieron nada, solo me miraron raro. Luego me di cuenta de que casi todos ahí me miraban raro. Sin decir nada me fui de ahí a paso rápido.

Cuando apenas llegué a casa me fui directo a mi cama, me acosté y lloré por extrañar a mis padres, lloré hasta que me quedé dormido.

---AL DIA SIGUIENTE---

Me encontraba yendo al hospital para ver al Dr. Ziro. Cuando entre la recepcionista me saludo pero esta vez ni siquiera le respondí, solo fui apresurado al ascensor. Luego busque el consultorio del Dr. Ziro y entre.

- Hola Yonat. - Dijo Ziro con una taza de café en las manos

- Dr. Ziro quiero unirme al programa, quiero un pokemon de compañía - Le dije con determinación.

Él solo me sonrió - Jeje sabia que te iba a interesar... - Apoyando el café sobre la mesa

---CONTINUARÁ---