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Si, si quiero. - Con una gran sonrisa en mi rostro acepte la declaración de EunWoo de ser su novio, el era muy guapo, el capitán del equipo de basket y el más popular de la escuela. Aún que al principio lo dude puesto que no llevábamos ni una semana conociéndonos, me deje llevar un poco.
- Me gustas mucho - Dijo el y acercándose me beso con todo lo que tenía, me sorprendió y me asustó un poco, ya que sentía la mirada de casi todos en la explanada de la escuela, algunos sorprendidos y un par de ojos furiosos. Se retiro con una despedida y se marchó. Al voltear para dirigirme a mi salón me tope con mi mejor amiga, viéndome de una manera que no supe descifrar. - ¿ Me vas a explicar? Lo último que supe es que te gustaba Yoongi, así que no entiendo lo que acabo de ver. ¡ Maldita sea! ¿ Sabes en lo que acabas de meterte?  Chilita me miraba como si estuviera loco y tal vez tenía razón. - Me pidió que fuera su novio, así que no te preocupes. Además no puedo seguir persiguiendo a Yoongi, el es amable y siempre habla conmigo cuando nos encontramos, pero dudo mucho que le agrade para algo más, EunWoo es guapo y nos gustamos. Quita esa cara por favor y vámonos, vi pasar al profesor hace un momento.
Chilita solo movió la cabeza y caminamos juntos a clase. A la hora del receso me entretuve platicando con compañeros y al salir del salón vi a Chilita que venía de la mano con un chico jalando lo y otros tres empujando, la vi con curiosidad hasta que se acercó y me dijo: Quiero presentarte a mi a mi amigo Taehyung, esta en segundo grado y es muy agradable, lo conozco hace tiempo y quería que se conocieran- Me dio una mirada que me decía que no quería que fuera grosero, así que me dirigí a él y le tendí la mano - Mucho gusto, mi nombre es Hoseok- Levanto un poco la mirada y estrecho mi mano, solo levantando la ceja en contestación, enseguida se dio la vuelta alejándose. Todos estaban un poco aturdidos pero se presentaron y se marcharon. Honestamente no le tome importancia, ni siquiera le di una segunda mirada a Taehyung y le pedí a Chilita que fuéramos a la cafetería a desayunar.

Los días pasaban entretenidos entre clases y actividades, veía muy poco a EunWoo porqué el era un grado mayor que yo y su horario era diferente al mío, generalmente cuando el llegaba a la escuela el tenía que irse, así que solo lo veía cuando llegaba antes para sus entrenamientos, los cuales pasaban conmigo observándolo y al terminar solo me daba un beso y se iba a sus clases. Comenzaba a hacerme popular por ser el novio de EunWoo y por mi desempeño escolar, pero al mismo tiempo que eso pasaba yo comenzaba a hartarme, nunca lo veía, no platicábamos y no era así como quería que pasara. Chilita se daba cuenta y me preguntaba si era necesario que tuviera novio, específicamente ese novio, porque había chicos que estaban realmente interesados en mi y yo ni cuenta me daba. A estas alturas me daba vergüenza defenderlo ante ella y solo me quedaba callado.
Tres semanas después de iniciar mi relación me decidí, había un torneo de basket en la escuela y simplemente tome el valor de acercarme a EunWoo que estaba a pie de cancha viendo el partido, lo salude y el solo movió su mano hacia mí, me enoje tanto que lo jale de la sudadera y simplemente le solté lo que estaba pensando: Si no estas de humor y no tienes tiempo de tener una relación es mejor que terminemos aquí, estoy harto de que me ignores.  El me vio fijamente por unos segundos, relajo el ceño fruncido y sonrió. - Cómo tú quieras hermoso, eres libre. Se inclino, me dio un pico y en los labios y siguió viendo el partido. En ese momento sentí que mi rostro ardía en vergüenza, me gire para irme y choque contra alguien, sentí unas manos en mi cintura y al levantar el rostro unos hermosos ojos verdes estaban fijos en los míos - Lo siento, no te vi. ¿ Estas bien? ¿Te lastime? Aturdido me solté de su agarre y me fui corriendo a mi salón, me quedé ahí hasta que todo terminó y me retire a mi casa. No pude sacar esa mirada de mi mente, pero supuse que había sido el shock del momento. A Chilita le conté al otro día lo que había pasado y ella me abrazo, no dijo nada y ahí se quedó el tema. Me sentía un poco triste pero era más la vergüenza.
Todo seguía igual, clases, proyectos, amigos... Empecé a hablar con Yoongi otra vez, solo que ahora era en plan de amigos, me agradaba mucho decidí que no necesitaba una pareja, lo que no sabía era que Chilita no pensaba lo mismo que yo.
No se como pasó, pero Tae empezó a llamar mi atención. Aparecía de repente en las últimas horas de clase paseando por la escuela y siempre captaba mi atención, siempre tan serio que parecía siempre estar enojado, pero cuando nuestras miradas se encontraban una hermosa sonrisa se formaba en sus labios, era tan hermosa y fugaz que a veces me preguntaba si no la había imaginado. No hablábamos, pero se estaba convirtiendo en rutina, un mes después choque con él antes de bajar las escaleras, en un segundo estaba corriendo y al siguiente estaba en el suelo completamente empapada. - ¡Perdón! No te vi, déjame secarte-  Me levanto y me desabotono el suéter, lo saco de mi y lo sacudió. Me lo quito tan rápido que la piel se me erizo y me abrace a mi mismo, el paro lo que estaba haciendo y en un segundo me tenía pegado a su cuerpo y estaba frotando e los brazos - Lo siento, perdón, no debí hacer eso, fue un impulso. Parece que no hago nada bien hoy. Dame un segundo- Me soltó y se quito el suéter pasándolo por mi cabeza enseguida. - Gracias, pero no es necesario. Casi es hora de irme, de verdad -
-No, es lo menos que puedo hacer para disculparme, además... Me gusta como se te ve - Se inclino un poco y beso las comisuras de mis labios cuando me di cuenta estaba alejándose... ¿ Que demonios fue eso?.
No lo vi por dos semanas después de eso, pero no dejaba de pensar en él.

