You're Mine [Luckity]

Capítulo 2

"Cada fracaso nos enseña algo que necesitábamos aprender"

- Charles Dickens

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Entre olas de desesperación al ver aquella sombra acercándose más al portal todos cogieron sus armas sin dudarlo dos veces dispuestos a atacar.

Aunque claramente una sorpresa se llevarían todos al verlo.

Sin duda era algo inexplicable a la vista de muchos, pues aquel hombre alto cuando terminó de cruzar el portal levantó la cabeza de forma lenta.

En ella se mostraba una sonrisa de oreja a oreja como si este ya tuviera un objetivo claro y oh...

Claro que lo tenía.

Mientras tanto los héroes lo seguían mirando shockeados.

¿Era su imaginación o estaban viendo a un Quackity de otra dimensión?

Y es que ¡Dios!, la similitud era casi igual, claro que entre estos se podrían diferenciar algunas cosas.

Como la ropa, la cicatriz y sin mencionar las grandes alas que tenía aquel Quackity, sin duda eran deslumbrantes.

- ¡No se distraigan! ¡Alisten sus armas!

Gritó el oji-amatista mientras levantaba rápido a Quackity quien entre en su inventario sacaba rápido una arma y escudo con el cuál defenderse.

Antes de que todos pudieran reaccionar ante la orden de su líder el gran híbrido ya había extendido sus alas dándole vuelo a su cuerpo mientras se dirigía hacia el árbol donde su hacha había caído para por fin nuevamente tenerlo entre sus manos.

Aquello los puso en alerta, sin embargo ninguno avanzaba, el miedo los mantenía ahí.

Con el corazón agitado y un sudor frío el oji-amatista fue el primero en salir de su trance dirigiéndose al gran híbrido obteniendo una pelea digna de admirar, sin embargo este sabía que si sus compañeros seguían ahí parados esto no iba llevar nada bueno.

Antes de poder decir algo Doblas fue el segundo en acercarse para poder ayudar a su compañero.

Gracias a aquella acción todos salieron por fin a dar pelea sin importar el miedo pues aunque pareciera fácil por el gran número que superan los héroes al híbrido pues las alas que este poseía le daba una gran ventaja en su agilidad.

Este como si de un juego se tratara evadía cada espadazo y flecha que le daban mientras su sonrisa resplandecía en su rostro mostrando a la par sus afilados dientes.

Los héroes por su parte se encontraban algo cansados, por más que intentaran atacar se les era imposible, aún así, llenos de frustración continuaron con su propósito, aunque por lo visto cumplirlo se les iba hacer muy difícil.

Por otro lado, el hibrido ya se empezaba a aburrir de estar yendo de un lado para otro para simplemente evitar los ataques de estos.

Sin hacer más nuevamente dio un impulso con sus alas para poder estar un poco más arriba de lo que estaba y así poder clavar su mirada a su objetivo.

Mismas personas, diferentes dimensiones, uno con un objetivo claro y el otro simplemente temblando de miedo en su lugar mientras distraído miraba a sus compañeros... muy mala idea, pues el hibrido lo vio como una oportunidad única para poder acercarse y cumplir con su parte del plan.