Mi último deseo

Piloto

Hace mucho tiempo existía un reino llamado Nare, donde los ciudadanos eran felices con los guardianes que protegían el reino. Los guardianes iban a dar a luz a una niña. Sin embargo, un día, una malvada bruja junto con sus secuaces, destruyeron todo el reino, las casas estaban en llamas y los guardianes tenían miedo en que falleciera el bebé, así que tuvieron una gran decisión, le pidieron a una hechicera que ese bebé estuviera resguardado por mucho tiempo y naciera con otra pareja para así que ella regresara al castillo y reinara.
Después de todo, los guardianes tuvieron que usar su último respiro para poder derrotar a esa bruja. Desde ahí, nadie volvió a saber de ese reino...

Hola, mi nombre es Celeste y hoy te vengo a contar mi historia, es un poco confusa pero al tiempo entenderás. La verdad las cosas pasaron muy rápido.

Un día en la mañana desperté como siempre, me puse mi uniforme, me peine un poco y fui a desayunar.

-Hola hija, ¿cómo dormiste?
-Buenos dias madre, tuve un sueño un tanto extraño pero al final dormí bien.-Lo dije desanimada.
-Bueno.. ¡corre! Que se te está haciendo tarde, Cele.- Lo dijo mi madre intentando darme ánimos.

Llegue a la escuela, todos los de mi salón me miraban raro. Yo pensaba que me miraban de esa manera por mi cara apenas recién levantada.

Llegue a mi asiento que estaba alado de mi mejor amiga Elizabeth. Ella era mi única amiga, la que me hacía reír siempre, y me ayudaba cuando unos chicos del mismo salón me molestaban.

-¿Disculpa? Aquí va mi mejor amiga, ¿acaso eres nueva? No te había visto por aquí antes.-lo dijo mi mejor amiga confundida.
-¿Qué dices Lizzie? Si soy yo, Celeste, tu mejor amiga.-Lo dije aun más confundida que ella.
-Espera, ¿enserio eres ella? Reconocí tu voz muy rápido, te ves muy diferente, ¿Tuviste un glow up?-Lo dijo soltando una risita.
-¿De que hablas? Si me veo igual que siempre.-un tanto molesta le dije.
-En verdad deberías verte en un espejo... Te ves bien.
Sacó su celular, puso la cámara y me tomo una foto, me la mostró y...

-¡¿QUE!?-Lo dije asombrada.

Ni siquiera yo me reconocí, definitivamente esa no era yo... ¿o tal vez si?
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A mi me encantaban los cuentos de hadas y creía en muchas cosas que mi madre me decía que no eran reales y solo eran un invento mío, así que en ese mismo instante me puse a pensar en el sueño que tuve anteriormente y del deseo que pedí esa noche. Entre tantas ideas, lo primero que se me vino a la mente fue que ese deseo se había hecho realidad.

Para ser más clara, lo que yo deseé esa noche fue que cambiara por completo, ósea por ejemplo: siendo más sociable, siendo mucho más linda que antes (cumpliendo mis propios estándares de belleza obviamente) defendiéndome sola, etc. Eso era mi sueño; Estaba tan emocionada y sorprendida. Un sueño hecho realidad era algo tan grande para mi.

Me senté alado de ella y le dije a mi mejor amiga emocionada.

-¿Tú crees en la magia?
-¿Porqué tan de la nada? Bueno, pues no tanto, pienso que eso es solo para niños pequeños y solo es un invento para hacerlos felices.
-Amm.. bueno ya no importa, ahora seré otra persona, estuve emm..-estaba pensando en que inventarme.-practicando, si eso, practicando para ser una nueva persona.-lo dije nerviosa.
-Aa, ¿okey?- lo dijo claramente confundida.

Después hubo clases y tuve que decirle a medio mundo que era yo y no una chica nueva de la escuela.

En mi casa, llegue y corrí hacia mi cuarto, ni siquiera saludé a mi madre pero estaba agotada, no quería hacer literalmente nada.

Se hizo de noche y yo estaba haciendo la tarea, hasta que vi un libro que definitivamente nunca había visto en mi escritorio. Parecía un libro infantil pero cuando vi que se llamaba "El reino Nare" recordé haber visto ese nombre en algún lugar y decidí leerlo en voz alta ya que al parecer era de fantasía.

Todo extrañamente coincidía con el sueño que había tenido esa noche, era muy interesante lo que decía sobre que una bruja había destruido ese pueblito. Quería saber más pero después de "nadie volvió a saber de ese reino..." no hubo más palabras escritas, decepcionada fui a la última hoja esperando encontrar una pequeña continuación. En la última hoja me percaté que había unas letras que yo podía leer, así que leí en voz alta.

-oriatur nunc sol, quia in loco illo regnabo.

Empece a tener un leve dolor de cabeza, tire el libro ya que me sentí muy mal con un ruido en la cabeza muy fuerte, intente taparme los oídos pero ese ruido venía de mi cabeza. Cuando por fin acabo todo ese dolor, vi una ilusión de una chica con un sombrero que decía.

-Tienes que volver ya, tienes que destruir a esa bruja. Para poder irte ya, tienes que elegir a una persona muy especial para que te ayude y la puedas destruir. Repite esas mismas palabras que pronunciaste pero con esa persona, por lo menos 6 veces y ya estarás en tu verdadero mundo. Suerte.

Recuerdo que desapareció y ya no regreso. Me quede pensando en sus palabras y decidí que esa persona era Elizabeth.
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Esta aventura apenas comienza.

No se cuando estaré actualizando pero intentaré ser activa. Ojalá te guste la historia.

¡Nos vemos en el próximo capítulo!