𝑮𝑶𝑫 𝑰𝑺 𝑾𝑶𝑴𝑨𝑵

𝐄𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐨𝐬 𝐲 𝐬𝐨𝐫𝐩𝐫𝐞𝐬𝐚𝐬 𝐢𝐧𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐝𝐚𝐬

𝐼𝑑𝑖𝑛𝑎.

Después de bailar hasta que mis piernas casí me dejaran caer,me encuentro sentada al lado de mis padrés y hermana en nuestros asientos,con el resto de los invitados aún bailando y converzando unos con otros.

Me siento un poco ansioza,ya que porfín lo vere,espero y todo salga bíen,siento un nudo en el estomago de la emoción.

La música sigue siendo tranquila mientras todos en el salón hablan entre si.

Observo como los sirvientes preparan los ultimos detalles de la mesa de bocadillos.

No puedo más con la espera,me pongo de pie,atrayendo las miradas de mi hermana y mis padrés.

Sonrio levemente para que no pregunten nada.

-Nesecito un poco de aíre,permiso majestades.

Hago una reverencía y mi padrés me da el permiso asintiendo con la cabeza.

Levanto mi cabeza y bajo las escalones,me doy medía buelta y emprendo camino a la salída de el salón,con las reverencías de algúnos se cruzan en mi camino,logro salír y camino por los pasillos hacía el jardín tracero de el palacío.

Le dije a lady fatíma que se divirtiera está noche,hasí que,por suerte se encuentra bailando con algún jovén.

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Me topo con unas puertas cerradas delante de mi,atravez de el cristal puedo observar los jardínes,pongo una mano en la perilla y abro estás,salgo y una brisa calida me envuelve nadamás poner un pie fuera.

Empiezo a camínar por el jardín en busca de él.

El césped se aplana bajo mis pasos,llego a una de las tantás fuentes de el palacío.

Me detengo justo frente a está,observo la estatura que la conforma.

»𝐻𝑒𝑟𝑎,𝑙𝑎 𝑑𝑖𝑜𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝑒𝑙 𝑚𝑎𝑡𝑟𝑖𝑚𝑜𝑛𝑖𝑜 𝑦 𝑙𝑎 𝑓𝑎𝑚𝑖́𝑙𝑖𝑎«

-Majestad.

Escucho su voz tras de mi,doy medía buelta quedando frente a frente.

Sonrío inconsíentemente mientras lo observo,es más alto que yo,con un hermoso cabello azabache,piel clara,delgado,de labios delgados y hermosos ojos café oscuro.

Hace una reverencía.

Detesto que lo haga cuando nos vemos,pero el siempre insiste en que lo deje hacerlo.

-Philip.

Me abalanzo sobre el,abrazandolo.

Me rodea la sintura con sus manos.

-Mi querída Idina.

Desposita un calído beso en mi frente,sonrío hante la acción.

-Te extrañe,cariño.

Dise en mi oído y mi corazón da un brinco.

-Yo tambíen te extrañe.

Digo mirandolo directo a sus hermosos ojos color café oscuro,casí un negro,que adoro.

-Perdona si te hise venír hasta aquí en un días en un día importante,pero ya no padía soportar un día más sin verte.

Me observa con una hermosa sonrisa en su rostro.

-Estás perdonado,yo tambíen estába ansioza por verte.

Ambos nos miramos directamente a los ojos y unimos nuestros labios en un beso lento,pero necesitado,serre mis ojos anté la senzación de sus labios.