I see you Ao'nung

Él me gusta

Ao'nung💧

Un balde, un balde de agua fría callo en mi cara, me removí y desperté asustado. ¿Qué fue?

- Qué demonios.- Sobe mi cara, el agua fría quemaba, literalmente.

-Ya basta hermanito, despierta.

- Tsireya..

-¿Qué? Es la única forma de poder despertarte, eres como un tronco ahí, no te mueves.

-Dejame dormir. ¿Qué quieres?

-Hoy es el díaaaaaa.

- ¿Día? ¿Qué día?

-No me digas que se te olvidó Ao'nung.

Su mirada era sombría, esa mirada me daba miedo.

-Deja de mirarme así y dime qué día es hoy como para que me despiertes así.

Me acurruque de nuevo en mi hamaca cerrando los ojos.

-Ao'nung.

La ignore, a lo que ella me pateo el estómago haciendo que me levanté tosiendo.

-Que carajos, ya basta.

- Hoy llegan nuestros hermanos!

Mi mirada cambio a una enojada a una completamente sorprendida, era verdad, hoy llegaban nuestros hermanos tulkum después de su partida.

-Es verdad, es verdad-. Me pare por fin saliendo de la choza viendo como todos los Na'vi hablaban entre risas, yendo de un lado a otro, esperando algo.

Mi mirada se fue a otro lugar, vi a Ha-ra con sus hermanos completamente confundidos.

Es obvio que no entendían que pasaba. Me acerque junto a Tsi'reya, ellos nos miraban esperando una respuesta de lo que estaba pasando. A lo que Ha-ra se me acercó.

-¿Qué está pasando?

-Hoy llegan nuestros hermanos-. Comentó Tsi'reya con una sonrisa.

-¿Hermanos?-. Dijo Loa'k confundido.

-Si, nuestros hermanos espirituales, los tulkum.- Hable yo ahora.

-He oído de ellos, me encantaría poder verlos por fin.

Gritos, gritos fue lo que escuchamos, pero gritos de alegría, volteamos rápidamente al horizonte, vimos a los Tulkum venir cantando, era hermoso, por fin iba a volver a ver a mi hermano.

-Llegaron!-. Grito Tsi'reya lanzándose al mar, siendo rápidamente seguida por su Ilu.

-Vamos-. Dije yo con una sonrisa.

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Ha-ra🍃

Nos tiramos al agua siguiendo a Ao'nung y a Tsi'reya, quedamos encantados al ver semejante hermosura, esto.. era algo que no se veía todos los días, por lo menos para nosotros.

Vi como Ao'nung se acercaba a un Tulkum con muchos tatuajes en su torzo.

El se veía muy feliz, nunca lo había visto sonreír de esa forma, me le quede mirando embobada.