En mi mochila había una carta para él, llevaba con ella un mes pero no me atrevía a dársela. Habíamos tenido una pequeña charla días atrás. Estaba frente a la cafetería al otro lado de la cancha platicando con un compañero cuando lo vi salir de ahí, me miró pero no sonrió, en cambio comenzó a caminar alrededor de la cancha y cuando note que se dirigía a mi el estómago me dio un vuelco, se veía tan guapo todo serio y con la mirada fija en mi.
- Hola ¿ interrumpo?
- No ¿ porqué?
- Nos vemos en clase nene.
- Adiós Jimin.
- ¿ Nene?
- Dice que es de cariño, así es el. ¿ Qué pasa?
- Muy "cariñoso" tu compañero... Nada, en realidad solo quería saludarte.
Y la sonrisa que me dio me golpeó tan fuerte que juro que las piernas me temblaron.
- Tienes unos ojos hermosos ¿ Alguien te lo ha dicho? Alzando su mano paso un mechón de cabello detrás de mi oreja pero no retiro la mano, la puso sobre mi mejilla y la sostuvo un momento, mi nerviosismo solo me dejó negar con la cabeza y bajar ala mirada. Un dedo en mi barbilla me hizo alzar el rostro y mirarlo fijamente mientras se acercaba, me beso en la comisura del labio mientras susurro: Eres hermoso y me encantan tus ojos, espero verlos tan cerca otra vez.
Me soltó y se alejo. Lo único que pude hacer fue correr a mi salón y esconderme ahí. Días después Chilita y yo estábamos platicando cuando note que Jimin se acercaba a Tae, el estaba entrando a la escuela cuando Jimin se paro frente a él y le extendió un sobre rojo, lo tomó y lo guardo en su mochila dio la vuelta y se dirigió a la biblioteca. Perdí el color de mi cara e inmediatamente comencé a buscar la carta que tenía guardada.
- No te esfuerces, ya la tiene su dueño-  - ¿ Qué te pasa? ¿ Por qué se la diste? ¡ Ni siquiera sabes para quien era!
- Es para Tae. ¿ Acaso crees que no me eh dado cuenta de cómo lo vez? ¿ Crees que no lo vi besarte y a ti corriendo a esconderte? Solo te hice un favor. Te gusta, tu le gustas a él y solo te ayude un poco. Dio un suspiro y me abrazo. - Lo siento, pero ya me tenían harta, todo va a salir bien. Lo sé, lo siento en mis huesos, ustedes hacen una bonita pareja y... Si, deben estar juntos.

Tal vez debía molestarme con Chilita por hacer eso... La verdad es que estaba aliviado.

Sueño - HV-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora