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"Tienes que darme vacaciones." Louis dice de manera inmediata. Simon niega con la cabeza. "Eso no va a suceder, Louis. Y ya lo digo por quinta vez."

"No me importa. ¡Simon, dame vacaciones!" La voz de Louis está llena de pánico.

"Louis, apenas estás trabajando durante dos semanas otra vez. Todavía no puedo darte vacaciones. Eso no es justo para los demás. No va a suceder. Deberías estar agradecido de que te volviera a contratar. Dejaste el hotel justo después del verano.

Me diste una vaga excusa y me dejaste mucho trabajo al irte a Londres. Así que no, Louis Tomlinson, no tendrás vacaciones. Fin de la discusión, puedes irte de mi oficina." Simon no mira al chico a los ojos mientras guarda los papeles que Louis acaba de firmar en una carpeta.

Louis no puede creer esto. ¿Qué está haciendo Harry aquí? ¿No sabe que está aquí otra vez? Le dijo que volvería a España. Esto debe ser alguna broma. ¿Dónde están las cámaras? Deben estar en alguna parte.

Esto no puede ser verdad. Su ex no puede estar aquí. Louis siente que tiene ganas de vomitar y corre directamente hacia los baños de la recepción. Son los más cercanos a la oficina de Simon.

Después de que Louis termina, abre la cabina del baño. Se limpia un poco de saliva con el dorso de la mano y va al fregadero a lavarse. Justo cuando Louis quiere tomar el jabón, escucha una voz que siempre reconocería. Nadie tiene una voz tan baja y tan áspera.

"No puedo creer que aquí es donde nos reencontremos."

Louis deja caer el jabón en el fregadero y se muerde el labio. Esto no puede estar pasando ¿Por qué, maldita sea, por qué? "Debería ser el lugar donde nos despedimos también." Louis trata de sonar indiferente mientras se seca las manos con una toalla de papel.

"No seas así, Lou." Louis siente una mano en su hombro y se estremece. La electricidad atraviesa su cuerpo, pero no puede permitirlo. Esto no va a pasar.

"Puedo ser como quiero ser. No depende de ti decirme qué hacer o decir." Y por primera vez Louis se da la vuelta y mira esos ojos. Esos hermosos ojos verde esmeralda que solía amar y honestamente todavía ama. Está haciendo todo lo posible para no ahogarse en ellos. Desde la primera vez que vio ese par de ojos supo que había caído por ellos.

"Veo que todavía eres descarado. Es bueno saber que todavía eres tú." Harry le sonríe al castaño. Intenta ver en los ojos de Louis, pero sabe que él hace todo lo posible para ocultar lo que siente.

"Siempre he sido yo mismo. Fuiste tú quien cambió, Harry, no yo." Con estas palabras Louis quiere salir del baño. No puede estar aquí con él ahora mismo. Se va a asustar y está al borde de un ataque de pánico. Necesita encontrar a Zayn o Danielle.

Cuando toma la manija de la puerta, siente una mano fuerte envolviendo la muñeca de su otra mano. "Lou... Por favor, no seas así. No quiero pelear contigo. Quiero hablar contigo." Los ojos de Harry son suplicantes y Louis sabe que si los mira un segundo más se rendirá.

"No, no, perdiste ese derecho. Por favor, déjame ir. No quiero que me toques. Los huéspedes no pueden tocarme."

Ahí está la palabra otra vez. Huésped. La palabra de seguridad de Louis cuando quiere distanciarse del rizado. Está usando exactamente la misma estrategia que usó la primera vez que decidió ignorar a Harry.

Louis aparta su brazo de Harry y sale corriendo de la recepción directo a su habitación. Él no puede manejar esto, realmente no puede. Necesita encontrar a Zayn ahora mismo.

"Oye, Lou. ¿Lou? ¿Qué pasa?" El ojiazul cae directamente en los brazos de su mejor amigo. Está temblando y llorando. Está perdiendo el control de su respiración y Zayn sabe exactamente lo que tiene que hacer. Toma ambas manos del castaño y trata de hacer contacto visual.