Idiota, tus mentiras nos unieron mas.

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__________ POV

Salí casi corriendo del establecimiento, el nombre de Rosemary me traía malos recuerdos, aunque mi madre dice que la que pasaba de ella era yo, las cosas no son así, ojalá hubieran sido así. Cuando Rosemary y yo éramos pequeñas, nuestros padres eran amigos, y quedaban muy seguido, así que nosotras también teníamos que estar juntas, y aunque Rosemary parecía una niña angelical, no lo era, aprovechaba cada segundo del día para hacerme sufrir, siempre rompiendo cosas y echándome la culpa, quitándome los juguetes, llenándome de pintura y después diciendo que fui yo intentando echársela a ella, siempre haciéndome sufrir. Pero ahora las cosas habían cambiado, ya no era la niña que tenía miedo de hablar, a la que cualquiera podía manipular,no, ahora sabía defenderme, y sobretodo, sabía que nada de lo que los demás hiciesen me podía hacer daño, ahora tenía a Álvaro...

-Mierda..-digo chocando con alguien y provocando que se caiga y se rompa la maceta que llevaba-Lo siento, no te había...

-Hola __________, tranquila, planeaba hacer que lo rompieses en tu casa, pero aquí también vale.

Una Rosemary sonriente miraba al suelo, a la maceta, aunque yo era la única que veía que sonreía.

-¿Qué estás diciendo?-dije dando un paso hacia ella.

-¡No, por favor, no me pegues!-grito poniendo cara de susto y elevando sus manos delante de sí.

Un montón de gente que pasaba se quedó mirándonos, y Rosemary empezó a llorar.

-Compraré otra, lo prometo, pero por favor, no me vuelvas a pegar-dijo con un tono de voz suave.

-Mamá, ¿esa chica es mala?-preguntó una niña a su madre,la cual solo le dijo que no mirara.

-Rosemary, ¿quieres dejar de decir estupideces y mentiras? Ya no me puedes hacer sentir mal solo con esto.

-Pero, si yo tan solo te traía flores y tu las has roto...

-¡Rosemary, deja de mentir!-no pude más y grite.

-Y-yo... lo siento-fueron sus últimas palabras para después salir corriendo y llorando.

Por el fondo se escuchaban murmullos "Pobre chica, la otra no debería tratarla así"¿Quien se cree que es para gritarle de esa manera?""No hay derecho" y más cosas, yo tan solo las ignoré y fui a casa.

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Llegué por fin a casa, estaba tan estrezada y enfadada que hasta había tomado el camino que pasa por la casa de Diablo, y al llegar solo quería dormir.

-He vuelto mamá-dije dejando mi bolsa en las escaleras y dirigiéndome a la sala.

-__________, ¿cómo has podido hacer llorar a Rosemary? Pensé que eso había quedado en cosa de niñas, pero veo que no has cambiado, me decepcionas-dijo mi madre acariciando el pelo de una Rosemary arrodillada en el suelo.

-Pero, mamá-intente explicarle las cosas, pero no me dejó.

-Nada de peros, a tu habitación, estás castigada. Y pídele perdón a Rosemary.

-Ni muerta-fueron mis últimas palabras, solopara después salir corriendo escaleras arriba, a mi habitación.

Me tumbé en mi cama y empecé a llorar, no era justo que mi madre defendiese a Rosemary siendo yo su hija.

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Horas después me desperté, no sabía cuanto tiempo había pasado, ni si Rosemary se había ido ya, solo sabía que me moría de hambre y que me dolían los ojos de tanto llorar. Me puse en pie y empecé a bajar a la cocina, intentando evitar la sala, ya allí me preparé cuatro bocatas, y serví en un vaso zumo, luego lo puse todo en una bandeja y volví a subir a mi habitación. Si, tenía mucha hambre.

Olvidame... #MyWattysChoiceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora